Esta es la historia de Blacky, la perrita que delinquía en el Bronx y ahora es agente de la Policía

La canina era integrante de la peligrosa banda del microtráfico “Los Sayayines” y había sido entrenada para atacar a las víctimas de los delincuentes; ahora es parte importante de las labores de las autoridades bogotanas

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(captura video Dirección de Protección y Servicios Especiales de la Policía Nacional)
(captura video Dirección de Protección y Servicios Especiales de la Policía Nacional)

En mayo de 2016 las autoridades bogotanas realizaron un impresionante operativo de intervención a el sector conocido como el Bronx, la ‘olla’ más famosa y la más peligrosa de la ciudad. Desde entonces los habitantes de la ciudad han conocido historias de terror sobre lo que sucedía por esas calles, túneles y casas donde operaba una de las bandas de tráfico de droga más poderosas de la ciudad, Los Sayayines. Hoy en día, uno de sus importantes integrantes hace parte de la Policía.

Se trata de Blacky, una perrita que por muchos años fue utilizada por la banda criminal para sus operaciones de tráfico de drogas, pero que ahora hace parte del grupo de caninos que apoya las actividades de la Policía Metropolitana de Bogotá. El animal fue encontrado en pésimas condiciones por las autoridades tras el operativo en la ‘olla’ y pudieron confirmar que había sido entrenada por Los Sayayines para lastimar y asustar a las personas.

Tras rescatarla del lugar, los uniformados se han hecho cargo de la canina y , según detalló, Daniel García, jefe de la Policía Ambiental en Bogotá, Blacky era utilizada por la banda criminal “para hacer actividades ilegales”, pero tras la intervención de las autoridades “decidimos adoptarla en el grupo de Policía Ambiental para darle una buena acogida y que perteneciera a nuestra familia”.

La canina fue rescatada en medio del operativo en el Bronx en 2016 y era utilizada por "Los Sayayines" para atemorizar a los habitantes

Blacky tiene 16 años y, según las autoridades, fue entrenada por Los Sayayines para atacar e infundir miedo a las víctimas de la banda criminal; sin embargo, en la actualidad ejerce una importante labor dentro del equipo de la Policía de Bogotá. “Cuando ella ve a alguien extraño, diferente a la unidad, con su ladrido nos avisa que alguien se acerca. Nos ayuda a cuidar, a estar muy atentos”, el uniformado confirmó que lograron que el entrenamiento de la canina fuera positivo para la entidad, aprovechando su gran olfato y capacidad de alerta.

A pesar de su pasado ‘criminal’ y el grave maltrato al que era sometida por parte de los integrantes de una de las bandas más temidas de la ciudad que fue desarticulada en 2016, Blacky ha logrado integrarse de una buena manera al equipo de la Policía Ambiental, siendo la guardiana que permanece en las instalaciones de la entidad.

Además, después de ser utilizada como herramienta para asustar, la canina ha logrado mejorar su relación con los humanos. “Cuando fue rescatada era muy agresiva por el entorno en el que se encontraba, pues era muy maltratada por este grupo, pero después de estar con su poder solo da cariño y amor a todos sus dueños”, recordó el oficial sobre la perrita que ahora porta con orgullo el título de agente de policía.

Más de 2.500 funcionarios de la Policía, Ejército, Fiscalía y funcionarios de la secretaría de Salud del Distrito de Bogotá y el Instituto de Bienestar Familiar intervinieron el Bronx en 2016. Photo by Daniel Garzen Herazo/Pacific Press Via Zuma Wire/Shutterstock (5701803h)
Más de 2.500 funcionarios de la Policía, Ejército, Fiscalía y funcionarios de la secretaría de Salud del Distrito de Bogotá y el Instituto de Bienestar Familiar intervinieron el Bronx en 2016. Photo by Daniel Garzen Herazo/Pacific Press Via Zuma Wire/Shutterstock (5701803h)

Blacky es sola una de los 48 perros y más de 28 gatos que fueron rescatados en medio del operativo en el Bronx en el año 2016 y que, después de años viviendo bajo la zozobra y el maltrato en esta olla de Bogotá, al igual ella encontraron amor en otros hogares que decidieron adoptarlos.

Por su parte, el teniente coronel Carlos Augusto González, jefe seccional de Protección de la Policía, reveló recientemente en diálogo con Noticias Caracol que las labores de rescate de animales maltratados por parte de las autoridades en Bogotá no se han detenido, puesto que “solo el año pasado logramos rescatar y aprehender 590 animales. Ya para este año llevamos 33 animalitos rescatados”.

Según el oficial, la historia de Blacky sirve para que los bogotanos se motiven más a darle una segunda oportunidad a los animales que a diario están siendo rescatados por las autoridades. “Queremos invitar a la ciudadanía a que lleve procesos de adopción para darles una nueva oportunidad a estos animalitos”.