La epopeya del francés que sobrevivió al Sahara tras convertir en moto su auto accidentado

Emile Leray era un licenciado en “mecánica africana”, pero desconocía que esas aptitudes iban a rescatarlo de la inmensidad del Sahara. La aventura de un sobreviviente que transformó su Citroën 2CV en una moto improvisada

Compartir
Compartir articulo
En marzo de 1993 Emile Leray vivió doce días en el desierto del Sahara fabricando una moto artesanal
En marzo de 1993 Emile Leray vivió doce días en el desierto del Sahara fabricando una moto artesanal

En la historia de Emile Leray hay un capricho, un conflicto bélico, un argumento irrisorio, una roca, un don y la inmensidad del Sahara. Hay brotes de travesía y travesura. Hay primero un auto y después una moto. Hay miedo, necesidad, supervivencia y el resurgimiento inesperado de un talento. Está Emile Leray, un aventurero francés de 43 años licenciado en "mecánica africana" según su propia universidad, y su Citroën 2CV, caratulado como el "camello de acero" por su adaptabilidad al desierto. Es la historia del auto que se hizo moto para escaparle al brutal encierro del Sahara.

En marzo de 1993, se embarcó en un raid solitario por el sur de Marruecos, el noreste africano. Viajaba en auto por una ruta que bordeaba el desierto del Sahara Oriental. Tenía la intención de llegar a Mauritania. En las inmediaciones de la ciudad Tan Tan, una patrulla militar lo interceptó. Tenía restringido el paso: iba a desembocar en una zona controlada por el Frente Polisario, un movimiento de liberación nacional del Sahara Occidental que combate contra la ocupación de Marruecos y por la autodeterminación del pueblo saharaui. Aquí el conflicto bélico: la tensión en armas entre ambos países había interrumpido su aventura.

Los restos del Citroën 2CV le sirvieron para protegerse del calor y las tormentas de arena
Los restos del Citroën 2CV le sirvieron para protegerse del calor y las tormentas de arena

Los militares lo convencieron de que retroceda rumbo al norte. Temían que el Citroën motorizara a los combatientes enemigos. Le piden también si puede trasladar a alguno de los soldados regreso a la civilización. Pero Emile Leray desconfía -aquí el argumento irrisorio-: alega que su seguro le prohibía transportar a un acompañante. Y huye. Aunque vuelve.

Decide continuar campo traviesa, rodeando el puesto de control. Aquí el capricho: insistir con su empresa destino Mauritania. Pero una roca, un don y la inmensidad del Sahara se apoderaron de su suerte los próximos doce días de travesía. Una piedra inoportuna había destrozado el brazo de la suspensión delantera derecha, impidiendo el movimiento del automóvil. Estaba a la intemperie, en el corazón de la infinidad, demasiado lejos de la humanidad para ir a pie, con diez días de víveres y un auto valioso que no quería abandonar a merced del desierto.

El mecánico francés respetó la ubicación de la matrícula aunque su vehículo haya cambiado radicalmente
El mecánico francés respetó la ubicación de la matrícula aunque su vehículo haya cambiado radicalmente

Tenía 43 años. Hizo balance de la situación, desarrolló un plan de supervivencia. Tramó una idea inverosímil: convertir al Citroën 2CV inservible en una moto desesperada que lo extraiga de la magnitud y el cruel silencio del desierto. Emile Leray era especialista en transformación de vehículos. Había trabajado en talleres de Nouakcott, Bamako y Kakolou. Se había recibido de licenciado en "mecánica africana", según su propia versión de los hechos.

Tenía un valioso espíritu de superación y alicates, llaves fijas, alambre, un martillo, un corta chapa, un pequeño serrucho y tornillos. Lo desmanteló por completo. Conservó la carrocería para protegerse de los 40 grados diurnos y las gélidas noches del Sahara, y guarecerse de las tormentas de arena. Las medias fueron los guantes, el paragolpe y algo de plástico del tablero de mandos, el asiento; el auto, una moto. La batería, la caja de cambios, el depósito de combustible, la transmisión. No disponía de equipos de soldadura, taladros. Hizo perforaciones con el martillo y los tornillos. Doblaba pedazos de metal durante varios días. Creía que en tres días podía terminar la improvisada motocicleta. Fueron doce largas jornadas con disciplina marcial de racionalización del agua.

Cuando los militares lo encontraron, a Emile Leray lo multaron y le incautaron la pieza mecánica
Cuando los militares lo encontraron, a Emile Leray lo multaron y le incautaron la pieza mecánica

La única beneficiada por algo de suspensión era la rueda delantera. La trasera, la encargada de la propulsión. El motor transmitía la potencia a la rueda de forma similar a las clásicas bicicletas a motor y el tambor de freno giraba directamente sobre el neumático. El tambor derecho estaba bloqueado con un cinturón para que el diferencial abierto transmitiese toda la fuerza al tambor motriz. Esta solución le permitía alcanzar una velocidad máxima de veinte kilómetros por hora, suficiente para alcanzar la salvación.

No tenía frenos y el escape era libre. La matrícula original -curiosamente- pretendía respetar las disposición vehicular vigente. La maniobrabilidad era peor que discreta. El carácter artesanal de la restauración demandaba reparaciones sistemáticas de improviso. Emile Leray se cayó varias veces de su ex auto pero sobrevivió.

La rueda delantera era la única con cierta suspensión. La trasera, la encargada de la propulsión
La rueda delantera era la única con cierta suspensión. La trasera, la encargada de la propulsión

Cuando sólo le quedaba medio litro de agua fue interceptado por un todoterreno militar. Sus rescatistas no le creyeron la epopeya hasta que no encontraran los restos del 2CV, las huellas de su idoneidad. Los gendarmes sin embargo no expresaron admiración: lo multaron por conducir un vehículo diferente al descripto en los papeles. La carátula fue "importación ilegal de un vehículo" y le incautaron la pieza mecánica. El héroe volvió a su país. Tres meses después de aquel fatídico marzo de 1993 pagó una cifra abultada para recuperar la "moto" que le salvó la vida.

LEA MÁS:

Un capricho napoleónico: la curiosa historia de por qué manejamos por la derecha

El Ave Fénix de la industria automotriz: la historia del primer superauto que resurgió de las cenizas

El único auto de la historia que exigía ganar un juego para conducirlo

Más Noticias

Por qué los espacios inclusivos son clave para el desarrollo de las personas con autismo

Los diagnósticos de TEA han aumentado en el mundo un 317% en 20 años. Responsables de organizaciones, espacios culturales, entre otros, relataron en el marco de las jornadas de la Semana Azul, qué acciones están tomando para transformar sus lugares en sitios más empáticos para quienes tienen esta condición
Por qué los espacios inclusivos son clave para el desarrollo de las personas con autismo

“El estrés es el depredador del siglo XXI”, un experto cardiólogo advierte cómo daña el corazón de forma silenciosa

El reconocido especialista argentino Martín Lomardero profundiza en el vínculo entre las enfermedades cardíacas y los diferentes problemas cotidianos. Cómo proteger el bienestar cardiovascular
“El estrés es el depredador del siglo XXI”, un experto cardiólogo advierte cómo daña el corazón de forma silenciosa

Egocentrismo infantil: cuáles son sus características y a qué edad se supera

Muchas veces los niños tienen conductas que son juzgadas como de mala educación o poca empatía. Sin embargo, no hay allí una intención de egoísmo o daño, simplemente no pueden ponerse en el lugar del otro. Cómo aprenden que otras personas puedan tener creencias o deseos diferentes a los suyos
Egocentrismo infantil: cuáles son sus características y a qué edad se supera

El día que Elon Musk estuvo al borde de la muerte por malaria

Luego de un primer diagnóstico errado de meningitis, un especialista en enfermedades infecciosas determinó que el multimillonario dueño de Tesla y la red social X, había contraído la enfermedad durante unas vacaciones en su primer regreso a Sudáfrica desde los 17 años. Por qué estuvo “a horas de morir”, según su biografía
El día que Elon Musk estuvo al borde de la muerte por malaria

Errores comunes al usar el microondas: qué alimentos y líquidos evitar

El manejo inadecuado de este electrodoméstico puede resultar riesgoso. Por qué algunos alimentos son capaces de ocasionar incidentes o incluso tener consecuencias negativas para la salud. Claves para mantenerlo limpio
Errores comunes al usar el microondas: qué alimentos y líquidos evitar
MÁS NOTICIAS