En colegio distrital estudiará niña discriminada por no tener tenis blancos

La Secretaría de Educación Distrital le ofreció un cupo en el mismo barrio donde vive. La menor también inició una colecta de zapatos para estudiantes que estén en su misma situación

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Una niña no pudo entrar a su colegio al no llevar tenis blancos, como lo pide el manual de convivencia.
Una niña no pudo entrar a su colegio al no llevar tenis blancos, como lo pide el manual de convivencia.

En un comunicado de prensa, la Secretaría de Educación Distrital informó que la niña Salomé Vergara, quien se hizo conocida por haber sido devuelta de su colegio por no tener los tenis blancos del uniforme, fue integrada al sistema educativo público de Bogotá.

A la menor le ofrecieron un cupo para empezar el grado quinto de primaria en el Instituto Educativo Distrital Arborizadora Baja, ubicado en el barrio del mismo nombre en la localidad de Ciudad Bolívar.

Este colegio queda a muy pocas cuadras de donde vive la familia de Salomé. Además, el plantel recibió distinciones en la Gala de los Mejores 2021 por sus proyectos para la enseñanza de la lectoescritura. Además, el plantel ofrece bachillerato técnico homologado por el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA).

Gisela Prieto, mamá de Salomé, le dijo al equipo de prensa de la SED que:

Se comunicaron conmigo y muy amablemente me dieron algunas alternativas de colegios para mi hija. Gracias a Dios había un cupo para ella en el colegio Arborizadora Baja, que nos queda muy cerca de la casa y ya quedó asignada. Ella se agradó y dijo “¡Listo, mami, de una! Que sea ese colegio para que pueda entrar a estudiar”

Con respecto al Liceo Pedagógico Madrigal, donde ocurrió el caso de discriminación, la secretaría aseguró que siguen adelantando las investigaciones sobre lo ocurrido para tomar decisiones al respecto.

Donatón de tenis blancos

En varios medios de comunicación donde ha tenido la oportunidad de pronunciarse, la familia Vergara Prieto ha dicho que quiere hacer colectas para evitar que su caso se repita entre niños igual de necesitados, pero con menos notoriedad.

De hecho, el caso de Salomé podría presentarse con frecuencia: Ciudad Bolívar es una de las localidades con más demanda de cupos en colegios distritales. Al no haber cupos en instituciones cercanas a sus casas, los niños se ven forzados a entrar en el grupo de más de 900 mil estudiantes de colegios privados de Bogotá y ser sujetos de este tipo de discriminación, bajo el amparo del manual de convivencia.

“Esto lleva a que existan circunstancias de déficit de oferta educativa, pues no hay colegios oficiales suficientes en algunas zonas para atender toda la demanda. Ese es precisamente uno de los líos que se abordaron en esta administración y que se busca solucionar con el Plan de Ordenamiento Territorial”, le dijo Carlos Reverón, subsecretario de Acceso y Permanencia de la SED al diario El Espectador.

El pasado jueves, la niña Salomé Vergara fue invitada a la emisora musical Tropicana para hablar sobre su caso y le propusieron hacer una donatón de zapatos deportivos blancos, a lo que ella accedió. La ‘vaca’ desde la emisora irá hasta el próximo martes primero de marzo.

Quienes quieran participar en la donación pueden comunicarse a través de la línea de WhatsApp +3185908717.

El caso de Salomé Vergara

En la mañana del pasado martes 15 de febrero, una madre indignada subió una denuncia a sus redes sociales. Allí narró una situación que vivió su pequeña hija, Salomé Vergara, mientras trataba de entrar al Liceo Pedagógico Madrigal, colegio privado del barrio Arborizadora Baja de la localidad Ciudad Bolívar.

La mujer subió una serie de videos en los que se ve a su niña llorando, ya que la devolvieron a la entrada del plantel educativo por no usar tenis de color blanco, los cuales —según la institución— son parte del uniforme deportivo pero la familia aún no ha podido comprar.

En los videos se ve al padre de familia visiblemente frustrado en la portería del colegio. El hombre alega que a su hija se le violó el derecho a la educación y que en sus tiempos eso era sagrado, incluso cuando faltaba dinero para zapatos o la pensión.

También se le oye exigir la devolución de todo su dinero, puesto que la niña ya tiene el resto de la indumentaria y hasta la agenda oficial de la institución.

A una niña se le impidió el ingreso a su colegio por no haber comprado unos tenis blancos.

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