Joran van der Sloot: Reportan que neerlandés habría intentado quitarse la vida en su celda del penal Challapalca

El extranjero cumple una condena de 28 años de prisión por el asesinato de la joven peruana Stephany Flores en 2005

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(AP Photo/Karel Navarro, File)
(AP Photo/Karel Navarro, File)

Desde el Establecimiento Penitenciario de Challapalca, ubicado en la región Tacna, se dio a conocer que el ciudadano neerlandés Joran van der Sloot, procesado y sentenciado a 28 años de prisión por el asesinato de la joven peruana Stephany Flores en 2005, habría intentado quitarse la vida dentro de su celda.

De acuerdo con el reporte difundido por el programa dominical Panorama, de Panamericana Televisión, agentes penitenciarios encontraron a Van der Sloot en una situación de riesgo hacia las 9 de la mañana de este sábado 13 de diciembre.

El interno utilizó una tira improvisada a partir de una colcha para intentar asfixiarse. Al percatarse de lo ocurrido, el personal del penal intervino y le brindó atención inmediata para salvaguardar su integridad.

Hasta el cierre de esta nota, el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) no ha emitido un comunicado sobre el incidente registrado al interior de las instalaciones carcelarias.

Joran van der Sloot es
Joran van der Sloot es acusado de la desaparición de Natalee Holloway (Aruba) y condenado a prisión por el asesinato de Stephany Flores (Perú).

Pedido de disculpas

Hace una semana, Joran van der Sloot hizo públicas sus disculpas a la familia de Stephany Flores en declaraciones recientes.

Por primera vez ante cámaras, afirmó no haber tenido la oportunidad de pedir perdón en diecisiete años y expresó su deseo de explicar sus acciones, si la familia de la víctima se lo permitiera. Reconoció que, si no desean escucharlo, entendería la decisión.

Desde la prisión ubicada a más de 4.600 metros sobre el nivel del mar, Van der Sloot relató cómo la rutina carcelaria limita su vida diaria.

El penal se caracteriza por condiciones extremas de frío y aislamiento, reservado a internos de alta peligrosidad. Señaló que su día transcurre enfocado en la actividad física, la lectura y la religión, mencionando su acercamiento a la fe cristiana y la lectura regular de la Biblia.

“Yo me dedico a ejercicio, lectura, leo la Biblia. ‘Amen a sus enemigos, hagan el bien a los que los odian, bendigan a los que los maldicen y oren por los que los maltratan’. Amén”, dijo para el referido dominical.

“En diecisiete años nunca tuve la oportunidad de pedir perdón por lo que hice. Si algún día puedo conversar y explicar, tal vez, por qué sucedió lo que sucedió, me gustaría bastante poder hacer eso. Y si ustedes no quieren eso, yo entiendo eso también”, agregó.

El traslado de Van der Sloot a Challapalca, según las autoridades, obedeció a la necesidad de reforzar los controles penitenciarios y evitar beneficios derivados de su notoriedad internacional.

Su historia se vincula no solo con el caso de Stephany Flores en Perú, sino también con la desaparición de Natalee Holloway en Aruba, crímenes que lo convirtieron en figura central de investigaciones policiales y mediáticas en ambos países.

Tras la condena por el asesinato de Flores y el proceso judicial en Estados Unidos por fraude relacionado con el caso Holloway, Van der Sloot quedó bajo estricta vigilancia.

El penal de Challapalca impone a sus internos una rutina bajo severas restricciones de contacto externo y vigilancia permanente. Las autoridades penitenciarias nacionales afirman que este tipo de reclusión busca evitar que los presos de alto perfil puedan influir fuera de los muros o recibir tratos preferentes.

En este entorno, Van der Sloot sostiene que su vida ha cambiado, enfocándose en la superación personal, aunque sujeto a las estrictas normas del penal. La altitud, la temperatura y la distancia marcan el contexto de su encarcelamiento, donde la comunicación con el exterior es mínima y el aislamiento es un componente permanente de la condena.