Karina Rivera, una de las figuras más queridas en el mundo de la televisión infantil, se encuentra abriendo nuevos caminos en su carrera profesional. Si bien ha estado al frente de programas infantiles durante años, como el emblemático ‘Karina y Timoteo’, ahora se adentra en el mundo de la literatura, con un proyecto que ha estado cocinando por más de cinco años. Se trata de su cuento ‘Kárica y el colibrí maravilloso’, un relato que no solo refleja su amor por el público infantil, sino que también marca una nueva etapa en su vida profesional.
La artista peruana tuvo una conversación con Infobae Perú, en donde narró cómo nació esta idea y además, nos compartió parte de vida, sus sueños y el legado que viene dejando como una de las figuras infantiles más importantes.
La génesis de “Kárica y el colibrí maravilloso”
El origen de este cuento no es tan simple como podría parecer. Karina Rivera explica que la idea de crear un personaje infantil surgió de forma orgánica, casi sin querer. “Kárica y el colibrí maravilloso”, aunque no me crean, nace todo a la par. Desde que yo concibo tener una línea propia para niños, también dije: ‘esto tiene que acompañarse de un cuento y de canciones’”, menciona la artista.
Desde sus primeros pasos en la industria, Karina siempre ha tenido claro que su vocación está ligada a los niños. Con años de experiencia en televisión, sabía que quería crear algo más allá de lo visual, algo que pudiera expandir su universo y llegar a los pequeños de una manera diferente. Su historia se complementa con una línea de productos que, tal como el cuento, tienen como propósito ayudar a los niños a soñar y a conectarse con su imaginación.
Sin embargo, el proceso de materializar esta idea no fue sencillo. En sus palabras: “Lo más difícil era sacar los productos y, a la par, me puse a escribir. De esto estoy hablando hace 5 años. Seguía escribiendo y no sabía dónde llevarlo ni con quién contactarme”.
Durante ese tiempo, Rivera pasó por una etapa de incertidumbre. No sabía cómo dar el siguiente paso, y mucho menos cómo estructurar su proyecto para hacerlo realidad. Fue en ese proceso cuando se dio cuenta de que necesitaba ayuda externa. “Narré todo lo que pasó para llegar aquí, a Perú, a la parte de Chachapoyas, pero faltaba el centro. Ahí me di cuenta de que necesitaba ayuda. Una amiga me dijo: ‘Karina, necesitas un editor’”, cuenta, destacando la importancia de haber encontrado a Alberto Rincón, quien se convertiría en su editor y le ayudaría a darle forma definitiva a su cuento.
En su cuento, el personaje principal es Kárica, una pequeña hadita con una misión muy especial. Karina explica que siempre quiso crear un personaje que tuviera un toque mágico pero también un propósito más grande. “Las niñas sueñan con las haditas, los niños con los superhéroes. Yo quería una mezcla de ambos: alguien que ya tenga nombre, y que ya lo haya concebido como una hadita que tenga el superpoder de enseñarle a los niños que ellos tienen el poder en sus manos para salvar el planeta”, asegura la animadora y escritora.
La historia de Kárica no solo se trata de aventuras mágicas, sino también de concientizar a los niños sobre el cuidado del medio ambiente y la importancia de proteger la naturaleza. “Lo que busco es crear conciencia en los niños y decirles basta. Hay animales afectados, el planeta también está sufriendo. El pulmón del mundo, que es nuestra Amazonía, está llorando y tenemos que hacer algo”, comenta, con una pasión palpable por transmitir un mensaje de esperanza y acción a las nuevas generaciones.
Este proyecto es solo el comienzo de una serie de cuentos y actividades que Karina tiene planeado desarrollar. Además, cuenta que su experiencia en el mundo del entretenimiento infantil le ha permitido entender cómo conectar con los pequeños de manera efectiva.
El momento en que casi termina el sueño infantil
Durante la pandemia, Karina Rivera estuvo a punto de retirarse del mundo infantil. En pleno encierro, mientras el mundo luchaba contra la crisis sanitaria, la animadora sentía que su carrera ya no tenía un futuro claro. “Lo pensé durante la pandemia, porque yo en la pandemia me despedí”, recuerda.
Aunque muchos de sus colegas seguían conectando con su audiencia a través de las redes sociales, ella se encontró sola, sin el apoyo que sentía necesario para seguir adelante. La despedida fue emocional y marcada por lágrimas, pero, como ella misma dice, “a Dios gracias pasó todo esto”. Con el tiempo, se dio cuenta de que, al igual que el ave fénix, renació de las cenizas y logró concretar proyectos bonitos, como su incursión en la literatura infantil.
Siempre quiso ser animadora infantil
A Karina Rivera le es natural convivir con los niños y que el mundo infantil aflore en su piel. La artista ha demostrado que, pese a los años, continuará haciendo contenido para los más pequeños.
En esta charla con Infobae Perú, relata que siempre estuvo en su mente dedicarse al mágico mundo infantil y que Yola Polastri fue una de sus grandes referentes.
“Yo crecí viendo a Yola, tenía mis discos de Yola, también disfruté de Nubeluz, pero ya grande. Yo siempre decía: ‘Quiero hacer lo que ellos hacen, me encantaría’, y se me dio. Decretar las cosas, funciona”, afirma con una sonrisa que revela el amor y la gratitud que siente por la oportunidad de haber podido cumplir su sueño de ser animadora.
A lo largo de su carrera, Karina ha sido una figura influyente para varias generaciones de niños peruanos. Junto a su inseparable amigo Timoteo, ha sido un referente para los más pequeños. “Yo tengo mis ratones y la nueva generación de ratoncitos. Agradezco a los papás por presentarnos a Karina y Timoteo a la nueva generación, y ahora nos ven y parece que hubieran crecido con nosotros”, dice con orgullo.
No descarta volver a hacer televisión
A pesar de su nueva faceta como escritora, Karina no ha cerrado la puerta a la televisión. Aunque actualmente está enfocada en su proyecto literario, no descarta volver a la pantalla chica. “Yo lo dejo al tiempo, al universo, siempre pidiendo lo mejor y nada, siempre con fe, esperando que las cosas lleguen solas. La generación de niños es diferente a la de antes, lo tenemos claro. Simplemente, esperar, ya el tiempo lo dirá. Ahora ya no cierro las puertas a nada”, asegura Karina.
Más allá de la pantalla
Aunque su vida dentro y fuera de la televisión ha sido exitosa, Karina no se ha dejado encasillar por el medio. “Si no es en los shows, en el circo o en la gira, estoy como cualquier otra ama de casa, dedicada a limpiar, encerar, barrer, trapear, lavar la ropa, limpiar el baño, sacar el polvo, planchar, cocinar. Soy una mujer real que también me estreso con tantas cosas, pero trato de hacerlo con amor y con ganas”, menciona Karina, dando cuenta de su lado más humano.
Y es que también tiene una vida fuera de las cámaras, solo que con sueños infantiles. “Soy tal cual aquella mamá que se frustra porque no quiere hacer todo a la vez. Me ha pasado también, tengo lo mismo, nada más que sueños infantiles, sueños bonitos, y no me detengo”, dice con una sonrisa.
La animadora no tiene intenciones de frenar su carrera literaria. De hecho, Karina asegura que tiene muchos más cuentos por escribir, con la esperanza de seguir aportando a la educación y entretenimiento de los niños. “Quiero seguir escribiendo, tengo más historias por contar, y yo creo que disfrutar más con mi familia, eso quisiera. Lo que me permite todo esto es que trabajo en mis tiempos. Yo me pongo los tiempos y eso es lo que más valoro y agradezco de mi trabajo”, dice con nostalgia, revelando que su objetivo es encontrar un equilibrio entre su faceta profesional y personal.
Karina Rivera presentará oficialmente su libro con firma de autógrafos
Para celebrar junto a sus ratones y ratoncitos, Karina Rivera presentará su libro oficialmente con un momento para compartir con su público. En un encuentro especial, la animadora infantil espera a sus seguidores el próximo sábado 14 de diciembre a las 3:00 p. m. en la librería Crisol de Megaplaza.