Prepara tamales de bacalao para el Día de la Candelaria y la Cuaresma, una receta con sabor costeño

Esta receta es ideal para fechas especiales como la Cuaresma en la que se acostumbra a comer pescados y mariscos

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El tamal de bacalao es
El tamal de bacalao es una deliciosa opción tradicional con sabores únicos perfectos para las celebraciones festivas. - (Imagen Ilustrativa Infobae)

Una de las tradiciones más comunes entre las familias mexicanas es el 2 de febrero también conocido como el Día de la Candelaria en el cuál además de llevar a bendecir las imágenes del Niño Dios, se reúne la familia para cenar tamales, los cuáles suelen ser ofrecidos por aquel integrante que encontró al niño en la rosca de reyes del 6 de enero.

Si fuiste afortunado y quieres preparar tamales para tu familia, puedes sorprenderlos con la receta costeña de tamales de bacalao, originalmente creada por panameños que combinaron lo mejor de la gastronomía mexicana con su tradicional sabor costeño.

Los tamales de bacalao pueden ser una deliciosa alternativa para disfrutar con tus seres queridos también en la época de Cuaresma, pues aunque la receta tradicional con salsa verde y rellenos de carne es la preferida de muchos, algunas recetas innovadoras y creativas pueden cautivar hasta a los gustos más exigentes.

Receta de tamales de bacalao

El tamal de bacalao es
El tamal de bacalao es una variante del tradicional platillo adaptado al sabor de la costa panameña

Al igual que los tradicionales tamales oaxaqueños, en esta receta se utilizan hojas de palma de plátano para envolver el producto.

Ingredientes

  • 250 gramos de manteca de cerdo
  • 2 Plátanos verdes
  • 500 gramos de harina de maíz fresca para tamales
  • 1 kg de bacalao
  • 1 cebolla
  • 1 taza de cilantro
  • 1 tacita de achiote
  • 300 mililitros de salsa para bacalao
  • suficientes hojas de plátano

Paso a paso

Paso 1: pon a remojar las hojas de plátano en un recipiente grande con agua tibia para ablandarlas.

Paso 2: vacía la manteca en un recipiente y comienza a batirla con las manos, notarás que cambia de color conforme se va acremando, enseguida integra a la mezcla la harina de maíz junto con el polvo para hornear y combina todo mezclando con las manos.

Paso 3: coloca el bacalao en una olla, llénalo de agua y ponlo a hervir hasta que quede blando. Luego sácalo del agua y asegúrate de limpiar bien sus espinas

Paso 4: para preparar el bacalao, coloca aceite en un sartén, luego corta la cebolla en rodajas y añade al sartén junto con cilantro y la salsa sazonadora de bacalao. En otra sartén prepara el achiote con un poco de aceite.

Paso 5: agrega el bacalao al primer sartén, añade un poco de agua y cocina a fuego medio para sazonarlo.

Paso 6: mientras se sazona el bacalao, vierte el achiote líquido en la masa para tamales y comienza a batirlo con las manos hasta que se torne de un color rojizo.

Paso 7: vacía el bacalao sazonado en un recipiente y comienza a envolver cierta cantidad de bacalao con la masa para tamales, luego coloca en medio de un trozo de la hoja de plátano y comienza a envolver uno a uno.

Paso 8: Pon a hervir los tamales a baño María en una olla por al menos 45 minutos.

Luego del paso 8, ya puedes degustar de los deliciosos tamales de bacalao con tu familia y seres queridos.

El origen de los tamales

Los tamales se comían en
Los tamales se comían en celebraciones de distintas culturas prehispánicas. (UNAM)

De acuerdo con el artículo “Tamales: una historia de sabor” publicado por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) los tamales son un platillo que se remonta a la época prehispánica de México, los cuales se dice que eran un alimento para las grandes fiestas, también se preparaban para agradecer la fertilidad de la tierra, en cualquier evento social y como ofrenda a los muertos.

Aunque el tamal prehispánico era más firme y apelmazado, elaborado con verduras como calabaza, chile y maíz, productos tradicionales de México.

Después de la Conquista este platillo fue adaptándose y complementando su fisonomía e ingredientes, pues se incluyeron los que provenían de Europa, quienes actualmente aportan el sabor que conocemos; es el caso de la manteca así como la carne de cerdo, en sustitución de verduras como calabaza, quelites y elotes.

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