No es que se inventase con las películas de superhéroes, pero desde luego es algo que se popularizó con ellas. Las escenas poscréditos son hoy día toda una seña de identidad en las películas de Marvel y DC, las dos grandes franquicias de superhéroes en el mundo y las que más hacen uso de estos recursos. En realidad es un elemento que se comenzó a utilizar en los años 60 con sagas como Oceans o James Bond: 007, tuvo nuevos intentos en los 80 con películas como Todo en un día (Ferris Bueller’s Day Off) y que ha llegado a nuestros días con las películas de superhéroes, aunque ya se había popularizado con la saga Piratas del Caribe.
Con el estreno de Kraven The Hunter, la nueva película del universo de Sony en torno a Spider-Man que han conformado Venom, Morbius o Madame Web y que ya ha anunciado su cese, muchos se han preguntado si cuenta con escena poscréditos. Otras entregas de esta misma saga las han tenido, y por eso mismo era esperable contar con una para Kraven, cuya historia apenas acaba de comenzar. La película cuenta la historia de orígenes de Sergei Kravinoff (Aaron Taylor-Johnson), un joven de una familia de oligarcas rusos que sufre en su infancia un evento que lo cambia para siempre. Tras ello, Sergei adopta la personalidad de Kraven el Cazador, se aleja de su familia y comienza a seguir su propio camino con nuevas habilidades y mentalidad.
El final de Kraven The Hunter deja grandes incógnitas: cuál era el papel de El forastero en todo el entramado de Kraven -y por qué se había obsesionado con él- cuáles eran exactamente los planes de Nikolai Kravinoff (Russell Crowe) y sobre todo cuáles son los de Dimitri (Fred Hechinger), el hermano de Sergei y quien se ha sometido a una experimental cirugía para convertirse en El Camaleón, capaz de mutar en cualquier persona. El desenlace deja a un Kraven decepcionado con la actitud de su hermano y confuso al creer que puede llegar a convertirse en todo lo que odiaba y representaba su padre: un cazador insaciable que siempre va en busca de un nuevo trofeo. La película inmortaliza este pensamiento con su última escena, con Kraven frente al espejo y enfundado en su chaleco de piel de león, dejando entrever que falta poco para convertirse en ese villano sanguinario que la gente ha conocido por Spider-Man. Pero, ¿sucede algo después de esto?
Las arañas solo están en tu cabeza
Pues lo cierto es que no, no hay ningún tipo de escena poscréditos ni material añadido al metraje, dejando en un gran interrogante lo que sucederá con el Camaleón, con Calypso (Ariana DeBose) y sobre todo con el propio Kraven. No se sabe si es algo que estaba pensado desde el principio o es una decisión que se ha tomado a raíz de cancelar los planes futuros del universo, pero lo cierto es que ese plano es lo último que se en Kraven The Hunter.
Aun con todo, la película deja un par de guiños a Spider-Man que podrían sugerir un encuentro futuro, si no fuera porque los planes de la franquicia no pasan por ello. La primera alusión sutil al amigo y vecino Spider-Man tiene lugar cuando Calypso investiga en su despacho el caso de la serie de asesinatos perpetrados por Kraven. Entre los periódicos que consulta, se puede llegar a ver el Daily Bugle, ficitico diario que se conoce principalmente por los cómics de Spider-Man y que posteriormente ha salido en todas las adaptaciones, ya que es donde trabaja Peter Parker y donde tiene sus desencuentros con el director del periódico, J. Jonah Jameson.
La otra referencia, mucho más directa, es cuando a Kraven le inyectan un veneno que le produce pesadillas, llegándose a ver una serie de insertos de la madre del cazador -la que se insinúa que sufría de demencia- teniendo alucinaciones con... arañas. Así es, de la nada el mayor miedo de Kraven no es su autoritario padre ni el león que casi acaba con su vida, sino los insectos de ocho patas que de alguna manera anticipan cuál será el gran peligro en el futro de Kraven: encontrarse con Spider-Man. De momento no hay planes de que este encuentro se llegue a producir, pero si algo nos ha enseñado el Universo Cinematográfico Marvel desde que introdujo el concepto del multiverso, es que todo es posible, incluso lo imposible.