
Las albóndigas son un plato tradicional en muchas cocinas del mundo, pero sobre todo son un básico en el recetario de las casas españolas. Aunque es común comprar estas bolas de carne preparadas, listas para cocinar en el momento, también es frecuente formarlas en casa, añadiendo a la carne los ingredientes que más nos gusten. Esto suele asegurar un resultado casero delicioso. Sin embargo, al hacerlas a menudo cometemos un error que afecta negativamente a su textura y sabor.
Así lo ha explicado El As Carnicero (@el_as_carnicero), un carnicero con 32 años de experiencia y creador de contenido con cerca de 50.000 seguidores en TikTok. En uno de sus últimos vídeos, el experto en carnes ha tratado el tema de las albóndigas, compartiendo sus consejos con sus espectadores.
También puedes seguirnos en nuestro canal de WhatsApp y en Facebook
Habitualmente, las albóndigas se preparan en España con carne de ternera o de cerdo, aunque también es frecuente prepararlas con picado de pollo. Además, es usual añadir otros ingredientes como el ajo, el perejil, la sal o la pimienta para aportar sabor. Para conseguir la forma y la textura adecuada, suele añadirse huevo a la mezcla, así como algún tipo de pan que funcione como espesante.
El ingrediente clave para unas albóndigas más jugosas
Como narra el propio creador de contenido, son muchos los que utilizan pan rallado al preparar las albóndigas, pensando que ayuda a compactarlas mejor. Sin embargo, esto puede ser un grave error, ya que el pan rallado hace que las albóndigas queden duras y apelmazadas, en lugar de jugosas y tiernas. “¿Pan rallado? ¡No! Lo que eso va a hacer es apelmazar la carne, endurecerla y dejarla más tiesa”, avisa el carnicero en su vídeo.
La razón por la que esto es un gran error tiene que ver con que el pan rallado absorbe los líquidos de la mezcla, endureciendo así la masa. En lugar de aportar esponjosidad, hace que la carne pierda jugosidad y se vuelva demasiado compacta, incluso seca al cocinarse.

Pero no te preocupes, existe una alternativa que nos evitará todos estos problemas. En el mismo vídeo, el carnicero desvela su truco personal para lograr albóndigas con una textura perfecta. Consiste, en esencia, en sustituir el pan rallado usando pan del día anterior mojado en leche. No importa el tipo de pan que sea, de barra o de pueblo, bajo la condición de que lo remojemos con anterioridad. Si no podemos utilizar leche, el carnicero nos anima a sustituirla por agua.
Para ello, basta con cortar el pan duro en trozos pequeños y colocarlo en un bol. Luego, se cubre con leche o agua y se deja que se empape durante unos minutos. Una vez que ha absorbido el líquido, es importante escurrir bien el exceso antes de mezclarlo con la carne picada. “Lo dejas escurrir y lo juntas con la carne picada que has elaborado, con huevo, pimienta, ajo y perejil. Lo remueves todo bien y te van a quedar unas albóndigas espectaculares, supertiernas, súper blanditas, superjugosas por dentro, perfectas para hacerlas en salsa o con tomate”, asegura el tiktoker.
Últimas Noticias
Un chef que ha trabajado con Dabiz Muñoz desvela la clave para ganar dinero con los buffets chinos: “Los españoles son clientes rentables”
La clave se encuentra en que la mayoría de las personas no consumen los alimentos más caros

Un hombre denuncia a su vecino y solicita la demolición de la ampliación de su vivienda: se queja de que el inmueble le quita el sol
El caso se ha llevado a los tribunales hasta en tres ocasiones diferentes a lo largo de los años

En qué casos te dan una pensión si tienes una discapacidad
Las limitaciones económicas de estas prestaciones y las barreras para la inserción laboral de las personas con discapacidad evidencian la necesidad de seguir avanzando en la construcción de un sistema más inclusivo y equitativo

Fruta del dragón: propiedades, beneficios y contraindicaciones
La pitahaya es una fruta muy beneficiosa para la salud, pero conviene tener un consumo moderado

Un hombre condenado a tres años de prisión relata cómo logró ejercer como médico de cabecera, aunque no tenía título: “Es alucinante lo que hice”
Una enfermera del centro tardó dos consultas en darse cuenta de que no era un médico graduado
