Salud mental, la asignatura pendiente de la sanidad pública: “Me mandaban a casa sabiendo que podía arrebatarme la vida”

La falta de profesionales sanitarios retrasa la atención en salud mental del Sistema Nacional de Salud

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Alicia Rivera (i) y Laura
Alicia Rivera (i) y Laura Curiel (d) cuentan su experiencia con la atención en salud mental del Sistema Nacional de Salud.

Seis psicólogos por cada 100.000 habitantes. Es la cifra con la que España maneja la atención pública en salud mental. El Sistema Nacional de Salud (SNS) funciona con un tercio de los efectivos necesarios para atender a la población de un país en el que el 40% de los habitantes reconoce tener problemas de salud mental, según datos del Colegio General de la Psicología de España (COP).

“Tenemos una sanidad que prioriza mucho los fármacos y los aspectos técnicos”, explica Fernando Chacón, vocal adjunto de la presidencia del COP, a Infobae España. “Nadie discute que tengas que comprar un aparato carísimo para hacer diagnósticos en un hospital, se acepta fácilmente. Pero si dices que hay que contratar un psicólogo por cada centro de atención primaria, que cuesta mucho menos que todo eso, entonces sí hay más discusión”, dice.

La falta de profesionales en salud mental provoca una mala calidad en la atención a los pacientes: el último Barómetro de Sanidad del CIS mostraba que un 36,7% de los pacientes esperaba entre uno y tres meses para conseguir cita con algún profesional sanitario, mientras que el 20,4% superaba los tres meses antes de ser atendido. No es de extrañar entonces que Laura Curiel sienta que tuvo “suerte”: “Como vivo en una localidad pequeña, iba al psicólogo cada 2-4 meses”, cuenta.

Laura Curiel, activista por la
Laura Curiel, activista por la salud mental. (Imagen cedida a Infobae España)

Curiel acudió a la sanidad pública después de un tiempo en terapia. “Empecé en la privada, pero era mucho dinero”, comenta. En el SNS, pasó por cuatro psicólogos en menos de un año, que se marchaban una ver terminados sus contratos. “Cada vez que te encuentras con una nueva psicóloga, tienes que contar otra vez tu trauma y al final, a nivel emocional, te agota y, en vez de seguir avanzando, lo que hace es retrasarte e incluso empeorar la situación”, valora Curiel.

Pese a las demoras y los constantes cambios, Curiel valora positivamente la atención recibida. “Me han tocado psicólogos que son un amor de persona”, dice. Eso fue claro, hasta que la sanidad pública la echó. “Me dijeron que era porque estaba bien, pero en realidad era porque mi psicóloga tenía un contrato por el que solo podía atender a población joven e infantil”, cuenta. “El sistema público a mí me ha dado la patada y me tuve que buscar la vida para seguir sobreviviendo”, asegura.

Sin recursos y abandonada por el SNS, Curiel creó una plataforma de pacientes (SOS Pacientes) para encontrar y ayudar a otras personas que hubiesen vivido situaciones similares en la sanidad pública.

“El día a día hasta la cita era insoportable”

Alicia ha recibido 8 SMS
Alicia ha recibido 8 SMS en los que se anulaba y cambiaba su cita de psiquiatría.

Fue a través del activismo como conoció a Alicia Rivera. Ella ha lidiado con un trastorno de la conducta alimenticia desde el año 2019 y ha pasado desde entonces por varios ingresos en psiquiatría, tanto infantil como adulta. Refiere, al igual que Laura, un buen trato por parte de los psiquiatras. “Tomaron las medidas necesarias para salvarme la vida sin que yo lo supiera”, asegura.

Pero el sistema estaba saturado y eso también la puso en peligro. “Varias de las veces en las que necesitaba ingresar, porque no estaba bien y estaba en riesgo mi vida, no había camas en los hospitales. Me tenían que mandar a casa sabiendo que en cualquier momento podía no despertarme, que podía arrebatarme la vida”, dice.

Rivera llegaba a esperar meses hasta volver a ver al especialista, tiempo en el que “podía empeorar mucho”. También Curiel reconoce que, en sus peores momentos, “era insoportable el día a día hasta la cita”. Cuando llegaban a veces tampoco eran suficiente, pues las terapias se reducen a media hora. “El tiempo se les va acabando [a los psicólogos] y también su jornada laboral, entonces van todo el rato con prisas”, cuenta. “No se puede avanzar si tienes media hora de terapia cada dos meses”, añade.

¿Puede la genética determinar tu salud mental? Un gen define cómo respondemos ante el estrés.

Mientras que Curiel ha continuado su tratamiento en la sanidad privada gracias al seguro de salud que le facilita su empresa, Rivera sigue en el sistema público y aún sufre sus lacras. Su última cita con el psiquiatra estaba agendada para noviembre de 2024, pero la cancelaron sin motivo alguno y en un momento especialmente sensible, pues le acababan de bajar la medicación. Su cita nueva no llegaba hasta febrero de 2025, pero también fue cancelada por el sistema. Tras recibir ocho SMS diferentes, Alicia acudió directamente al centro de salud mental a pedir explicaciones. “Me dijeron que mi psiquiatra ya no trabajaba allí y me tenía que ver otra persona. No me hubiera enterado si no hubiera ido”, explica.

Hacia el Plan de Salud Mental 2025-2027

La ministra de Sanidad, Mónica
La ministra de Sanidad, Mónica García, y La Comisionada de Salud Mental del Ministerio de Sanidad, Belén González, presentan ante los medios de comunicación el Plan para la Prevención del Suicidio, en la sede del Ministerio, a 9 de septiembre de 2024, en Madrid (España). (Marta Fernández / Europa Press)

El Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud votará este viernes la aprobación del nuevo Plan de Acción de Salud Mental 2025-2027, así como el Plan de Prevención del Suicidio. Entre sus ocho líneas estratégicas, se encuentran el refuerzo de los recursos humanos, las alternativas a la institucionalización o la optimización de los tratamientos, con especial atención a los psicofármacos.

Aunque desde el COP valoran estos esfuerzos, entienden que no servirán de mucho si no se mejora el acceso a la psicoterapia en el Sistema Nacional de Salud. “Ahora mismo, si tú quieres ser atendido por un psicólogo, puedes tardar cuatro o cinco meses por las listas de espera”, explica Fernando Chacón. “El médico de atención primaria te deriva al centro de salud mental y, si la lista de espera es de cuatro o cinco meses, ¿que es lo que tiene mientras el médico? Pues nada más que psicofármacos, no tiene otra cosa", explica el vocal del Consejo General de Psicología de España.

La mejora en el acceso pasa por el aumento de la plantilla y ese parece el objetivo del actual ministerio. Desde 2018, las plazas de psicología en la Formación Sanitaria Especializada (FSE) han pasado de las 141 a las 273 actuales, un incremento que el COP aplaude, pero tilda de insuficiente, e incluso por debajo de lo prometido por Sanidad, que estimaba duplicar las plazas en cuatro años.

“Pero el problema de la falta de especialistas no es solo ese. Tienen que mejorar las condiciones de trabajo de los profesionales de salud mental”, reclama Chacón. “No son solo las listas de espera, es que luego la interconsulta es una vez cada mes o cada dos meses”, critica, lo que hace que los profesionales no puedan trabajar bien y abandonen la práctica. “Da igual que tú saques un montón de plazas PIR si luego la gente no tiene buenas condiciones de trabajo y se va a la privada”, dice.