Sorpresa por la presencia de la directora del FMI en el cóctel de la embajada argentina en Estados Unidos

Fue en medio de las reuniones del G20. Estuvieron los ministros Dujovne y Caputo y también se habló de inflación, tarifas y Venezuela

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(Enviado especial a Washington) En el escenario habla Nicolás Dujovne, ministro de Hacienda. Lo acompañan Luis Caputo, su par de Finanzas, y el dueño de casa, el embajador argentino en Estados Unidos, Fernando Oris de Roa. En la coqueta y remozada embajada argentina, en el Dupont Circle de Washington, los funcionarios hablan ante unas 150 personas de los objetivos de la serie de reuniones del G20 -el foro de líderes globales que este año preside la Argentina- que comienzan mañana aquí en el contexto de la reunión de primavera del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial.

Pero eso no fue el único tema que se escuchó en la embajada, claro: cuestiones más vernáculas, como la inflación, las tarifas y los esfuerzos del gobierno de Mauricio Macri para conseguir inversiones, también se mezclaron entre empanaditas de carne, jamón crudo y bocaditos gourmet, todo regado con buen malbec.

Mientras hablaba Dujovne, una de las sorpresas de la tardecita: llegó Christine Lagarde, la directora del FMI. Se rumoreaba que iba a estar presente en el cóctel, y llegó. "Está enamorada de la Argentina", dijo sin ponerse colorado un alto funcionario de Hacienda, quién agregó un detalle: nunca, aseguró, un titular del FMI había asistido a ese tipo de eventos organizados por el país.

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Lagarde pasó a saludar, literalmente. Terminó de escuchar a Dujovne, hizo lo propio con Caputo, que le dio la bienvenida desde el micrófono, y se fue. "No, no, no. No voy a hablar", dijo la francesa cuando Infobae quiso hacerle algunas preguntas. Mientras Lagarde se iba franqueda por sus guardaespaldas, los ministros de Macri y sus asesores sonreían. "Es un logro. Un puntazo para el Gobierno", dijo otro de los presentes.

Tarifas e inflación, presentes

Dujovne no quiso hablar con la prensa. "Más adelante, cuando avancen las reuniones", se excusó.

Sin embargo, desde su cartera sí hubo comentarios sobre uno de los temas que ocupan y preocupan a la administración Cambiemos: la inflación. "Lo que haga el Central está bien, tienen todo nuestro apoyo. La economía está muy lanzada hacia el crecimiento. La sintonía fina del Central no va a afectar este proceso", se dijo.

"Se sabía que la inflación en los primeros cuatro meses iba a ser alta, no nos sorprende", aseguraron. El lunes, el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, que llega a Washington mañana, había dicho que le sorprendió la cifra inflacionaria de marzo.

Otro tema del que se habló en la embajada fueron las paritarias, que algunos gremios ya cierran por sobre el 15% y las tarifas, luego de que Marcos Peña, el jefe de Gabinete, criticara iniciativas en diputados del kirchnerismo y hasta del Elisa Carrió, para rever los aumentos. "Todo se puede hablar, siempre que se respete el Presupuesto. Diferenciamos entre quienes aportan propuestas constructivas y quienes hacen política y aportes irracionales, como retrotraer las tarifas y volver a la situación anterior que nos llevó a un desquicio tarifario", dicen en Hacienda.

De eso se hablará este jueves en la Casa Rosada: el Gobierno convocó a los jefes parlamentarios de Cambiemos para analizar cambios en las tarifas.

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Con respecto a las reuniones de la "pata" financiera del G20, que cerca de Dujovne definen como "el principal grupo de coordinación macroeconómica global", se supo que en esta ciudad seguirán discutiendo temas de la agenda global, como por ejemplo de qué maneras grabar a las empresas del mundo digital y a los criptoactivos. Esta vez no habrá comunicado oficial, cómo sí hubo en la primera reunión, que se hizo en marzo en Buenos Aires, y como habrá en la última, en julio, donde se confeccionará el documento con las propuestas financieras que discutirán los presidentes del G20, a fines de noviembre en el CCK porteño.

Entusiasmo por la licitación PPP

Caputo sí habló. Se lo notó entusiasmado por la apertura, el próximo martes, de lo sobres técnicos de la licitaciones del Plan de Participación Público Privada, mejor conocido como PPP. "Creo que terminará habiendo más de ocho consorcios, como se esperaba de entrada. Serán diez y once, por suerte. Es para los seis corredores. Uno puede ganar sólo dos licitaciones, pero se pueden presentar a todos. Hay incentivos para que el cierre financiero sea rápido y las obras comiencen ya. Estudiamos todos los casos y tenemos el mejor sistema PPP del mundo", afirmó el ministro en conversación con periodistas.

También se refirió a su participación en las reuniones de estos días por el G20 y reiteró que si bien la búsqueda de financiamiento externo terminó por este año (los millones que restan para 2018 que se conseguirán el mercado local), se reunirá con varios inversores y bancos.

Caputo también destacó una nueva reunión por el tema Venezuela, de la que participan los ministros de Finanzas, pero se hace por fuera del G20. Es una reunión similar a la que se realizó en Buenos Aires, en este caso convocada por Steve Mnuchin, secretario del Tesoro de EEUU.

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Además de Lagarde, también estuvieron en la embajada el ministro de Salud de la Argentina, Adolfo Rubinstein; el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, Luis Alberto Moreno; el máximo representante de la Casa Blanca para América Latina, Juan Cruz (asesor especial del presidente de EE.UU. y director senior para Asuntos del Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional), y el vicesecretario asistente para Asuntos del Hemisferio Occidental, Michael Fitzpatrick.

Varios de ellos pasaron más tiempo en la sede diplomática que la número uno del FMI, y se los vio conversando alegremente con funcionarios argentinos e invitados. Pero el "golazo" de la visita de Lagarde fue el tema del día para los hombres de Cambiemos que vinieron a pasar una semana intensa a la soleada, aunque algo fría, capital de Estados Unidos.

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