La emoción del Muñeco que detuvo el discurso, la frase de Quintero que desató las risas y el momento en el que Gallardo destapó su estatua

El entrenador estuvo a punto de quebrarse ante una multitud que acompañó el evento en las inmediaciones del Monumental

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La emoción de Gallardo

Este sábado River Plate llevó a cabo el homenaje a Marcelo Gallardo y miles de hinchas se acercaron al ingreso de la Avenida Figueroa Alcorta para la presentación de la estatua de ocho metros que rinde tributo al entrenador más exitoso en la historia del club de Núñez, con 14 títulos, entre ellos dos Copas Libertadores. Con varios de los futbolistas que dirigió y referentes de la dirigencia, el Muñeco se quebró al aparecer en el escenario.

Fue una tarde de alto impacto emotivo y cuando fue presentado en el evento. Subió a la tarima, recibió el cariño de la gente y saludó. Sus ojos sonrojados, al punto de las lágrimas, fueron señales de lo que vivió el ex DT, quien tomó el micrófono y cuando dijo “no voy a cantar”, se evidenció su voz quebrada.

En cada testimonio Gallardo estuvo conmovido por los testimonios del presidente del club, Jorge Brito; su antecesor en el cargo, Rodolfo D’Onofrio, el mánager y uno de los artífices de la llegada del Muñeco, Enzo Francescoli; y uno de los capitanes y jugador emblemático de la era Gallardo, Leonardo Ponzio.

Otro jugador icónico de la etapa de Napoleón es Juan Fernando Quintero, quien contó una anécdota de cómo era el trato diario con Gallardo: “Agradecido con la vida y con el fútbol de haber hecho historia. Dentro la cancha fue bastante exigente y por ahí a veces lo querías matar (risas). Como entrenador había días en los que te querías ir a los puños. Pero esa exigencia hizo sacarnos lo mejor de cada uno y explotar el espíritu competitivo. Pero logramos cosas importante gracias a su personalidad”.

Las palabras de Juanfer generaron risas en los presentes y también ayudó a que Gallardo pudiera empezar a soltarse ya que estuvo durante todo el evento visiblemente emocionado. Rodeado de todos los trofeos conseguidos, en cada momento, con cada instancia del repertorio que se armó el Muñeco hizo lo imposible para contener el llanto.

Gallardo se conmovió con la ovación del público o los compactos de imágenes inmortales de la etapa como DT en River Plate con goles y conquistas épicas ante Boca Juniors; como la final de la Supercopa Argentina lograda en Mendoza en 2018 y la obtención de la Copa Libertadores de ese año con el inolvidable encuentro disputado en Madrid.

En el final se descubrió la estatua que rinde homenaje a Gallardo y se hizo con una particular cuenta regresiva de la que participó toda la gente. Una vez presentada en sociedad, los hinchas Millonarios explotaron y comenzaron a cantar himnos alusivos a aquella final de Madrid.

Fue una tarde inolvidable para todo el pueblo riverplatense, para hombres que protagonizaron una era gloriosa y para su mayor responsable, Marcelo Gallardo.

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