El abrazo íntimo entre Messi y Di María tras la consagración que se hizo viral: “¡Somos campeones del mundo!”

Fue el instante en el que se sintieron realizados. Ya habían tenido una muestra gratis con la final de la Copa América y la Finalissima en Wembley, pero lo que ocurrió en Qatar superó cualquier tipo de expectativa de ambos. Lionel Messi y Ángel Di María quedaron cara a cara después del desahogo que significó ganar la tanda de penales frente a Francia en Lusail y el abrazo fue inevitable. Un momento íntimo, eterno, que se viralizó en las redes en las últimas horas.

“Momento brillante. El primer abrazo de Messi y Di María tras ganar el Mundial con Messi diciendo: ‘Somos campeones del mundo’”, describió el video publicado el usuario @AlbicelesteTalk, que realiza posteos enfocados en Argentina. Fue un instante infinito, que quedará grabado en sus memorias. Solamente ellos saben cuánto sufrieron para cumplir el objetivo. Y demás está decir la injerencia y méritos que tuvieron e hicieron para conseguirlo, con goles y fenomenales actuaciones en los encuentros definitorios, pero también con las ganas de anteponerse a cualquier adversidad.

Tuvieron que esperar un largo rato para darse este gran gusto, aunque el fútbol finalmente les dio una alegría enorme a los rosarinos que anotaron su nombre en el pedestal del deporte nacional y la Selección. Messi rompió todo tipo de récords con su performance en Doha, donde pasó a ser el jugador con más Mundiales, partidos y minutos disputados de todos los tiempos. Además, superó a Diego Maradona en capitanías y asistencias. El Fideo no quiso ser menos y además de ser el cuarto futbolista argentino con mayor cantidad de presencias en la Albiceleste (detrás de su coterráneo, Javier Mascherano y Javier Zanetti), alcanzó a Mario Alberto Kempes como el cuarto argentino en presencias mundialistas con un total de 18.

Messi y Di María hicieron historia y no quieren soltar. Continúan en Rosario disfrutando con sus seres queridos las últimas horas de licencia que les dieron el París Saint Germain y la Juventus, respectivamente, y anoche se volvieron a pintar de celeste y blanco en una fiesta organizada por la familia del capitán del seleccionado nacional en su ciudad natal.

Nadie más que ellos merecían tener esta reivindicación.

SEGUIR LEYENDO: