Cada vez más personas provenientes de América Latina se deciden a vivir la experiencia del Wacken Open Air, uno de los festivales de música metal más importantes del mundo. Fundado en 1990, este evento se lleva a cabo anualmente en el municipio de Wacken, localidad de Schleswig-Holstein, en Alemania. Solo se ha suspendido una vez, en 2020, como consecuencia de la pandemia del virus Covid-19.
Cada año, el WOA alberga un aproximado de 85.000 asistentes. Se estima que el 20% de ese total son extranjeros, siendo los latinoamericanos una parte amplia de este segmento. Es decir, unas 17.000 personas, muchas de las cuales han ahorrado por años y hasta décadas para asistir al evento. Pero para algunos la inversión de ese dinero no ha sido precisamente la garantía del aprovechamiento total de la experiencia. Incluso, más de uno ha vuelto a su país con un sabor amargo (que no es de cerveza) y con la resolución de no volver.
En la edición de este 2024 se vieron varias banderas nacionales acompañando a la agrupación colombiana Info, que hizo parte de la Batalla de las Bandas del festival. Este es uno de tantos indicadores del crecimiento de visitas al festival por parte de hispanoamericanos.
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Para Daniel Castaño, fundador de We Wanna Rock Tours, y que ha asistido en múltiples ocasiones al festival desde el 2006, estas malas experiencias son producto de la desinformación y la falta de planificación para un viaje que requiere presupuesto claro, logística, nociones de ahorro (en tiempo, dinero y energía) y todo el pragmatismo posible para sacarle provecho al evento. Por eso, en diálogo con Infobae, reveló algunos tips que pueden hacer la diferencia entre un WOA inolvidable y un WOA lleno de frustraciones y malos recuerdos.
- Convencerse de que es viable: Por estar en Alemania y por su duración, hay quienes ven en este evento una experiencia inalcanzable, reservada solo para europeos o personas con mucho músculo financiero. Sin embargo, con el paso de los años han surgido varios mecanismos para facilitar el viaje y cumplir el sueño de muchos metaleros de ver, en vivo y en directo, a varias de las agrupaciones que han marcado historia en los géneros extremos de la música.
- Planificar finanzas con anterioridad: Castaño explica que los tiquetes aéreos pueden llegar a ser el 50% de todo el presupuesto para el festival. Este promedio podría ser menor si el viajero hace juicioso seguimiento de los precios en aerolíneas identificando las ofertas más convenientes.
- Al menos la primera vez, ir acompañado: Llegar por primera vez a Alemania, con toda la logística que implica, podría resultar no solo estresante sino costoso. Por ejemplo, no usar los servicios de transporte público y preferir un taxi para un solo trayecto podría representar hasta 50 euros más en una sola movilización. Por eso, el experto recomienda ir acompañado de un travel parthner que facilite información para, además de lo musical, disfrutar de otros destinos turísticos y andar con más naturalidad en Hamburgo, ciudad de llegada para el WOA. Además, esta modalidad es la única que permite flexibilidad en el pago, lo que tiene que ver con el primer tip: es económicamente viable.
- Cuidar la salud: Si bien el evento es una auténtica fiesta, decenas de personas han arruinado su experiencia por excederse con el alcohol. El WOA dura varios días, motivo suficiente para entender que la energía debe ser “dosificada”. En promedio, un asistente al festival camina 30 kilómetros diariamente, pues hay grandes espacios que separan los campamentos de los escenarios y los escenarios mismos están distribuidos en campo abierto. La hidratación, la alimentación y el cuidado de la piel son temas de no poca importancia a la hora de viajar.
- Estar abierto a experiencias diferentes: A diferencia de unas vacaciones tradicionales, ir al WOA implica renunciar a ciertas comodidades como un cuarto de hotel para estar en una carpa. Claramente, las dinámicas son distintas por la naturaleza misma del evento, pero tener esto en cuenta puede evitar decepciones en los días que dura el festival. Asimismo, el contacto con ciudadanos de casi todo el mundo será inevitable, por lo que el respeto y la cordialidad se convierten en valores fundamentales para tal experiencia.
Estas recomendaciones también aplican para el Brutal Assault, festival de metal extremo desarrollado en República Checa. Si bien este evento es más pequeño (alberga un aproximado de 18.000 personas), es un destino cada vez más frecuentes para rockeros y metaleros colombianos y latinoamericanos.