Mujer que usaba a un bebé y a un niño para pedir limosna ni siquiera se sabía el nombre de los pequeños

Al parecer los habría alquilado para ejercer esa despreciable práctica según informaron las autoridades en Bucaramanga (Santander), en el nororiente colombiano

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La mujer no sabía ni el nombre del bebé de 7 meses y el niño de 3 años que usaba para pedir limosna en la capital de Santander. Foto: Personería de Bucaramanga
La mujer no sabía ni el nombre del bebé de 7 meses y el niño de 3 años que usaba para pedir limosna en la capital de Santander. Foto: Personería de Bucaramanga

La explotación de menores para la mendicidad es una práctica que tiene en alerta a las autoridades en la capital de Santander, donde en los últimos tres meses han sido conducidos al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) 186 niños, niñas y adolescentes para el restablecimiento de sus derechos.

En una nota periodística que se emitió en el informativo de televisión Noticias Caracol dieron cuenta de la cifra, luego de que reportaran un operativo contra este delito en esa ciudad del oriente colombiano, en donde las autoridades rescataron de la mendicidad a 4 menores el pasado martes.

En uno de los casos, una mujer no sabía los nombres del bebé de 7 meses y del niño de 3 años con los que estaba pidiendo limosna en el espacio público de esa ciudad y con los que la sorprendió las autoridades, quienes aseguraron que ella los habría alquilado para usarlos en esa deleznable práctica.

“No pudo identificar su procedencia, no pudo acreditar que ella fuera la madre, que fueran sus hijos. Presuntamente no sabe los nombres de los niños tampoco”, dijo en Noticias Caracol Daniel Arenas, el personero de Bucaramanga.

En las cifras que obtuvo el noticiero se tiene que en el 2020 en Bucaramanga a 130 menores de edad les tuvieron que restablecer sus derechos en el ICBF, la mayoría de ellos serían de origen venezolano.

“Generalmente esto se da a causa de la migración, específicamente de los venezolanos, que debido a su situación y a sus necesidades han tenido que trasladarse a varias ciudades de Colombia entre esa Bucaramanga que prácticamente es una ciudad fronteriza”, explicó Arenas.

Por esta razón desde de esa entidad y en coordinación con las autoridades de esa ciudad han tenido que realizar operativos en los primeros cuatro meses de este año.

“No vamos a permitir que en Bucaramanga se utilice a los niños para un beneficio económico, eso tiene que quedar claro. Vamos ahondar todos nuestros esfuerzos para esta problemática”, agregó el personero de esa ciudad.

Las autoridades están en alerta, reseñaron en Noticias Caracol, porque además a los niños, niñas y adolescentes también los han instrumentalizado incluso para cometer delitos. De hecho, en un video que obtuvo ese informativo se registró el caso de un niño que un ladrón usó para hurtar un teléfono móvil.

“Distraen al muchacho, tapando con el niño para que el ladrón pueda coger el celular”, señaló la testigo del hecho.

Por este caso las autoridades lograron conducir al adulto que estaría instrumentalizando al pequeño para robar.

“Al momento se tiene una captura materializada por el delito de instrumentación infantil y explotación de menores”, indicó a Noticias Caracol el coronel Juan Gómez, comandante operativo de Policía en Bucaramanga.

Desde la Personería señalaron que a los adultos que explotan a los menores de edad les debe caer todo el peso de la ley.

“Recomendamos aplicar todo el peso de la ley para estas personas. Corresponde a nosotros trasladarlos a las comisarías de familia quienes a través de un proceso de restablecimiento de derechos inician las sanciones legales. La problemática especial es cuando es una mendicidad ajena, estas personas deben ser capturadas o trasladadas a la Fiscalía General de la Nación porque es un delito penal y los niños tendrán que ser puesto a disposición del ICBF o en un hogar de paso para proteger sus derechos”, concluyó el personero de Bucaramanga.

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