Tras ser acusados de corrupción, tres magistrados del Meta aún siguen en su cargo

En el 2017, la Fiscalía señaló a Joel Darío Trejos, Alcibíades Vargas Bautista y Fausto Rubén Díaz Rodríguez de haber recibir al menos 1.150 millones de pesos de ‘la viuda Autorrollings’(de los $3.000 millones que les habrían ofrecido) para garantizarle el polémico beneficio de casa por cárcel que tuvo hasta el 2016.

En audiencia de imputación de cargos contra los tres magistrados del Tribunal de Villaviencio, la Fiscalía sostuvo que el proceso contra Marbely Sofía Jiménez estuvo ‘engavetado’ por cinco años y seis meses, desde el 24 de enero de 2012 hasta el 4 de julio de 2017, para favorecerla, entre otros beneficios, con la casa por cárcel y eventualmente con una absolución en segunda instancia por vencimiento de términos.

Según la investigación, Jiménez Pérez pretendía adueñarse de varios centros de diagnóstico automotor que se denominaban Autorrolings, que eran de propiedad de su esposo Óscar William Parrado, a quien mandó asesinar en octubre del 2008 cuando llevaban 10 meses de casados. Además, entre el 2008 y el 2010, la mujer ordenó también la muerte de su hijastro de 19 años Óscar Steven Parrado, del primo de su esposo Iván Rodrigo Parrado Ackine y el abogado de la empresa Jorge Enrique Mora Clavijo. Otra de las víctimas fue Fredy Ricardo Iregui, otro abogado de Autorrollings, que sufrió un atentado y sobrevivió. Por estos crímenes, la mujer recibió una pena de 52 años.

Este caso mostró que por lo menos desde 2007 hasta 2017, un grupo de jueces, abogados y magistrados habrían conformado una red que, a cambio de plata, fiestas con prostitutas y otros incentivos, tramitaban irregularmente beneficios a condenados por narcotráfico, homicidio y demás delitos.

El caso volvió a sonar esta semana pues en el juicio que se adelanta en la Corte Suprema contra los funcionarios del Tribunal Superior de Villavicencio, Meta, fue citada Marbely Sofía, quien paga su condena en el pabellón de mujeres del buen Pastor en Bogotá, para declarar en el juicio.

Finalmente, luego de negar que había un acuerdo entre las partes, la viuda decidió ser testigo clave de la Fiscalía en contra de los tres hombres, para declarar que los magistrados, a cambio de dinero, se habían comprometido a mantenerla en domiciliaria y guardar el caso en segunda instancia hasta que prescribiera para que ella saliera libre, según el diario El Tiempo. Sin embargo, como salieron a la luz los hechos corruptos, los hombres aumentaron en su momento la pena de la criminal.

La versión fue confirmada por otro de los testigos de la Fiscalía, según el diario colombiano, que es investigador de policía judicial y habló de las fiestas pagadas por Jiménez y ‘Manopicha’, cómplice de la viuda, a las que los magistrados iban y en las que se habría entregado dinero. También mencionó visitas a la cárcel que hacían abogados investigados en el caso y quienes eran el puente entre los sujetos y los condenados. Otra de las pruebas que sostiene la Fiscalía es el registros de movimientos injustificados de dinero en las cuentas de familiares de los magistrados.

Pese a los testigos y pruebas presentadas por el ente acusador, dos de los acusados siguen ejerciendo su cargo Joel Darío Trejos, Alcibíades Vargas Bautista como togados, pues Fausto Rubén Díaz Rodríguez ya está pensionado.

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