Colombia deberá extraditar miembros responsables de la Operación Gedeón

La solicitud fue realizada por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela.

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En esta imagen de archivo, tomada el 3 de mayo de 2020, miembros de las fuerzas de seguridad de Venezuela custodian la orilla y una barca que, según las autoridades, fue empleada por un grupo de hombres armados para llegar a la ciudad portuaria de La Guaira, Venezuela. (AP Foto/Matías Delacroix, archivo)
En esta imagen de archivo, tomada el 3 de mayo de 2020, miembros de las fuerzas de seguridad de Venezuela custodian la orilla y una barca que, según las autoridades, fue empleada por un grupo de hombres armados para llegar a la ciudad portuaria de La Guaira, Venezuela. (AP Foto/Matías Delacroix, archivo)

Anunciada como procedente y formalizada de inmediato por el máximo ente judicial del país, copias de la sentencia fueron enviadas en la tarde del martes 3 de noviembre a la Cancillería de la República de Colombia para iniciar los trámites que conduzcan a la extradición del mayor de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), Juvenal Sequea Torres; su hermano, mayor Juven Sequea Torres; el primer teniente Rayder Russo Márquez; Brian Pérez Astudillo y Yacsy Álvarez Mirabal, quienes fueron detenidos en un operativo coordinado entre Fiscalía y Ejército en territorio colombiano el pasado 3 de septiembre.

La sentencia de la TSJ determina la responsabilidad de los implicados en cargos de delitos de terrorismo, traición a la patria, rebelión y, lo que es más sensible para la fracturada relación entre ambos países: conspiración con Gobierno extranjero, además de cargos vinculados al tráfico ilícito de armas de guerra y asociación en perjuicio del Estado venezolano.

Aunque el gobierno colombiano realizará anuncios sobre esta solicitud en las próximas horas, su actitud para reducir a los participantes del fallido operativo ha sido atenida al marco legal y judicial vigente. Desde la captura de cuatro venezolanos, sospechosos de realizar actividades ilegales en el país, además de estar sindicados en la operación terrorista por la que son reclamados en Venezuela.

En esa línea de acontecimientos, fue el Presidente Duque quien anunció ante la opinión pública los resultados de un operativo que, en un principio, tenía la apariencia de una labord e inteligencia para reducir cabecillas del microtráfico. Duque anunció los resultados de esta manera: “Estas capturas, tres en Bogotá y una en Barranquilla, se lograron con base en el cruce de información de agencias americanas como el FBI y la Oficina de Investigación de Seguridad Nacional”.

(@RCamachoVzla)
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Los arrestados fueron identificados como Yacsi Alexandra Álvarez, Rayder Alexander Russo y los hermanos Juvenal y José Sequea Torres, quienes habrían participado en la coordinación de inteligencia de la operación que buscaba sacar a Maduro del poder. Posteriormente sería detenido Brian Pérez Astudillo, el enlace colombiano de la operación. Sin embargo, como resultado de las investigaciones, algunos de los señalados de conspiración también contaban con procesos abiertos en Norteamérica por los delitos de fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido, de uso privativo de las fuerzas armadas y entrenamiento para actividades ilícitas. Los inculpados Álvarez, Russo y los hermanos Torres, en el momento de la captura contaban con circular prioritaria Interpol para su inmediata extradición al país del norte, lo que se ha dificultado por las condiciones de bioseguridad del país.

Una de las cabecillas de Gedeón, Yacsi Alexandra Álvarez, de 39 años, es la apuntada por los informes de inteligencia a los que accedió El Tiempo como “la coordinadora y logística de la organización” y, además, persona de confianza de Cliver Alcalá, uno de los 15 acusados por EEUU de narcotráfico, junto con Nicolás Maduro. “Llegó a Colombia por Barranquilla en un vuelo privado el 16 de enero de 2020 junto a los tres estadounidenses, Jordan Goudreau (prófugo), Airan Berry y Luke Denman (capturados por autoridades venezolanas)”, reprodujo El Tiempo en su momento. El gobierno colombiano ha llevado al pleno de la OEA alegaciones que pretenden aclarar su posición de no intervención en asuntos de otros países, con respaldo por parte de la comunidad continental. Los capturados continúan a disposición de las autoridades en el país.

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