Roberto Musso, cantante de El Cuarteto de Nos: "En el riesgo es cuando más recompensa hemos obtenido"

Roberto Musso tiene 55 años y, además de ser el cantante y compositor de El Cuarteto de Nos, es ingeniero. Quizás esté allí el motivo que explique por qué es tan estructurado a la hora de la creación, momento en el que él mismo se define como "muy meticuloso y obsesivo".

Musso y sus compañeros de grupo –Santiago Tavella (bajo y voz), Gustavo "Topo" Antuña (guitarra), Santiago Marrero (teclados y programaciones) y Álvaro Pintos (batería)- editaron el año pasado el disco Apocalipsis zombi.

Tras una larga gira que los llevó por todo el continente, arrancaron 2018 con conciertos en Uruguay y la Argentina. Este sábado se presentan en el Konex para hacer delirar de nuevo a los porteños. De esto y varias cuestiones más conversamos con Roberto.

—En primer lugar quería preguntarte cómo se preparan para la primera fecha del año en Buenos Aires. ¿Con qué expectativas llegan al Konex?

—Siempre nos ha resultado una experiencia interesantísima tocar en el Konex. Por un lado, salir del habitual entorno de shows en el Luna Park; y por otro lado, el encontrarnos con nuestro público y público nuevo que siempre se acerca en un marco de show veraniego en Buenos Aires no es algo común.

—En alguna oportunidad te escuché decir que con Habla tu espejo habías llegado a un "límite" y que no querías insistir por ese lado autorreferencial a la hora de componer. ¿En qué te inspiraste para hacer Apocalipsis zombi?

—La creación de la temática de Apocalipsis zombi surgió justamente de eso, de abordar el "yo" de las canciones desde otro ángulo no tan personal e introspectivo. Intenté diseminar ese "yo" en las personalidades de distintas bestias que habitan el disco y que fueran ellas y sus voces las que contaran historias.

—Me imagino que después del éxito de Habla tu espejo era difícil pensar en otro disco y quizá lo más fácil hubiera sido repetir la fórmula, algo que no hicieron. ¿Fue una decisión o surgió naturalmente? ¿Por qué optaron por hacer algo distinto?

—Siempre es difícil reformularse un nuevo camino o una nueva óptica sin perder la esencia o el estilo. Pero en el riesgo es cuando más recompensa hemos obtenido. Aquí me resultó interesante que en ese discurso de los personajes de Apocalipsis zombi nos podríamos sentir identificados como personas y como sociedad.

—Apocalipsis zombi contó con la producción de Cachorro López. ¿Cómo fue la experiencia de trabajar con él? ¿Qué es lo que más te impactó de estar a su lado y qué crees que le aportó al Cuarteto?

—Nosotros veníamos trabajando en los últimos cinco discos con Juan Campodónico en la producción, quien fue uno de los grandes responsables de nuestro nuevo sonido y del por qué la banda está en donde está hoy en día. Fue de común acuerdo que nos pareció que era el momento de buscar a alguien que le aportara nuevamente una mirada fresca y renovada desde afuera del Cuarteto. Así fue como llegamos a Cachorro, con quien armamos un equipo de trabajo y a nivel personal muy lindo. Aportó muchísimo desde su experiencia y profesionalismo.

—Esto ya te lo preguntaron muchas veces, pero quería que lo cuentes de nuevo para la gente que no lo sabe. ¿Qué buscaste transmitir con la canción "Gaucho power"?

– La chispa de la canción salió después del Mundial de Brasil, cuando los jugadores de Alemania hicieron un festejo en Berlín después de haberle ganado a la Argentina. Era una especie de cántico muy aburrido que decía algo así como "el alemán camina erguido, el gaucho se agacha". La verdad, no me pareció nada gracioso; y me dije: "Algún día voy a hacer una canción que empiece diciendo 'este gaucho no se agacha'". Aquí está.

—Hablemos del proceso creativo. Alguna vez te escuché decir que usás el método científico para componer. ¿En qué te inspirás? ¿Te lleva mucho tiempo escribir las canciones?

—Sí, soy muy lento en la etapa creativa, sobre todo buscando un concepto novedoso del que hablar y desarrollar. Hablaba del método científico porque, para mí, siempre hacer canciones es una especie de experimento en el que no hay que tener temor al fracaso, porque cada nuevo intento puede llegar a un lugar asombroso.

—Para hacer "Yendo a la casa de Damián" tengo entendido que pusiste todas las opciones de palabras en una planilla de Excel para ver las posibles combinaciones. ¿Qué tan estructurado sos a la hora de crear?

—Sí, tal cual, soy muy meticuloso y obsesivo cuando compongo, buscando frases y palabras que aporten a la hora de darle más información a las letras. Y dejar siempre caminos no cercenados a diversas interpretaciones. Ese halo de misterio que envuelve a muchas situaciones y personajes del Cuarteto no es casual.

—Respecto a la dinámica al interior del grupo: ¿Cómo es la relación entre ustedes en la intimidad? Te consulto esto porque pasan mucho tiempo juntos. Viajes, hoteles, pruebas de sonidos, conferencias de prensa… ¿Se hace difícil a veces?

—Tenemos un grupo humano maravilloso, entre músicos, técnicos y productores. Siempre hemos valorado muchísimo la parte personal de cada integrante que se ha ido sumando al equipo. Compartimos un montón de tiempo juntos en giras y viajes lejos de la familia, pero la pasamos muy bien. Cada quien tiene bien claro su rol dentro del grupo y eso es fundamental también.

—Muchas bandas uruguayas tuvieron en los últimos años mucho éxito en la Argentina. ¿Por qué pensás que se dio ese fenómeno? ¿Crecieron mucho ustedes o "descendimos" nosotros?

—Nosotros cuando empezamos a hacer música, los grandes referentes del rock en español eran, sin duda, los artistas argentinos. Creo que al principio de los 2000 una nueva generación de músicos de acá, además de un excelente nivel artístico, se supieron rodear de técnicos y productores que terminaron de armar el paquete de rock uruguayo de exportación, por llamarlo de alguna manera. Nosotros, que veníamos de una generación anterior, aprendimos de ellos. La Argentina siempre va a seguir dando grandes artistas y dentro del rock. obviamente. Hoy es un orgullo para nosotros estar a la par.

—¿Cómo ves la escena actual del rock argentino-uruguayo? ¿Qué bandas te sorprendieron de los dos lados del charco en el último tiempo?

—Me ha gustado mucho lo que escuché de Los Espíritus, fresco, renovador. En Uruguay hay una movida interesantísima de hip hop actual con bandas como Dostrescinco, AFC, Los buenos modales.

—Por último, volvamos al Cuarteto. ¿Cuáles son los proyectos para este año? ¿Se vienen largas giras? ¿Ya estás pensando en algún material nuevo? ¿Qué se le puede adelantar a los fans?

—Se viene un año de mucho viaje. La idea es regresar a todos los países en donde presentamos Apocalipsis zombi en 2017, siempre agregando alguna ciudad más de ser posible. A mí me gusta empezar a componer el nuevo material luego de sacar alguna conclusión de cómo resultó la gira presentación, para ver a dónde direccionarnos. En eso estamos…

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