Una cámara de seguridad fue testigo de un impactante femicidio en el barrio San Carlos de La Matanza. A Sandra Borda (46) su ex pareja Pedro Francisco Gasparutti (42) la mató frente a su hijo, a quien el femicida también le disparó. Pero no fue todo: cuando la mujer estaba en el piso agonizando, le dio dos culatazos. Luego, intentó escapar pero no llegó muy lejos: fue detenido. El joven herido está internado en el hospital.
Así, el caso quedó en manos del fiscal Marcos Borghi, titular de la UFI de Homicidios de La Matanza, quien este mediodía citó a declarar a Gasparutti. De esta manera, el fiscal Borghi solicitó la detención formal del acusado al Juzgado de Garantías Nº2 de ese departamento judicial.
Gasparutti está acusado del delito de homicidio agravado por haber mantenido una relación de pareja y por violencia de género, en perjuicio de su ex pareja, Sandra, que prevé una pena de prisión perpetua.
En el mismo hecho, además, resultó herido uno de los hijos de Borda, por lo que también fue acusado por ese delito. Los investigadores del caso sostuvieron que si bien resta el resultado preliminar de autopsia, se pudo establecer que Borda recibió un disparo en uno de sus dedos de una mano y luego, al caer al suelo, fue golpeada con el caño de la escopeta utilizada y rematada con un disparo que ingresó por la nuca y salió por el pómulo izquierdo.
En tanto, uno de los hijos de la víctima, que se encontraba junto a ella al momento de ser atacada, sufrió el impacto de perdigones en su hombro derecho y cuello, por lo que fue atendido en el hospital Paroissien de Isidro Casanova, donde se encuentra fuera de peligro.
El fiscal Borghi aguarda poder tomarle declaración testimonial tanto al hijo como a la actual pareja de Borda. Un investigador con acceso a la causa detalló que “no existen denuncias previas ni en sede judicial ni en comisarías”, realizadas por la mujer o su familia contra su expareja. ”Creemos que el móvil del ataque fue porque se había separado hace poco y eso generó el crimen por odio de genero, ya que según relataron testigos estaba celoso de la nueva pareja. También había un tema de plata en el medio”, explicó a la agencia Télam el mismo investigador.
El crimen ocurrió en la esquina de Carlos Casares y Bartolomé de las Casas, en la localidad de Isidro Casanova y en el límite con Rafael Castillo.Sandra volvía de la feria, que queda a dos cuadras de donde fue atacada. Iba acompañada de sus hijos cuando se encontró con su ex Pedro Francisco Gasparutti (42), a bordo de su Peugeot 504 negro. En las imágenes se ve cómo la mujer deja al grupo y se va hasta el cordón de la vereda, donde estaba el auto estacionado.
La mujer se acercó hasta la puerta del lado del acompañante, que estaba abierta. Hacía tiempo que se habían separado. Su hijo Maximiliano (29) la siguió unos segundos después y se puso a su lado, justo a la altura de la ventanilla derecha trasera. Su ex se quedó en el interior del coche. Y de pronto, todo se convirtió caos.
Tras un breve diálogo, Gasparutti sacó una escopeta recortada y disparó. Maximiliano resultó herido en el hombro y en el tórax, detallaron las fuentes consultadas y dijeron. “La víctima tenía una herida en uno de sus dedos, se cree que cuando le disparó al hijo, la bala le rozó. Ella cayó al piso del susto”.
Luego, Gasparutti le disparó a Sandra. “El balazo ingresó por la nuca y salió por el pómulo”, ampliaron las fuentes consultadas. No se quedó ahí el femicida: la volvió a atacar y le pegó culatazos.
Con Maximiliano herido y Sandra muerta, Gasparutti escapó a pie. A las pocas cuadras, el hombre fue alcanzado y arrestado por la fuerza especial de la Policía Bonaerense, UTOI. Quedó detenido y fue puesto a disposición de la Justicia.
Gasparutti antes de escapar dejó el arma homicida en el coche, donde este jueves la secuestraron los peritos del caso. También dos cartuchos de escopeta hallaron en el interior del Peugeot.
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