El presidente del PJ bonaerense, Máximo Kirchner, volverá a encabezar un acto propio. Será este viernes por la tarde desde el municipio de Lanús, donde gobierna el intendente camporista Julián Álvarez y con un formato similar al que hubo durante el acto en la ciudad de La Plata celebrado semanas atrás. Ante la discusión interna que evidencia el peronismo tanto a nivel nacional como en la provincia de Buenos Aires, Kirchner adoptó cierta exposición pública un tanto novedosa, pese a que internamente siempre mantuvo reuniones reservadas.
“Armar de nuevo” es la invitación a lo que se plantea como una charla abierta, desde las 17 horas de este viernes en el Club Talleres de Remedios de Escalada, organizada por el Ateneo Néstor Kirchner del distrito de la Tercera sección electoral. Es el mismo mensaje de la convocatoria hecha para el encuentro en La Plata.
El acto llega en medio de la interna que atraviesa el peronismo y que en los últimos días está en plena ebullición, con Cristina Kirchner por un lado y su decisión de conducir el partido -tras un operativo clamor impulsado por dirigentes propios- y el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela recorriendo distintos puntos del país y principalmente la provincia de Buenos Aires con el objetivo -también- de llevar adelante la conducción.
La fecha límite para la presentación de listas -si finalmente no hubiera unidad y la presidencia del Partido Justicialista se resolviera en una interna- es el 19 de octubre. Como contó Infobae, la dos veces presidenta del país llamó al mandatario riojano para avanzar en un esquema de acuerdo, pero Quintela no atendió el teléfono. El gesto, para mostrar autonomía, generó un fuerte malestar en el Instituto Patria desde donde despliega su estrategia la ex presidenta. En los últimos días, recibió los respaldos de los sanjuaninos Sergio Uñac, José Luis Gioja; además de la senadora nacional por Catamarca, Lucía Corpacci.
A estas acciones hay que agregarle la junta de avales para la candidatura de Cristina Kirchner a la presidencia del PJ, lanzada por el Partido Justicialista de la Provincia de Buenos Aires que justamente preside Máximo Kirchner.
Algunos consejeros del partido aseguran no haber sido consultados por el llamamiento partidario y sostienen que se enteraron “por redes”.
Durante el acto en la ciudad de La Plata que organizó La Cámpora hubo algunas gestualidades que desde el entorno político de Kicillof se interpretaron como parte de un operativo desgaste a la figura del mandatario provincial. La más notable, advierten, fue la canción que cantó la militancia y donde Kirchner dio lugar a que se entonen dichas estrofas que además de ratificar la conducción de Cristina Kirchner, también resonó: “Si no te gusta esta canción/vení te presto la mía”, en lo que pareció ser una respuesta al pedido de “nuevas canciones”, que habían esgrimido el mandatario provincial en el marco de la campaña del año pasado.
“El peronismo tiene que resolver su situación, sin limar a Axel porque Axel es desde el primer minuto la resistencia a Milei. Entonces no podemos estar diciéndole al compañero ‘vení que te canto la mía’, no cantate la que quieras vos; pero no podés armar un acto para forrear al gobernador que desde el primer momento se puso al frente. Lo que hicieron es de mala leche”; advirtió la diputada provincial, Susana González en declaraciones al streaming Uno Tres Cinco. González es una legisladora que responde directamente al intendente de Ensenada, Mario Secco.
El fin de semana pasado, Kirchner encabezó otro encuentro con dirigentes peronistas del interior bonaerense que se llevó adelante en Monte Hermoso. Allí, el presidente de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires, Alejandro Dichiara, planteó: “Desde acá le pedimos a la compañera Cristina Fernández de Kirchner, conductora incondicional de nuestro movimiento, que presida el Partido Justicialista Nacional. El peronismo necesita estar unido y la única que puede hacerlo es Cristina”.
Luego, en una ronda de prensa, Máximo Kirchner admitió las internas y también reconoció: “Hemos cometido errores y de eso nadie puede estar exento de reconocerlo, y sin embargo, acá en la provincia de Buenos Aires también pudimos construir una victoria. Se pudo crecer en el peronismo si se quiere, pero eso tiene sus claroscuros, sus grises; no hay términos absolutos en la autocrítica o en lo que no ha salido bien. Hoy creo que la reflexión que tenemos que tener es que lo que más le preocupa a uno es la Argentina en el tiempo y el tema de la deuda”.