Mauricio Macri y Alberto Fernández se saludaron con frialdad al final del debate

Mauricio Macri se acomodaba el saco solo, al costado de su atril, mientras el resto de los cinco candidatos se saludaban con dispar intensidad. Fue ahí cuando el Presidente, después de poco más de dos horas de debate, se acercó al resto y le estiró la mano a Alberto Fernández. Se trató de un frío saludo, rodeados de los otros cuatro postulantes, cuando la mayoría de los asistentes empezaban a dejar el Paraninfo de la Universidad Nacional del Litoral.

De hecho, fue Macri el que dejó la esquina y se acercó al grupo de candidatos, donde al principio quedó medio desubicado, ya que el que quedó primero en la línea para saludar era Nicolás del Caño, candidato del FIT, que en el 2015 se negó a estrecharle la mano. El Presidente se previno, y saludó fríamente a los demás, Fernández entre ellos, y se encontró con que Del Caño le estiraba la mano en un gesto que debe haber sorprendido a Macri.

Los seis contendientes empezaron a encarar para el costado del escenario para reunirse con sus respectivos equipos. Los fotógrafos gritaban “¡foto!, ¡foto!”, para que Macri, Fernández, Roberto Lavagna, José Luis Espert, Juan José Gómez Centurión y del Caño se agruparan juntos y permitieran una foto grupal. Los candidatos desoyeron el pedido.

El gélido saludo del final entre el Presidente y el candidato del Frente de Todos se correspondió a los cruces que ambos protagonizaron a lo largo del debate. El primero en atacar fue Fernández. Macri tardó en acusar el golpe, y recién reaccionó sobre el final. Le dedicó, de hecho, sus palabras finales.

El mandatario y el ex jefe de Gabinete se habían cruzado por primera vez después de muchos años en la antesala del Paraninfo. El equipo de campaña del Frente de Todos distribuyó, de hecho, una imagen de ambos en la que se ve a Fernández sonriente y a Macri con la mirada perdida.

Cansados, los candidatos dejaron rápidamente el escenario y se fueron a reunir con sus equipos, negándose a la esperada foto del final de debate, el primero que se realiza a partir de una ley votada por el Congreso en noviembre de 2016 que, entre otras cosas, estipuló que la Cámara Nacional Electoral es la encargada de organizarlo y consensuar las reglas con los candidatos que hayan superado el piso del 1.5% para competir.

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