El establishment brasileño cuestionó las últimas medidas económicas de Macri y sigue de cerca los pasos de Alberto Fernández

La pregunta más repetida es cuál puede ser el impacto de las crisis argentina

Compartir
Compartir articulo
Jair Bolsonaro y Mauricio Macri, sonrisas antes de las PASO y del triunfo de Alberto Fernández.  (Efedos)
Jair Bolsonaro y Mauricio Macri, sonrisas antes de las PASO y del triunfo de Alberto Fernández.  (Efedos)

SAN PABLO. La palabra "Argentina", con una crisis que asusta a empresarios, inversores y políticos, ganó espacio en las tapas de los medios periodísticos brasileños. En cambio, desapareció de los tuits y de las declaraciones de Jair Bolsonaro y sus colaboradores más íntimos.

Los últimos comentarios del presidente Bolsonaro, un día después de las PASO, fueron despectivos sobre el Frente de Todos de Alberto Fernández. Y días después, el martes 27 de agosto, el vicepresidente Hamilton Mourao se esforzó en "desideologizar" las relaciones bilaterales.

"La Argentina es nuestro tercer mayor socio comercial y precisamos mantener los vínculos con el país. Tenemos que preservar nuestros intereses". Luego de esta frase del vicepresidente Mourao, en Brasilia no hubo más menciones oficiales a las elecciones argentinas.

La victoria del 11 de agosto llevó al establishment brasileño a la convicción de que el próximo presidente argentino será Alberto Fernández. Casi no ven chances de que Mauricio Macri consiga su reelección. El propio Hamilton Mourao habló "de indicios fuertes" de un triunfo opositor. Ahora, las preocupaciones pasan por otro lado. Se preguntan: ¿Cómo puede impactar el desbarranco argentino en la economía brasileña?

Lo que más atemoriza, por ahora, es el "control de la salida de dólares" que figura entre las medidas anunciadas por el ministro Hernán Lacunza y por el titular del Banco Central Guido Sandleris. "Esto va a originar dificultades para el envío de dividendos a Brasil por parte de las firmas brasileñas", anticipan expertos en comercio exterior.

Carla Junqueira, de la firma Mattos Engelberg, afirmó: "Cuando se invierte un capital en un determinado país, es obvio que el inversor busca un lucro. Y si soy una empresa brasileña que invertí en la Argentina, voy a querer llevar las ganancias para Brasil. El problema es que ahora necesita la autorización del Banco Central". Concluyó: "El mayor miedo del inversor extranjero en cualquier país es no poder remitir los lucros al exterior".

Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, la formula presidencial del Frente de Todos.
Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, la formula presidencial del Frente de Todos.

Los medios brasileños destacan "el giro de 180 grados" en las posiciones del presidente Macri. Los testimonios de especialistas citados por la prensa local coinciden en un punto: "Luego de criticar al kirchnerismo, Macri acabó aplicando las mismas políticas. Y eso es por falta de habilidad de su gobierno".

Según el diario Estado de Sao Paulo "la medida de Macri fue una sorpresa". El medio recordó que el presidente argentino "revirtió muchas prácticas proteccionistas de su antecesora, Cristina Kirchner, y ahora no consigue contener las fuertes salidas de inversores y sustentar el peso, que entró en caída libre".

Y añadió Estado de Sao Paulo: "A los inversores les preocupa que una vez que entren en vigor las medidas, no puedan retirar los dólares. Y esto posiblemente dejará a la Argentina otra vez con una economía distorsionada por la intervención del gobierno".

Hernán Lacunza, ministro de Hacienda. (Gustavo Gavotti)
Hernán Lacunza, ministro de Hacienda. (Gustavo Gavotti)

Más pesimista todavía es el diario O Globo. En su análisis indica que "el primer día útil del mes, el dólar comercial opera en Brasil con valorización. Ahora está en 4,16, lo que representa un avance de 0,43% aún en el inicio de la rueda". ¿La causa?: "Las consecuencias de la guerra comercial internacional (Estados Unidos-China) y la crisis en la Argentina que presionan el cambio (en Brasil)".

Lo cierto es que el feriado en Estados Unidos, por el Día del Trabajo, lleva por el momento a que los inversores en la Bolsa de San Pablo se muevan con cautela. Acompañan muy de cerca los desdoblamientos del control de capitales anunciados por el gobierno argentino, con la lupa puesta en las dificultades de transferencias al exterior, que requerirán la aprobación del BCRA, y en los límites de compra de dólares a personas físicas de 10.000 dólares mensuales.

Claro que no sólo influye los sobresaltos argentinos en el alza de la cotización del dólar con relación al real. Los mercados evalúan los datos conocidos este lunes sobre cómo evalúan los brasileños al gobierno de Bolsonaro. Según una encuesta de Datafolha publicada esta mañana, la reprobación de la figura presidencial trepó de 33% en julio al 38% actual.

El Banco Central se apresta, por órdenes del ministro de Economía Paulo Guedes, a realizar nuevas ventas directas de dólares en los mercados financieros. Ya lleva entregados 450 millones de dólares, en lo que va de la jornada. Es la primera vez en 10 años que el Banco Central brasileño opera con divisas en efectivo para calmar los ánimos.

Como sucede en la Argentina, desde que Guido Sandleris se hizo cargo del Banco Central, tras los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional.

Seguí leyendo: