Por qué en Brasil los funcionarios acusados de corrupción van presos y en la Argentina no

En los últimos años, en la Argentina y Brasil tuvieron que rendir cuentas ante la justicia actuales o ex funcionarios acusados de corrupción. En el país vecino, actualmente gobernado por Michel Temer, muchos de ellos fueron detenidos durante sus procesamientos, algo que no ocurre en la Argentina.

¿Por qué sucede esto? Según explicó a Infobae José María Figuerero, abogado del estudio Fontán Balestra & Asoc, es por la decisión de los jueces que llevan adelante las causas: "Modernamente se considera que la prisión durante el proceso es un recurso excepcional, justificado por razones estrictamente procesales: riesgo de fuga, de destrucción de la prueba o de entorpecimiento de la investigación. En Brasil rigen los mismos principios, pero en los casos conocidos como Lava Jato la Justicia estimó que los imputados obstaculizan la investigación, en especial ocultando la prueba del delito (los fondos involucrados), y que ello justifica su detención preventiva".

"Nos hallamos ante ciertos principios que teóricamente todos respetan, pero que conducen a muy diferentes resultados de acuerdo al juez que los aplique", profundizó Figuerero.

En Argentina, que esto ocurra de esta manera fue resuelto por el Plenario Díaz Bessone, dictado por la Cámara de Casación, que dijo que tiene que haber razones procesales para dictar la prisión: "Si bien los parámetros son objetivos, su aplicación al caso particular es resorte de los jueces de la causa, quienes realizan un juicio de valor que puede variar según los casos".

Al respecto, ejemplificó: "Una persona puede estar acusada de robo pero como amenazó a los testigos está preso. En cambio, el jefe de una asociación ilícita que no presenta riesgos de afectar el proceso está en libertad".

Figuerero también explicó que esto no solo cambia entre países, sino que internamente también puede haber distintas interpretaciones: "En diferentes jurisdicciones se aplican de distinta manera, siendo el caso más conocido el de la provincia de Córdoba, donde son mucho más rigurosos".

Con el procesamiento de Cristina Elisabet Kirchner y Julio de Vido, entre otros, surgió nuevamente la estimación de si la ex presidente o el ex ministro podrían terminar tras las rejas. Aquí está preso sin condena José López, hallado tratando de esconder 9 millones de dólares en un convento, y con condena Ricardo Jaime.

En cambio, en su fallo de ayer, el juez Julián Ercolini explicó que no dictó la prisión preventiva para Cristina kirchner porque no hay riesgo de fuga ni de entorpecimiento de la causa. Además, sostuvo que no tiene condenas previas, ni declaraciones en rebeldía, se conoce su lugar de residencia, siempre estuvo a derecho en la causa y se presentó cuando fue citada, "lo que vislumbra una actitud positiva frente al desarrollo del proceso".

En el caso de Brasil, fueron varios los detenidos durante el proceso. Un nombre importante es el de Eduardo Cunha, ex presidente de la Cámara de Diputados e impulsor del 'impeachment' de Dilma. Fue alojado en un penal de Curitiba acusado de corrupción en el caso Petrobras y embargado por 220 millones de reales.

También hay dos ex gobernadores de Río de Janeiro privados de la libertad, también por corrupción en el caso Lava Jato. Uno es Sérgio Cabral, del PMDB, quien estuviera en el cargo entre 2007 y 2014 y es acusado de beneficiar con más de 220 millones de reales a constructoras de obra pública. El otro es Anthony Garotinho, del Partido de la República, quien fue gobernador entre 199 y 2002.

Otro peso pesado del gobierno de Lula detenido es el ex ministro de Hacienda, Antonio Palocci, también por el caso Petrobras acusado de participar en una presunta trama de lavado de dinero en la cual estaría implicada la constructura Odebrecht.

Días antes a Palocci, cayó preso el ex ministro de Economía de Lula y Dilma, Guido Mantega, por el mismo caso, causado de ser un intermediario de sobornos, aunque fue liberado pocas horas después por no haber "riesgos de interferencia en la recolección de pruebas".

Delcidio Amaral, senador del Partido de los Trabajadores, también fue detenido por entorpecer la investigación del 'Lava Jato' acusado de ofrecerle un soborno mensual de 50 mil reales a un ex director de Petrobras, Nestor Cerveró, por su silencio.

Otro implicado es el ex ministro de los Gobiernos de Lula y Dilma, Paulo Bernardo, quien tiene prisión preventiva por el caso Petrobras por desvío de fondos.