Bus de ‘El Rápido’ fue baleado a pocos minutos de haberse iniciado el nuevo paro de transportistas en Lima y Callao

Un nuevo bus de transporte público ha sido víctima de un atentado. El hecho ocurrió durante la madrugada del 7 de abril, día en que el gremio de transportistas había convocado un paro en Lima y Callao. Los primeros reportes señalan que una unidad de la empresa ‘El Rápido’ (Línea 42) fue baleada cerca de su paradero inicial en San Martín de Porres.

Al cierre de esta nota, no se han reportado heridos a pesar de que el bus llevaba pasajeros cuando fue impactado por balas. Imágenes difundidas en redes sociales por el periodista Roger García muestran los agujeros que provocaron los impactos. Otras unidades de la misma empresa circulan por la capital, aunque algunos fueron detenidos por los manifestantes que reclaman su participación en la manifestación.

Los ataques contra los buses de transporte público se han vuelto más frecuentes durante las últimas semanas y, lamentablemente, 15 transportistas han perdido la vida en lo que va del 2025. El dato fue compartido por la Asociación Nacional de Integración de Transportistas (Anitra), la misma que a través de la protesta exige respuestas de las autoridades para frenar la ola delincuencial.

El sábado 5 de abril de 2025, un nuevo atentado contra la empresa de transportes Etuchisa, conocida como ‘Los Chinos’, dejó como víctima mortal al chofer Loymer Noé Benigno, de 38 años. El ataque ocurrió en plena vía pública, en la avenida Alfredo Mendiola, frente a la Universidad César Vallejo, en el distrito de Los Olivos. Dos sicarios a bordo de una motocicleta interceptaron el bus, que en ese momento trasladaba pasajeros, y abrieron fuego directamente contra el conductor. A pesar de los esfuerzos por auxiliarlo, Benigno falleció mientras era trasladado de emergencia a un hospital cercano. Los pasajeros, aunque aterrados, resultaron ilesos.

Este violento episodio forma parte de una serie de ataques que la empresa ha sufrido desde 2024, presuntamente ligados a casos de extorsión por mafias que operan en el sector transporte. Se sospecha que el atentado fue una represalia por la negativa de la empresa a pagar cupos exigidos por organizaciones criminales. La Policía Nacional del Perú ha iniciado las investigaciones correspondientes y no descarta que el ataque esté conectado a redes de extorsionadores que han intensificado sus acciones en Lima Norte.

Vecinos y testigos del ataque manifestaron su temor ante la creciente ola de violencia, mientras los trabajadores del transporte expresaron su indignación y exigieron mayor protección y acciones firmes por parte de las autoridades. El caso ha encendido nuevamente la alarma sobre la inseguridad que afecta a los operadores de transporte público en la capital.

La incontrolable ola de inseguridad que afecta a diversos gremios ha movilizado a los transportistas. Estos convocaron un paro de actividades desde las 4:00 a.m. del 7 de abril con el fin de reclamar una respuesta concreta del Poder Ejecutivo y Legislativo. Al cierre de esta nota ya se había confirmado el colapso de las estaciones del Metropolitano y el bloqueo de la Panamericana Norte por parte de buses de la empresa Etichusa.

La protesta se extenderá a lo largo de la jornada y se movilizará hasta el Congreso de la República. Entre los puntos de concentración se encuentran el paradero Fundición en San Juan de Lurigancho, Caja de agua en el mismo distrito, la carretera central y el puente Atocongo. Se desconoce si el despacho de algún parlamentario ha coordinado alguna reunión con los transportistas para oír sus reclamos y presentar propuestas legislativas que detengan la crisis de inseguridad ciudadana.