Inició vendiendo tortas en el colegio y ahora cuenta con 15 locales de repostería en Lima: conoce la historia de María Almenara

En medio del bullicio de Lima, la historia de María Almenara se destaca como un ejemplo de inspiración. Desde sus humildes comienzos como estudiante hasta llegar a ser una reconocida empresaria con 15 locales de repostería esparcidos por la ciudad, su camino es digno de análisis.

Todo comenzó con el aroma a chocolate que atrapó a una joven María. ¿Cómo logró transformar su gusto por los dulces en un extenso imperio de repostería que encanta a los limeños? Su relato es una muestra de tenacidad y dedicación, junto con un inquebrantable deseo de superación que ha capturado el interés de la comunidad de Lima. Te invitamos a descubrir esta fascinante historia de los inicios de María, donde la determinación y la constancia se fusionan para forjar un exitoso imperio de repostería.

Desde una edad temprana, su camino hacia el mundo del emprendimiento comenzó a tomar forma. Según información compartida por su portal ‘María Almenara’, la situación laboral volátil de su padre, que implicaba constantes viajes por el país, llevó a María a pasar sus años de infancia en la provincia de Talara, donde pudo asistir al colegio en Punta Arenas.

Julia recuerda con cariño cómo María Alejandra, decidida a convertir su habilidad en un negocio, llevó la torta al colegio al día siguiente para venderla. Inicialmente, cada porción se vendía por tan solo S/ 1, logrando un total de 24 porciones. Con el tiempo, María Alejandra aumentó su producción, llevando dos tortas diariamente y generando ingresos de S/ 48 por día.

Después de finalizar la escuela secundaria, Almenara regresó con su familia a Lima, su ciudad natal. Siguiendo el consejo de su prima, optó por estudiar Publicidad, según lo reportado por el portal InfoMercado. Una vez completada su carrera, María consiguió prácticas en un canal de televisión. Aunque al principio sus tareas eran simples, como preparar café y hacer fotocopias, pronto sintió que esto no satisfacía su pasión. Después de solo un mes y medio, tomó la valiente decisión de renunciar para dedicarse a lo que realmente le apasionaba: la venta de postres.

María no desperdició la oportunidad de aprovechar sus contactos en el campo de la publicidad para expandir su incipiente negocio. Ella misma recorría las empresas en su bicicleta, ofreciendo brownies, alfajores y dulces recién horneados. Su empeño dio frutos rápidamente, logrando ventas consistentes que alcanzaban entre 500 y 600 soles al día.

Con determinación y visión de futuro, decidió invertir sus ahorros escolares en la compra de su primer horno, marcando así el inicio de su ascenso en el mundo de la repostería. En 2007, su administrador, Carlos Armando de la Flor, le sugirió alquilar un departamento desocupado en el edificio donde residía, el cual transformaron en un taller de producción totalmente equipado.

Dos años después, María recibió una oferta de Starbucks para abastecer de muffins y galletas a sus tiendas, tanto en provincia como en Lima. Este acuerdo representaba el 98% de sus ingresos. Sin embargo, un día la municipalidad llegó para clausurar el departamento donde se ubicaba su taller, tras quejas de sus vecinos.

María aprovechó sus ahorros para alquilar un espacio en Chorrillos y acondicionarlo para su producción. Ella recuerda cómo la cafetería donde trabajó le brindó una valiosa formación en la gestión detrás del mostrador, enseñándole sobre calidad y procesos, convirtiéndose así en su escuela de negocios.

María y su esposo decidieron alquilar un local en la Av. La Mar en Miraflores, para abrir su primera tienda. A pesar de tener aún un contrato vigente con la cafetería, se dedicaron durante dos años a construir este nuevo espacio. El crecimiento fue vertiginoso: al año siguiente, inauguraron una segunda tienda y en 2020, abrieron cinco locales más.

En la actualidad, cuentan con 15 locales:

1. En el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez.
2. Av. Andrés Aramburú 650 – Surquillo
3. Av. Bolívar 330 – Pueblo Libre.
4. Av. Los Frutales 1095 – La Molina.
5. Centro comercial Megaplaza – Chorrillos.
6. Av. Dos de Mayo 1380 – San Isidro.
7. Centro Comercial Megaplaza local 64 y 64a – Independencia.
8. Av. La Marina 325 (altura puente Torre Tagle) – Pueblo Libre
9. Av. La Encalada 1182 – Surco.
10. Av. La Mar 698 – Miraflores.
11. Calle 11 477 esquina con Av. La Molina – La Molina
12. Avenida 28 de julio 1011, cc Paso 28 de julio – Miraflores.
13. Avenida Primavera 1120 – Santiago de Surco.
14. La Marina 2530 – San Miguel.
15. Avenida Carlos Villarán 500, cc Plaza Santa Catalina – La Victoria.

María Almenara se distingue por ofrecer una amplia variedad de productos de repostería, satisfaciendo diversas preferencias con opciones que van desde dulces hasta salados. En su sitio oficial ‘María Almenara’, los productos están categorizados en: tortas, catering, boxes de regalo, cookiss, porciones individuales, kekes, galletas, helados, desayunos, bebidas y una sección de dulces salados, lo que facilita la navegación y elección de los clientes.

Dentro de sus opciones más solicitadas se encuentran los boxes de regalo, que incluyen:

• Un Box Mini que ofrece 8 porciones de torta de chocolate, a un precio de 36 soles.
• Un Box que combina 10 mini croissants de jamón y queso gouda más 10 petites de pan de pollo, cortaditos con mayonesa de apio casera, a 60 soles.
• Un box de Red Velvet con 12 piezas, disponible a 99 soles.
• La clásica torta de chocolate, también a 99 soles.

Esta diversidad de opciones refleja el compromiso de María Almenara con la calidad y la satisfacción de sus clientes, ofreciendo desde bocados dulces y salados hasta opciones personalizadas para regalo, adaptándose a distintos gustos y necesidades.