El misterio del submarino U-3523: la huida de Hitler a la Argentina, los archivos secretos de la CIA y una extraña foto

Una de las versiones más difundidas sobre el supuesto escape del criminal nazi sostenía que llegó a bordo de la nave más sofisticada de la marina alemana, capaz de atravesar el Atlántico sin necesidad de emerger. Aunque nunca la aceptó oficialmente, la inteligencia norteamericana no descartó esa posibilidad y hay documentos que prueban la búsqueda del Führer en el país sudamericano. Qué fue del submarino y dónde se la halló 73 años después

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La versión aseguraba que el Führer no se suicidó en el búnker el 30 de abril de 1945 sino que, acompañado por Eva Braun y unos pocos colaboradores, abordó un avión pequeño que lo llevó a un puerto donde lo esperaba desde hacía días un submarino que navegó hasta una costa del sur de la Argentina
La versión aseguraba que el Führer no se suicidó en el búnker el 30 de abril de 1945 sino que, acompañado por Eva Braun y unos pocos colaboradores, abordó un avión pequeño que lo llevó a un puerto donde lo esperaba desde hacía días un submarino que navegó hasta una costa del sur de la Argentina

Debieron pasar 73 años para que se derrumbara –o, para decirlo mejor, se hundiera definitivamente– una de las teorías más difundidas sobre la supuesta huida de Adolf Hitler a Sudamérica luego de la derrota del Tercer Reich.

La versión aseguraba que el Führer no se suicidó en el búnker el 30 de abril de 1945 sino que, acompañado por Eva Braun y unos pocos colaboradores, abordó un avión pequeño que lo llevó a un puerto donde lo esperaba desde hacía días un submarino que navegó hasta una costa del sur de la Argentina. Allí, siempre según ese relato, ya había un operativo montado que esperó su desembarco y lo escondió en un sitio seguro.

La historia se sostuvo durante todos esos años porque el submarino en cuestión, el U-3523, desapareció sin dejar rastros. Se decía que, para borrar toda huella de ese escape, fue hundido por su propia tripulación en alta mar, después de dejar a Hitler en tierra firme.

Tampoco sonaba descabellada porque otros dos submarinos alemanes, el U-530 y el U-977, se rindieron en Mar del Plata bastante después de la caída del Tercer Reich, en julio y agosto de 1945. Si dos habían llegado hasta las costas argentinas, bien podría haberlo hecho un tercero.

Un modelo de submarino similar al que siempre se dijo que había llevado a Hitler a la Argentina y que fue hallado en Dinamarca
Un modelo de submarino similar al que siempre se dijo que había llevado a Hitler a la Argentina y que fue hallado en Dinamarca

Hubo que esperar hasta el 13 de abril de 2018 para descubrir la verdad sobre el final del U-3527 y, con ella, de esa supuesta huida de Hitler cruzando el Atlántico. Ese día el Museo de Guerra de Dinamarca, ubicado en Copenhague, anunció que había hallado el famoso submarino nazi en las aguas territoriales de ese país, hundido a 123 metros de profundidad.

“El museo localizó los restos del submarino alemán U-3523, que fue hundido en el estrecho de Skagerrak por la aeronave B24 Liberator el 6 de mayo de 1945″, informó el Museo en un comunicado.

Y se refirió específicamente a la versión: “Debido a su capacidad de permanecer sumergido durante un tiempo prolongado, el U-3523 alimentó los rumores de que había sido el medio de transporte de la élite nazi para escapar hacia Sudamérica”.

Buscando a Hitler

La versión oficial sobre la suerte corrida por Hitler al final de la Segunda Guerra es que, el 30 de abril de 1945, Hitler ordenó a sus ayudantes traer varios bidones de gasolina en la salida exterior del búnker para deshacerse de su cuerpo y del de su esposa, Eva Braun. Luego de eso, el matrimonio se encerró en una habitación durante 15 minutos y para cuando entraron en la sala, Hitler tenía un disparo de bala en la cabeza y Braun yacía tumbada por el efecto del cianuro. Sus cadáveres fueron quemados, como había ordenado el Führer derrotado.

Hitler y Eva Braun en la intimidad (Getty)
Hitler y Eva Braun en la intimidad (Getty)

Los aliados dieron públicamente por cierta esa historia –reconstruida a partir de los testimonios de colaboradores del bunker-, pero lo cierto es que dudaron en secreto de su veracidad. Podía ser una maniobra de distracción para facilitar la huida de Hitler y evitar que se lo siguiera buscando.

Hay pruebas concretas de que la inteligencia norteamericana intentó rastrearlo en la Argentina.

En julio de 1945, un cable secreto de la Embajada norteamericana en Buenos Aires informó a Washington: “Llegada de submarinos alemanes a las costas de Argentina. Circulan varios rumores en Buenos Aires referidos a la llegada del submarino U-530 antes de su rendición. Una fuente de credibilidad desconocida asegura que el 28 de junio un submarino emergió en Puerto San Julián, territorio de la provincia de Santa Cruz, del que descendieron dos personas sin identificar, uno sería un alto oficial y la otra una muy importante persona”.

Hermann Fegelein, cuñado de Hitler, y su esposa Margarete "Gretl" Braun, hermana de la amante del Führer (Interfoto)
Hermann Fegelein, cuñado de Hitler, y su esposa Margarete "Gretl" Braun, hermana de la amante del Führer (Interfoto)

Los norteamericanos no descartaron que el submarino visto en Puerto San Julián fuera en realidad el U-3523 y no el U-530. En cuanto a las dos personas mencionadas, se pensó que podían ser Hitler –el civil– y su cuñado Hermann Fegelein, quien supuestamente había sido ejecutado por orden del propio Führer el 29 de abril anterior en el bunker.

Informes y especulaciones

Un informe, en este caso del FBI, fechado el 21 de septiembre de 1954 detallaba las declaraciones de testigos que aseguraban que Hitler había llegado a la Argentina dos semanas y media después de la caída de Berlín a bordo de un submarino. También indica un supuesto destino en tierra: “Según un plan preestablecido con seis altos funcionarios argentinos, al amanecer se cargaron todas las provisiones y partieron hacia las estribaciones de los Andes meridionales”, dice el archivo desclasificado.

Uno de los archivos secretos de la CIA
Uno de los archivos secretos de la CIA

No son pocos los documentos de la inteligencia estadounidense desclasificados que demuestran que en Washington sospechaban que Hitler había logrado escapar. Uno de ellos, del 3 de octubre de 1955, contiene denuncias de un ex soldado de las SS llamado Philip Citroën de que el Führer había estado escondido en la Argentina y que de allí había seguido a Colombia. Incluso, incluye una foto del presunto Hitler tomada en 1954 en la ciudad colombiana de Tunja. El documento agrega: “Según Citroën, los alemanes que residían en Tunja, Colombia, siguieron a ese supuesto Hitler ofreciendo el saludo nazi”.

Uno de los archivos de inteligencia, del 3 de octubre de 1955, contiene denuncias de un ex soldado de las SS llamado Philip Citroën de que el Führer había estado escondido en la Argentina y que de allí había seguido a Colombia. Incluso, incluye una foto del presunto Hitler tomada en 1954 en la ciudad colombiana de Tunja
Uno de los archivos de inteligencia, del 3 de octubre de 1955, contiene denuncias de un ex soldado de las SS llamado Philip Citroën de que el Führer había estado escondido en la Argentina y que de allí había seguido a Colombia. Incluso, incluye una foto del presunto Hitler tomada en 1954 en la ciudad colombiana de Tunja

Incluso en 2014, el argentino Abel Basti, autor de El exilio de Hitler, sostenía que, una vez llegado a las costas argentinas, Hitler “no vivió enclaustrado” sino que se movía con libertad por Argentina y otros países como Brasil, Colombia y Paraguay. Según Basti, las principales agencias de inteligencia del mundo, como la CIA y el MI6 británico, contaban con informes y fotografías que confirmaban su presencia en Sudamérica después de 1945.

Un submarino sofisticado

La rendición en el puerto de Mar del Plata de los submarinos U-530, el 10 de julio de 1945, y U-977, el 17 de agosto de ese año, despertó las alertas de la inteligencia aliada sobre una posible huida de Hitler.

Cuando se entregó, el comandante del U-530, Otto Wermouth, había destruido la bitácora de a bordo y sus testimonios sobre la deriva de la nave fueron contradictorios. Tampoco pudo explicar de manera creíble porqué faltaba un bote de goma, similar a otro que luego fue encontrado en las playas de Mar del Sur.

El U-977 apareció en Mar del Plata el 17 de agosto de 1945
El U-977 apareció en Mar del Plata el 17 de agosto de 1945

Tampoco fue del todo claro Heinz Schäffer, comandante del U-977, cuando le pidieron que explicara por qué, al comparar el número de marinos que se entregaron con la propia bitácora de la nave, faltaban 16 tripulantes y tres botes. Dijo que “la noche del 10 de mayo de 1945, entre las 02.30 h. y las 03.30 h., 3 marineros y 13 suboficiales tomaron tres de las balsas más grandes, una de las cuales fue dañada y abandonada (...) siendo dejados sobre la Isla de Holsenoy, cerca de Bergen (Noruega)”. Sus palabras nunca pudieron ser comprobadas.

Hitler y algunos de sus acólitos podía haber bajado de cualquiera de esos dos submarinos en las costas del sur argentino, pero la mira seguía puesta en el U-3523, que no aparecía por ningún lado.

El U-530 se rindió en Mar del Plata el 10 de julio de 1945
El U-530 se rindió en Mar del Plata el 10 de julio de 1945

No se trataba solamente de que no se conocía su destino sino –y sobre todo– de sus características especiales: era el modelo más sofisticado de los U-boat alemanes, de la flota Tipo XXI, el único capaz de atravesar el Atlántico hasta Sudamérica sin necesidad de emerger.

Si Hitler y otros altos jerarcas habían huido de Alemania en un submarino, tenía que ser ese, el misterioso U-3523. Además, era casi único: los alemanes habían alcanzado a fabricar solamente dos de ese modelo.

Doble hundimiento

El descubrimiento del U-3523 puso fin al misterio de su desaparición y también acabó con la teoría que sostenía que Hitler había llegado en él a las costas argentinas.

Las señales que permitieron el hallazgo en las profundidades aparecieron en una pantalla durante una exploración del fondo marino que un grupo de investigadores del Museo Jutland realizaba a 18,5 kilómetros al norte de la ciudad danesa de Skagen.

El U-3523 fue hundido por bombas de profundidad en el estrecho de Skagerrak por un avión "B24 Liberator" de la Royal Air Force británica, el 6 de mayo de 1945
El U-3523 fue hundido por bombas de profundidad en el estrecho de Skagerrak por un avión "B24 Liberator" de la Royal Air Force británica, el 6 de mayo de 1945

El Museo Jutland hasta ahora ha barrido y encontrado alrededor de 450 naufragios en el Mar del Norte y en el Estrecho de Skagerrak. De ese total, 12 son submarinos, 3 de los cuales son británicos y 9 alemanes.

Por su localización en el estrecho de Skagerrak se pudo establecer también que el U-3523 fue hundido el 6 de mayo de 1945, con 58 tripulantes a bordo, por el bombardero aliado B24 Liberator. Lo detectaron a unos 16 kilómetros al oeste de la posición en que fue reportado por el bombardero que lo atacó.

El U-3523 fue hallado a unas 9 millas náuticas (16,6 km) al oeste de la posición en que fue reportado por el bombardero que lo atacó
El U-3523 fue hallado a unas 9 millas náuticas (16,6 km) al oeste de la posición en que fue reportado por el bombardero que lo atacó

Una vez encontrado, su identificación no resultó difícil. Además de los datos históricos que señalaban que el U-3523 había sido hundido en esa zona, existe un modelo idéntico en el Museo Marítimo Alemán con el cual se compararon los restos recuperados.

“Lo curioso es que, a diferencia de otros hallazgos, los restos estaban como clavados en el lecho marino. Lo que hizo más fácil su identificación”, explicaron los expertos de Jutland al anunciar el descubrimiento.

Desde el Museo Jutland informaron informaron que la nave se encuentra a 123 metros de profundidad, por lo que adelantaron que será muy difícil acceder a ella
Desde el Museo Jutland informaron informaron que la nave se encuentra a 123 metros de profundidad, por lo que adelantaron que será muy difícil acceder a ella

Cuatro años después de que lo encontraran, el misterioso U-3523 sigue en el fondo del mar. Se calcula se demorará años en recuperar sus restos, por la profundidad a la que se encuentran y lo costoso de la operación de rescate.

Hasta entonces, seguramente, habrá quienes sostengan que Adolf Hitler no se suicidó en el bunker y que sus huesos quedaron dentro del submarino, en el fondo del mar.

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