Fito y su particular tour-Páez por Nueva York: "La música aniquila las coyunturas y los prejuicios, y trasciende las ideologías”

Tras el histórico concierto que brindó en el Carnegie Hall, acompañamos al rosarino de recorrida por tradicionales puntos de la Gran Manzana: el famoso club de jazz Birlando, Times Square, Central Park y la vereda del edificio Dakota, donde a los 40 años fue asesinado. Una imperdible galería con los tops neoyorquinos del músico rosarino.

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Fito quiso detenerse en la esquina del edificio Dakota, sobre el 1 de la calle 72. Allí, el 8 de diciembre de 1980 a las 10:50 PM y delante de su mujer, Yoko Ono, John Lennon fue asesinado de cinco disparos por su supuesto admirador Mark Chapman. A Páez todavía no le cierra el motivo que acabó con la existencia del eterno líder de los Beatles. “Nunca me quedó claro ese asesinato. John venía haciendo una movida activista muy fuerte, que incluía protestas en contra del sistema capitalista, entre otras cuestiones… No sé”, duda.
Fito quiso detenerse en la esquina del edificio Dakota, sobre el 1 de la calle 72. Allí, el 8 de diciembre de 1980 a las 10:50 PM y delante de su mujer, Yoko Ono, John Lennon fue asesinado de cinco disparos por su supuesto admirador Mark Chapman. A Páez todavía no le cierra el motivo que acabó con la existencia del eterno líder de los Beatles. “Nunca me quedó claro ese asesinato. John venía haciendo una movida activista muy fuerte, que incluía protestas en contra del sistema capitalista, entre otras cuestiones… No sé”, duda.
Paéz en el 315 de la 44th Street: la puerta del Birdland Jazz Club. “Una casa legendaria que abrió en 1949, por donde pasaron todos los grosos del género: Thelonious Monk, Miles Davis, Lester Young… ¡hasta Michel Petrucciani en los Ochenta! Se decís ‘jazz’ en Nueva York, decís Birdland o Blue Note, dos sitios maravillosos para visitar y disfrutar”.
Paéz en el 315 de la 44th Street: la puerta del Birdland Jazz Club. “Una casa legendaria que abrió en 1949, por donde pasaron todos los grosos del género: Thelonious Monk, Miles Davis, Lester Young… ¡hasta Michel Petrucciani en los Ochenta! Se decís ‘jazz’ en Nueva York, decís Birdland o Blue Note, dos sitios maravillosos para visitar y disfrutar”.
Fito afirma: “Jamás olvidaré el viernes 28 de septiembre de 2018”. Fue el día de su transitar por el corazón del Carnegie Hall junto a su banda, integrada por Juan Absatz, Juani Agüero, Anita Alvarez de Toledo, Gastón Baremberg y Diego Olivero. Páez aquella noche se decidió por un traje turquesa (en lugar de otro rosa) del diseñador británico Paul Smith, para contrastar el rojo by Pablo Ramírez que usaría Alvarez de Toledo, su corista. “Creo que a ambas pilchas deberíamos enmarcarlas. Siento que fue un viaje consagratorio”, celebra.
Fito afirma: “Jamás olvidaré el viernes 28 de septiembre de 2018”. Fue el día de su transitar por el corazón del Carnegie Hall junto a su banda, integrada por Juan Absatz, Juani Agüero, Anita Alvarez de Toledo, Gastón Baremberg y Diego Olivero. Páez aquella noche se decidió por un traje turquesa (en lugar de otro rosa) del diseñador británico Paul Smith, para contrastar el rojo by Pablo Ramírez que usaría Alvarez de Toledo, su corista. “Creo que a ambas pilchas deberíamos enmarcarlas. Siento que fue un viaje consagratorio”, celebra.
Fito Páez subraya que a lo largo del recital en la legendaria salada (concierto que duró tres horas –de 20 a 23–, contó con intervalo, cinco bises y un festival de clásicos (“ningún cover”), “estrené mi tema instrumental La familia, que grabamos hace dos años en Villa La Angostura a la par de Diego Olivero. La verdad –revela mediante una carcajada–, me di todos los gustos”.
Fito Páez subraya que a lo largo del recital en la legendaria salada (concierto que duró tres horas –de 20 a 23–, contó con intervalo, cinco bises y un festival de clásicos (“ningún cover”), “estrené mi tema instrumental La familia, que grabamos hace dos años en Villa La Angostura a la par de Diego Olivero. La verdad –revela mediante una carcajada–, me di todos los gustos”.
Páez en pleno Times Square, posando con sus entrañables amigos santafesinos Carlos Vandera y César “Coki” Debernardi. “De haber podido –confiesa el rockero–, me hubiese gustado que en el show del Carnegie Hall hubieran estado mi tía Charito, mis primas, las hermanas de mi madre, Leonor y Yiya, y –ya que de familia hablamos– toda mi familia de Rosario y Villa Constitución”.
Páez en pleno Times Square, posando con sus entrañables amigos santafesinos Carlos Vandera y César “Coki” Debernardi. “De haber podido –confiesa el rockero–, me hubiese gustado que en el show del Carnegie Hall hubieran estado mi tía Charito, mis primas, las hermanas de mi madre, Leonor y Yiya, y –ya que de familia hablamos– toda mi familia de Rosario y Villa Constitución”.
Fito a puros abrazos, por el Central Park, con su pareja, la actriz María Eugenia Kolodziej y sus hijos, Margarita (de la relación con Romina Richi) y Martín (con Cecilia Roth). “Desde los afectivo y desde lo profesional, éste fue un viaje inolvidable”, destaca.
Fito a puros abrazos, por el Central Park, con su pareja, la actriz María Eugenia Kolodziej y sus hijos, Margarita (de la relación con Romina Richi) y Martín (con Cecilia Roth). “Desde los afectivo y desde lo profesional, éste fue un viaje inolvidable”, destaca.
Fito se alojó en el hotel Sofitel, con vista al edificio Chrysler. En la terraza del piso 24, le comentó a GENTE: “Mata rodar mostrando tu música. Yo, que he dedicado tanto a la ingeniería musical, puedo asegurarte que la música es una sola. No importa cómo ni dónde sea tocada. La música aniquila las coyunturas y los prejuicios, y trasciende las ideologías. Con la música no se trata de ser ingenioso, sino de tocar la fibra más íntima del hueso humano”, remata quien en medio del tour de su disco La ciudad liberada, el 22 de noviembre aprovechará para celebrar en el Gran Rex las tres décadas de su larga duración Ey!
Fito se alojó en el hotel Sofitel, con vista al edificio Chrysler. En la terraza del piso 24, le comentó a GENTE: “Mata rodar mostrando tu música. Yo, que he dedicado tanto a la ingeniería musical, puedo asegurarte que la música es una sola. No importa cómo ni dónde sea tocada. La música aniquila las coyunturas y los prejuicios, y trasciende las ideologías. Con la música no se trata de ser ingenioso, sino de tocar la fibra más íntima del hueso humano”, remata quien en medio del tour de su disco La ciudad liberada, el 22 de noviembre aprovechará para celebrar en el Gran Rex las tres décadas de su larga duración Ey!

Por Leonardo Ibáñez.
Fotos: Diego Soldini, Ja! Comunicación y Sony Music.

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