
Exactamente hace 30 días, cuando terminaba abril y ya se conocían los números de los primeros tres meses del año, el mundo del automóvil recibía con sorpresa una novedad que sacudía los cimientos más profundos de la industria. Europa, el continente en el que nació el auto y donde están las casas matrices de más marcas que en ninguna otra parte del mundo, declaraba que el Tesla Model Y, el SUV eléctrico de origen norteamericano, se había convertido en el modelo más vendido en el primer trimestre entre todos los autos de todas las tecnologías de propulsión disponibles.
Fue una confirmación de una tendencia hacia los autos a batería que está ocurriendo con mayor intensidad en el Viejo Continente y China más que en el resto de los mercados. Pero fue también una ratificación de la agresiva política que lleva adelante Elon Musk, y que incluyó bajar el precio de sus autos eléctricos en varias etapas desde diciembre de 2022.
Con el cierre de mayo, y con los datos de 53 mercados de todo el mundo, la prestigiosa consultora inglesa JATO Dynamics acaba de publicar su esperado informe confirmando que por primera vez en la historia del automóvil, un vehículo eléctrico es el líder de ventas en el primer trimestre de un año calendario a nivel global. Y como no podía ser de otro modo, ese automóvil es otra vez el Tesla Model Y.

A mediados del año pasado, antes de insinuar siquiera la idea de bajar los precios de algunos de sus modelos, Musk había vaticinado en la reunión anual de accionistas que el SUV de la marca sería el auto más vendido del mundo para 2023. Si bien el crecimiento de Tesla era un buen augurio, para muchos analistas de la industria, aquella había sido una proyección demasiado optimista de su parte. Por entonces, un Model Y tenía un precio de 52.000 euros, lo que hacía difícil creer que tantas personas pudieran acceder a comprar uno.
Pero cuando en diciembre llegó la primera bajada fuerte de precios y durante los primeros meses del año ocurrieron otros cinco ajustes hacia la baja, las cosas cambiaron de color. Hoy, el Tesla Model Y parte de la base de 46.000 dólares y es una oferta mucho más accesible para los bolsillos de una clase media que, ayudada por los beneficios fiscales e impulsada hacia los autos sustentables como principio de ecología, parece haberse decidido por este modelo.

Toyota había sido el dominador del mercado a nivel mundial una vez más en 2022, con sus modelos Toyota Corolla y Toyota RAV4 en los dos primeros puestos. Tesla estaba en tercer lugar como fabricante detrás de Volkswagen Group, aunque cuarto en el ranking por modelos, superado también por las pick-up Ford serie F. El Model Y era su mejor producto, por supuesto, desplazando al Model 3 que había reinado entre los autos de Tesla hasta 2021.
Este año, con los primeros tres meses computados, Tesla vendió 267.000 unidades del Model Y, lo que implica un crecimiento de un 69% con respecto al mismo período del año pasado. Eso lo catapultó al primer lugar absoluto, desplazando al Toyota Corolla, que aun contemplando sus tres tipos de carrocerías distintas y sus dos sistemas de propulsión de motores térmicos e híbridos, registró 256.400 autos. En el tercer lugar se encuentra la pick-up Hilux con 214.700, por delante del Toyota RAV4 con 211.000 vehículos, y de otro Toyota, el Camry, está en quinto puesto con 166.200 unidades vendidas.
El crecimiento del Model Y no sólo ha sido producto de su éxito en Europa, sino especialmente en China y Estado Unidos. En el país asiático se han vendido el 35% de todos los Model Y vendidos este año, mientras que en el país originario de la marca, está el 31% de las operaciones globales.

El Corolla, en cambio, bajó un 29% sus ventas en China, y un 10% en Estados Unidos, aunque entre ambos mercados totalizan el 46% de ventas mundiales del modelo más exitoso de la historia de Toyota. Así como muchos competidores de Tesla acusaban a Musk de estar urgido por vender autos a fin de año para que su balanza diera resultados positivos aunque financieramente generara pérdidas, habrá que ver cómo reaccionan ahora quienes pretenden recuperarse de las cifras iniciales de 2023.
Lo que es curioso y paradójico, es que la pelea parece estar librándose entre dos, Tesla y Toyota, pero también entre dos tecnologías, ya que mientras los primeros sólo fabrican autos eléctricos, los japoneses son el fabricante con la menor oferta de autos con esa tecnología y sigue apostando por motores térmicos e híbridos en el mercado mundial. La lucha es cabeza a cabeza. En agosto se conocerá el resultado del segundo round.
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