Lanzaron una campaña para pedir que el Gobierno emita un billete de $10.000 con la imagen de Diego Maradona

La iniciativa partió de las redes sociales y ahora reúne firmas en la plataforma Change.org. Hasta ahora, el Gobierno se opuso a imprimir billetes de denominación mayor de 1.000 pesos

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La imagen del posible billete en homenaje a Maradona
La imagen del posible billete en homenaje a Maradona

Un grupo de personas comenzó a fomentar la iniciativa de que el Gobierno imprima un billete de 10.000 pesos en las redes sociales con la imagen de Diego Maradona.

En la plataforma change.org, surgió un petitorio –como varios que se generan diariamente– que expresa: “Sumá tu firma para que el gobierno emita el billete de $10 mil de Maradona, los pesos serían buscados mundialmente”.

“Hagamos el billete de 10.000 de Maradona, edición limitada a nivel mundial. El gol del siglo”, indicaron los autores de este homenaje al futbolista que falleció la semana pasada. A las 15, la solicitud había sido rubricada por 10.965 personas, según lo que se pudo observar en la plataforma social.

La semana pasada ya circuló en Twitter la idea de que el Banco Central, a cargo de Miguel Pesce, emita un nuevo billete de $10 con la imagen del ex capitán de la Selección nacional de fútbol.

Les vengo a proponer un sueño”, publicó el usuario de Twitter @SoyElProfe7, acompañado de la imagen del billete diseñado para la ocasión. El posteo ya superó los 18.000 “likes” en la red social.

De todos modos, la iniciativa va en contra de la estrategia del Gobierno de sumar billetes de valor mayor de $1.000. En este sentido, cabe recordar que este año se comenzó a implementar la idea de imprimir billetes de $5.000, pero luego quedó descartada. Sin embargo, en septiembre Pesce retomó la idea.

Imprimir billetes de un valor mayor que el actual implica un reconocimiento por parte del Gobierno de la pérdida de valor de los que circulan actualmente por causa de la inflación. Durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, la entonces presidente siempre se opuso a que hubiese un billete de valor superior al de $100, el mayor de la época, ya que de ese modo se hubiera admitido el impacto de la inflación cuyas estadísticas estaban en disputa.

Los impulsores de la idea de un billete de $10.000 entienden que facilitaría las operaciones cotidianas de la sociedad, en un país muy acostumbrado a realizar transacciones en efectivo y con un gran porcentaje de su economía que se encuentra bajo la informalidad.

Cabe recordar que, frente a la cercanía del cierre del año, momento en el que estacionalmente se dispara la demanda de dinero en papel por el pago del medio aguinaldo y el aumento del consumo asociado a las Fiestas, el Banco Central decidió importar de urgencia 170 millones de billetes de $1.000 desde España, dado que la producción local no será suficiente para atender las necesidades del sistema financiero del mes que viene. Este es el segundo contrato de importación pactado en el año, luego de que se encargara la confección de 400 millones de unidades de la misma denominación a la Casa de la Moneda de Brasil.

Miguel Pesce, presidente del BCRA
Miguel Pesce, presidente del BCRA

“El Banco Central encargó la confección de billetes a Casa de Moneda para hacer frente a las necesidades especiales de efectivo que derivan de la crisis sanitaria del covid-19″, confirmaron fuentes del Banco Central ante la consulta de Infobae. En cambio, desde la autoridad monetaria no hubo comentarios respecto de la idea de homenajear a Maradona con un nuevo billete.

El stock de billetes alcanzó niveles críticos este año. Esto se debe a una combinación de factores, entre los que se destacan la caída en el poder de compra de las emisiones existentes por el contexto inflacionario (36% en el último año), la mencionada decisión del Gobierno de no imprimir un billete de $5.000 que admita el avance de los precios y la tendencia de familias y empresas a solicitar más dinero en efectivo durante los días de aislamiento social preventivo y obligatorio.

Además, la inyección de montos considerables de dinero a personas anteriormente no bancarizadas que percibieron beneficios extraordinarios como el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) hizo que no hubiera papel moneda suficiente en circulación.

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