El crédito a las pymes cayó 20% y cada vez son más las empresas con problemas de financiamiento

Según un informe de la Fundación Observatorio Pyme, en el primer trimestre del año crecieron 62% las dificultades de financiamiento de las pymes respecto del mismo período del 2018. A su vez, la actividad cayó 11% y el empleo 6%

Compartir
Compartir articulo
El crédito a las pymes cayó 21% en términos reales en el primer trimestre
El crédito a las pymes cayó 21% en términos reales en el primer trimestre

La falta de crédito y las altas tasas de interés siguen siendo uno de los principales problemas que enfrentan hoy las pequeñas y medianas empresas, ya afectadas por la fuerte caída de las ventas.

De acuerdo con la encuesta coyuntural a pymes industriales que realizó la Fundación Observatorio Pyme (FOP), en el primer trimestre del año crecieron 62% las dificultades de financiamiento, es decir que este año aumentó la proporción de empresas que sufre esta problemática respecto de las que lo sufría el año pasado. Esta situación se da en un contexto de caída cercana al 11% de la actividad en este segmento (medida por sus ventas deflactadas) y de 6% en la planta de ocupados (casi 40.000 empleos perdidos). "Sin dudas, una mayor disponibilidad de fondeo permitiría morigerar los efectos de la recesión, así como también sostener la oferta productiva de todas estas empresas fuertemente generadoras de empleo", aseguró el informe.

En este contexto y en el marco de una política monetaria restrictiva con altas tasas de interés, no sólo nominales sino también reales, habitan los pequeños y medianos emprendimientos productivos

Entre las pymes manufactureras más dinámicas, pertenecientes a sectores más modernos, con desarrollos organizativos más avanzados, de mayor competitividad internacional, y de mayor dimensión, cerca de un tercio requeriría financiamiento para capital de trabajo en los próximos meses, así como alrededor de un quinto de ellas solicitaría alguna línea de crédito para adquirir equipamiento.

infobae

Mientras que, en el promedio de las pymes industriales, sólo un 14% de las empresas prevé solicitar alguna línea de crédito para capital de trabajo en los próximos meses, apenas un 10% requerirá financiamiento para comprar bienes de capital. El porcentaje es mayor en sector como los de maquinaria y equipo; aparatos eléctricos, electrónicos e instrumentos de precisión; y sustancias y productos químicos y farmacéuticos. Los menos dinámicos y que menos expectativa de pedir fondeo tienen son los de alimentos y bebidas, muebles, autopartes, madera y metales comunes.

Sin dudas, una mayor disponibilidad de fondeo permitiría morigerar los efectos de la recesión, así como también sostener la oferta productiva de todas estas empresas fuertemente generadoras de empleo

Si se mide a la empresa por tamaño, la conclusión del informe es que son las más grandes las que piensan más en pedir créditos para capital  de trabajo o inversiones. En general, la mayor necesidad financiera hoy es para capital de trabajo en función de la baja actividad y la necesidad de cubrir obligaciones corrientes.

Cae el crédito a pymes

Estos datos -precisa el informe- reflejan el impacto del contexto macroeconómico en las pymes. De acuerdo con información de entidades financieras disponibles en el Banco Central (BCRA) y recopilados por la FOP, el crédito total otorgado al sector privado no financiero registró caídas en términos reales cercanas al 20% entre marzo y abril respecto de los mismos meses del 2018, los mismos porcentajes en que se contrajo el financiamiento otorgado a pequeños y medianos emprendimientos. Sin embargo, y pese a estas fluctuaciones a la baja, el informe remarca que el crédito en relación con el PBI hace décadas que se ubica en torno al 15%, y para las pymes, el escenario es aún peor: significa el 2% del producto.

Por otro lado, los depósitos del sector privado no financiero no alcanzan el 20% respecto del PBI, de los que aproximadamente un 30% está colocado en plazos fijos de hasta 59 días. El sistema está escasamente alimentado por fondos que luego son asignados, principalmente, hacia letras de liquidez (Leliq). "En este contexto y en el marco de una política monetaria restrictiva con altas tasas de interés, no sólo nominales sino también reales, habitan los pequeños y medianos emprendimientos productivos", remarcó la FOP.

Las altas tasas responden a una elevada inflación, pero son también "un factor adicional de inflación porque incrementan los costos operativos de las empresas y, en mayor o menor medida, se traslada a los precios a los clientes", aunque en el caso de la pymes este pass through suele ser bajo.

Históricamente, algo menos de 40% de las pymes acceden a crédito bancario
Históricamente, algo menos de 40% de las pymes acceden a crédito bancario

De todas maneras, cualquier medida paliativa que mejore este escenario no soluciona los problemas estructurales. Según la FOP, la falta de una política crediticia orientada al sector productivo ha debilitado el surgimiento de nuevos emprendimientos y ha recortado la capacidad de desarrollo productivo de la economía local. De hecho, el stock de empresas en la Argentina es mucho menor que economías con 8, 5 e incluso 4 veces el sistema financiero local, y la tasa de nacimiento de empresas es menor que el promedio en los países de ingresos bajos.

Históricamente, algo menos del 40% de las pymes acceden a crédito bancario de algún tipo. Y entre el 60% restante, la falta de acceso crediticio responde a una diversidad de factores, pero se destaca que aproximadamente la mitad considera que no lo necesita y un 40%
también adjudica dicha situación a tasas de interés elevadas (en la coyuntura actual, por supuesto este factor creció significativamente). Un quinto de las pymes considera que no reúne las condiciones necesarias para solicitarlo (exigencias formales) y un 15% declara que el plazo de financiamiento tampoco es adecuado.

Seguí leyendo: