"En casa tenía el poster de Bati (Gabriel Batistuta), el Cholo (Diego Simeone)… Y el del Bocha (Ricardo Bochini), porque soy hincha de Independiente".
Javier Zanetti devela la admiración que atesoraba el cuarto de la infancia y adolescencia, antes de transformarse en el mítico Pupi. Con algunos de ellos (Batistuta y Simeone) llegó a compartir equipo y camerinos, alegrías y una tristeza profunda, como fue la eliminación en primera fase en el Mundial 2002.
"Fue un vestuario triste después del partido contra Suecia, es que resultaba muy difícil de explicar. Si Argentina lo juega de nuevo, ese partido lo gana 5-1. Son esas tardes que no se dan. Había mucha ilusión con ese grupo, que siempre entregó todo", analiza a la distancia.
Será por eso que de críticas conoce. Y esa sabiduría lo lleva an respaldo firme hacia la figura de Lionel Messi. "Criticar es muy fácil, somo un país muy exitista; si ganás sos el mejor y si perdés no valés nada. En el fútbol a veces no se da, a pesar de que Argentina ha tenido grandes jugadores en los últimos tiempos. Pero va a volver a ganar títulos importantes", asegura.
El último párrafo queda para el actual capitán del elenco nacional y la bandera de la ilusión de cara a Rusia 2018: "A Messi hay que disfrutarlo, basta de discutirlo. Cada vez que piso un país, cuando hablan de Messi es con admiración. Es nuestro, ya se va a dar la satisfacción de que pueda festejar con un pueblo que lo está esperando".