Una falsa amenaza de bomba puso en duda el partido de Lanús-River

Una nueva amenaza de bomba puso en duda un partido que tiene a River como protagonista. Al igual que lo acontecido hace 15 días en la previa del duelo frente a Huracán, se recibió un llamado intimidatorio en el Estadio Néstor Díaz Pérez de Lanús que debe albergar el compromiso por la 15ª fecha.

A más de dos horas del inicio del evento, el 911 recibió un llamado intimidatorio y dio aviso a las autoridades. La Aprevide exigió que la brigada de explosivos inspeccione las instalaciones de la cancha, según le explicaron a Infobae desde la dirigencia del Granate.

Tras constatar que la amenaza era falsa, dieron el visto bueno para abrir las puertas del recinto y el evento se iniciará a las 21:30, tal cual estaba pautado por las autoridades de la Superliga.

"Está el estadio habilitado para jugar el partido. Ya hubo una amenaza de bomba en Huracán-River e iniciaron esta situación de generar confusión. Se hizo la inspección y está abierto el estadio para todos. No hay bomba", afirmó en ruedas de prensa el titular de la Aprevide, Juan Manuel Lugones.

El 28 de enero pasado, cuando el Millonario se enfrentó con Huracán en Parque Patricios sucedió un evento similar en el Estadio Tomás Adolfo Ducó. En aquella ocasión, las fuerzas de seguridad realizaron una requisa que dio negativa pero obligó a retrasar casi dos horas el inicio del cotejo.

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