
Mientras se desarrolla su cuarta temporada en la sala Hasta Trilce, la exitosa obra Berlín en Buenos Aires hace una escala el próximo lunes en el espacio de AMIA. La pieza protagonizada por Jéssica Schultz y Fernando Migueles, una historia teatral-musical sobre la memoria y la identidad, los límites del amor y la supervivencia, se presentará a las 20 horas en el auditorio de Pasteur 633, gracias a la organización conjunta de AMIA Cultura, AMIA Joven y el Museo del Holocausto de Buenos Aires.
La historia se sitúa en la década del 40 en Berlín y tiene como protagonistas a dos artistas alemanes: Hanns (Migueles) y Helga (Schultz). Él es director de la orquesta del teatro de Berlín y colaborador del nazismo, y ella, judía, es una cantante que logra salvarse del exterminio gracias a que Hanns, enamorado de ella, le cambia la identidad y la convierte en una estrella del teatro. Tras la finalización de la guerra y luego de la “caída de Berlín”, en 1945 huyen hacia Buenos Aires para trabajar como servicio doméstico en la mansión de un empresario alemán.
Aunque Hanns intenta recuperar sus vidas como artistas, Helga ya no es la misma. La obra bucea en los confines del ser y la identidad, en los límites del amor y la supervivencia, en las consecuencias del olvido y la memoria, en la revolución que estalla cuando el pasado enterrado irrumpe sin control, y rompe los débiles cimientos sobre los que el presente se apoya, diseñando un futuro incierto, impensado.

“Las historias de amor, de inmigrantes, de la posguerra, sobre las raíces y la memoria, son temas que la gente valora, que tocan resortes personales, ligados a un pasado reciente. Y en este caso, enmarcado en un espectáculo en el que lo musical abraza el relato, conecta pasado y presente, te transporta a lugares a los que el espectador es un protagonista más de la historia”, razonó en una entrevista con Infobae Cultura el director de la obra, Carlo Argento, sobre su interés vigente.
Sobre el repertorio musical que atraviesa la pieza, agrega Argento: “La música es parte de la vida de los protagonistas, es su escape de la guerra, la excusa que los une. Ella es cantante, él pianista y director de orquesta. Las canciones no ambientan la obra. Las canciones forman parte de la historia, nos cuentan el pasado y presente de la vida de los personajes. Las interpretan, ya sea en el teatro de Berlín como en la mansión de Buenos Aires. Tienen una unión indisoluble con el texto, son parte del texto”.
Las entradas para el espectáculo, que fue declarado de Interés Cultural por la Legislatura porteña y por la Secretaría de Cultura de la Nación, pueden adquirirse a través del sitio web de Cultura AMIA, donde también se puede consultar la programación completa de su agenda cultural.
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