Aterrizó en Bogotá uno de los aviones de carga más grande del mundo

El aeropuerto internacional El Dorado, en Bogotá, recibió en sus pistas una aeronave que suele ser escasa en los aires nacionales y que llama la atención de los amantes de los aviones: la llegada de un ejemplar de los aviones de carga más grandes del mundo, el Boeing 747, de la aerolínea KLM Cargo.

Este imponente gigante del aire volvió a aterrizar en la capital colombiana.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.

De acuerdo con la información que publicó Red+ Noticias, este modelo de aeronave transporta productos perecederos desde Colombia hacia mercados internacionales.

El aterrizaje de esta aeronave no solo es un espectáculo visual, sino también un recordatorio del papel estratégico que desempeña el aeropuerto El Dorado en el comercio internacional.

Luis Gómez, jefe del Terminal de Carga de El Dorado, citado por el medio, destacó que la operación de KLM Cargo permite exportar productos colombianos, principalmente frutas tropicales y flores, hacia destinos como Miami y Ámsterdam, para así conectar a Colombia con mercados de primer nivel en Europa y América del Norte.

El Boeing 747 de KLM Cargo, conocido por su capacidad y diseño distintivo, es una pieza fundamental en la cadena de suministro global.

Este modelo, que puede volar hasta 13 horas sin escalas, está diseñado específicamente para rutas largas y para transportar grandes volúmenes de carga.

Este modelo, como resaltó el medio cuenta con una joroba en la cubierta superior y carece de ventanas en la cubierta principal, lo que lo diferencia de las versiones de pasajeros.

El gerente de Operaciones de KLM cargo, Juan David Garzón, explicó, citado por el medio, que este avión tiene la capacidad de transportar hasta 110 toneladas de flores y frutas en un solo vuelo.

En su interior, la bodega superior puede albergar 30 palés de flores, mientras que las bodegas inferiores están destinadas a nueve palés de frutas.

Un incidente aéreo que pudo haber tenido consecuencias graves se registró el domingo 10 de noviembre en el Aeropuerto Internacional El Dorado de Bogotá, cuando un avión de carga Boeing 727-200, que cubría una ruta entre Venezuela y la capital colombiana, colisionó con una de las antenas del sistema de navegación del aeropuerto.

El accidente ocurrió a las 4:21 p. m. en la pista norte del terminal aéreo y, aunque no se reportaron heridos, tanto la aeronave como la infraestructura impactada sufrieron daños significativos.

El impacto afectó el ala izquierda y el tren de aterrizaje del avión. Este tipo de antenas, esenciales para las operaciones de aterrizaje y despegue, cumplen la función de guiar a las aeronaves durante sus maniobras, lo que subraya la gravedad potencial del incidente.

A pesar de los daños sufridos, el piloto logró mantener el control del avión y realizó una maniobra de emergencia que permitió aterrizar de manera segura en la pista sur del aeropuerto a las 5:42 p. m., más de una hora después del choque inicial.

El procedimiento adoptado por la tripulación tras el impacto incluyó una medida estándar en la aviación: permanecer en el aire para consumir combustible antes de intentar el aterrizaje. Esta práctica tiene como objetivo reducir el peso de la aeronave, minimizando así el riesgo de incendio o de daños adicionales durante un aterrizaje de emergencia.

Esta decisión fue clave para garantizar que el avión pudiera tocar tierra sin complicaciones mayores, a pesar de los daños estructurales sufridos.

El incidente quedó registrado en videos difundidos a través de redes sociales, específicamente en la cuenta de X del perfil Breaking Aviation News & Videos. En las imágenes se observa el momento exacto en que el avión golpea la antena, lo que genera una fuerte sacudida en la aeronave. Estos registros despertaron numerosas reacciones en la comunidad aeronáutica y entre los usuarios de redes sociales, quienes han compartido las imágenes viralmente.