Exorcismos, aborto, infidelidad y el secuestro de unos ministros: las revelaciones del general Henry Sanabria

El director de la Policía también habló de que varios ministros del Gobierno de Gustavo Petro estuvieron en riesgo de ser secuestrados durante las protestas en Los Pozos, y de lo que el ministro del Interior llamó cerco humanitario

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El director de la Policía Nacional de Colombia, mayor general Henry Armando Sanabria. REUTERS/Camilo Cohecha
El director de la Policía Nacional de Colombia, mayor general Henry Armando Sanabria. REUTERS/Camilo Cohecha

El director de la Policía Nacional de Colombia, el general Henry Sanabria, el sábado 25 de marzo, se volvió el protagonista de la agenda mediática luego de la publicación de una entrevista en la que, sin reparos, habló de su fe católica, su posición frente al aborto y a la infidelidad. También habló de que varios ministros del Gobierno de Gustavo Petro estuvieron en riesgo de ser secuestrados y de lo que el ministro del Interior llamó cerco humanitario. Otro asunto que tocó fue el exorcismo, que, según contó, fue una herramienta en la lucha contra la extinta guerrilla de las Farc.

El ‘cerco humanitario’ y el posible secuestro de los ministros de Petro

Entre las muchas cosas que dijo el general Sanabria en una entrevista con Semana, el oficial se refirió a la situación que se vivió a inicios de marzo de 2023 en Los Pozos, en San Vicente del Caguán, en la que 78 uniformados de la policía fueron retenidos por la comunidad, la cual el ministro del Interior, Alfonso Prada, llamó un ‘cerco humanitario’. Sobre este particular, el general advirtió que esta fue una exigencia de quienes tenían retenidos a los uniformados y que respaldó la decisión del ministro Prada de llamar cerco humanitario a la retención de los policías.

Para el general Sanabria la retención sí fue un “un secuestro extorsivo, como lo establece el Código Penal”, pues advirtió que “cuando los policías fueron atacados, hubo una asonada y, posteriormente, al ser privados de su libertad, fueron secuestrados”. Ante la pregunta de si hubo grupos ilegales detrás de la retención de los policías, el general señaló que “La Fiscalía está tratando de establecer si hubo presencia de un grupo armado ilegal, porque eso cambiaría la connotación y podría ser una toma de rehenes”.

Sin embargo, según información de El Tiempo, el general Sanabria dijo que: “No eran de la guardia campesina, había disidencias de las Farc y otras personas que aducían ser campesinos. La guardia apareció después y evitó que lesionaran a los policías”.

Sobre el posible secuestro de dos ministros del gabinete de Gustavo Petro, el general contó que, durante el entierro del subintendente Monroy —el uniformado que murió durante las protestas en Los Pozos— en el que estuvieron el ministro del Interior, Alfonso Prada, y el de Transporte, Guillermo Reyes, les llegó información de que los manifestantes pensaban secuestrar a los ministros para presionar al presidente Petro para que hiciera presencia en el territorio:

“En medio de las exequias del subintendente Monroy Prieto hubo unas llamadas de los policías que estaban en el sitio, acompañando al ministro del Interior y al ministro de Transporte. Se nos dijo: “Aquí lo que están diciendo afuera del centro comunal es que van a secuestrar a los ministros para presionar la llegada del presidente. Tenemos que prepararnos porque parece que se los van a llevar. De hecho, están diciendo que traigan vehículos. Ya alertamos al ministro del Interior y creo que la situación es compleja”, le contó el general Sanabria a Semana.

Sanabria entonces dijo que quien se apersonó de la situación fue el ministro Prada, que le pidió al presidente —que había ordenado el alistamiento de las fuerzas especiales de la Policía y del Ejército— tiempo para manejar la situación y finalmente ninguno de los ministros fue secuestrado.

El aborto y la infidelidad, dos cosas que riñen con las creencias del general Sanabria

El general también habló del aborto y de la infidelidad. Ante la pregunta sobre el aborto, Sanabria, fiel a sus creencias, señaló que “ahí chocan dos situaciones bien complejas. Por un lado, lo que dicen los hombres y lo que dice Dios”. Por un lado, explicó, es pecado mortal, pues atenta contra la vida, y, por el otro, según la Corte Constitucional, efectivamente es un derecho. El general argumentó, teológicamente, por qué oponerse al aborto.

“Es un derecho, por supuesto, de acuerdo con la Corte Constitucional. Desde el punto de vista teológico, hay otra lectura. Yo digo: ¿por qué la Iglesia no lo dice abiertamente? Y yo lo digo abiertamente en la institución: ¿Cuál es el problema de abortar? Todos venimos con el pecado original, salvo la Santísima Madre. Entonces el pecado original lo lleva a uno a ser malo desde el vientre materno. El bautismo rompe ese pecado. Un bebecito que muere dentro del vientre materno, al no ser bautizado, no nace al mundo espiritual”.

Sobre la infidelidad, al general Sanabria se le preguntó si es cierto que se están desvinculando de la institución a quienes sean infieles. A lo que respondió: “Ojalá se pudiera, pero no se puede. Porque una persona que es infiel no es prenda de garantía”. Sanabria, entonces, elaboró un poco más su posición advirtiendo que, a su juicio, “el que es infiel en lo poco, es infiel en lo mucho”, pero insistió en que la infidelidad no es una causal para retirar a un uniformado de la Policía Nacional, como si lo era en el pasado.

“No es una causal de retiro de la Policía, como en los años setenta y ochenta. En ese entonces, era una falta gravísima serle infiel a la señora, ahora ya no lo es. Conozco a varias personas que le son infieles a su mujer. No me meto en su vida privada, pero si traspasa los umbrales de lo privado a lo público, tenemos que actuar”.

Exorcismos

“En todos los casos contra el estado mayor de las Farc. Todo fue con exorcismo”.

En otro momento de la entrevista, al general Sanabria se le pregunta por la práctica de exorcismos en la Policía y el papel que estos habrían tenido en la baja de algunos miembros del secretariado de las Farc. Sanabria, antes de contar cómo se valieron de estos para las bajas de Raúl Reyes, Alfonso Cano y el Mono Jojoy, explicó qué es un exorcismo; explicación, que se omite en esta nota para evitar imprecisiones teológicas.

“Gracias a la valentía de muchos sacerdotes, hemos logrado contrarrestar ese mal en la Policía. Por ejemplo, la operación contra el Mono Jojoy. Eso fue exorcismo”, comenzó diciendo el general Sanabria, según lo citan en Semana.

En seguida, contó cómo luego de varias operaciones infructuosas de la Policía y tras el consejo de un sacerdote que le dijo «Mire, es que ustedes no le están pidiendo a Dios. Si ustedes no ponen sus actos en manos de Dios, eso no va a funcionar», fue cuando se comenzaron, dijo el general Sanabria a realizar “las sagradas eucaristías con ese propósito y, desde Bogotá, se hizo el exorcismo”.

“Aquí desde Bogotá se dijo: “Bueno, entonces vamos a hacer una operación”. Los policías que participaron en eso hicieron una oración con ellos. El sacerdote bendijo las armas del Estado con las cuales iba a ser objeto de persecución y funcionó. Claro, porque es la acción de Dios”, continúo su relato el general Sanabria.

Sobre el operativo contra Raúl Reyes, que se encontraba en territorio ecuatoriano cuando fue dado de baja, lo que provocó una crisis entre Colombia y Ecuador, el general Sanabria dijo:

“Como estaba al otro lado, en Ecuador, y se movía hacia la frontera con Colombia, teníamos que tener el punto exacto. El sacerdote tomó la foto de Raúl Reyes e hizo una oración y rompió su acción maligna, y eso lo hizo visible. Ellos se protegen con este tipo de entidades malignas. Lo que no funcionaba empezó a funcionar y apareció la X (la ubicación exacta) donde estaba Reyes en ese momento”.

Cuando se le preguntó por la baja de Alfonso Cano, líder máximo de las Farc en su momento, el general Sanabria advirtió que ese trabajo fue responsabilidad del Ejército, igual dio su versión de los hechos:

“Era un objetivo del Ejército. No nos reunimos con ellos, pero sí desde Bogotá se hizo todo el trabajo de oración. Es una lucha entre el bien y el mal, como dice Juan Pablo de los Efesios, capítulo del 6 al 10 en adelante: “Es una lucha espiritual, no es una lucha contra carne y hueso. Es una lucha espiritual”. Hay mucha gente que no cree en esto”.