La disputa entre EEUU y China por Huawei se extiende a Europa: los aliados de Washington se alejan de la marca

Algunos gobiernos europeos y compañías de telecomunicaciones están siguiendo el liderazgo de norteamericano. Temen quedar expuestos a espionaje chino

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El logo de Huawei en el Word Mobile Congress de Barcelona (REUTERS/Eric Gaillard/archivo)
El logo de Huawei en el Word Mobile Congress de Barcelona (REUTERS/Eric Gaillard/archivo)

La disputa entre Estados Unidos y China por la censura a la gran empresa tecnológica Huawei está extendiéndose a Europa, el mercado extranjero más grande de la compañía, donde algunos países también están comenzando dejar de usar los sistemas de redes de Huawei por razones de seguridad.

Algunos gobiernos europeos y compañías de telecomunicaciones están siguiendo el liderazgo de Estados Unidos al cuestionarse si es que usar Huawei en sus vitales infraestructuras de redes móviles los podría dejar expuestos a espionaje de parte del gobierno chino.

Censuras en Europa podrían significar más presión financiera para Huawei. Esto también podría costar a Europa decenas de miles de millones de dólares, ahora que la región piensa en cómo tener más redes de "5G", diseñadas como base para conectar una gran cantidad de aparatos y dispositivos a internet, desde autos autónomos a robots de fábricas y cirugía remota.

"Europa sigue dividida sobre Huawei, pero el patrón sigue en dirección bastante clara" a la vez que Estados Unidos ejerce presión sobre sus aliados para que la bloqueen, dijo Thorsten Benner, director del Instituto de Políticas Públicas Mundiales, con sede en Berlín.

Las tensiones geopolíticas por Huawei se intensificaron luego que su directora de finanzas, quien también es hija del fundador Ren Zhengfei, fue arrestada el 1 de diciembre en Canadá en conexión con acusaciones estadounidenses de que la empresa violó las restricciones de ventas de tecnología estadounidense a Irán.

Huawei está bloqueada en Estados Unidos desde el 2012, cuando un reporte de la Comisión de Espionaje de la Cámara Baja indicó que era una amenaza de seguridad y recomendó que el gobierno y empresas privadas dejen de comprar sus equipos de redes.

Alemania

Deutsche Telekom, de Alemania, dijo la semana pasada que "toma muy en serio las discusiones mundiales sobre la seguridad de productos de redes de manufacturadores chinos". La compañía dijo que usa varias empresas para fabricar sus redes, incluyendo Ericsson, Nokia y Cisco.

"Estamos reevaluando nuestra estrategia", indicó la firma, en un comunicado significativo por haber sido uno de los mayores entusiastas sobre Huawei, en particular por sus precios económicos.

Reino Unido

Alex Younger, director del Servicio de Inteligencia Secreto (MI6), declaró que el Reino Unido necesita "decidir cuán cómodo va  estar con que China sea dueña de estas tecnologías".

Por su parte, la empresa British Telecom anunció que está removiendo a los equipos de Huawei de componentes claves de sus redes 3G y 4G como parte de su política de no usarlos para su infraestructura principal, un lineamiento que también alcanzará la red 5G.

A su vez, las autoridades también detectaron "nuevos riesgos" en el software de la compañía en el Reino Unido, los cuales supuestamente están siendo "corregidos" por Huawei.

Otros países

El ministro de telecomunicaciones de Noruega declaró que está estudiando la posibilidad de publicar nuevos lineamientos con los requisitos para los operadores de redes.

La agencia de ciberseguridad de Bélgica también está considerando una prohibición a Huawei.

El primer ministro de República Checa ordenó a los funcionarios que dejen de usar celulares Huawei, luego de que la agencia de seguridad notifique que los dispositivos (así como los de ZTE) representan un "riesgo de seguridad".

 

Andrus Ansip, jefe de políticas tecnológicas de la Unión Europea, señaló que "hay que estar preocupados" por estas posibles amenazas.

De todas formas, analistas advirtieron que excluir a Huawei del mercado no será un proceso sencillo, ante el bajo precio que ofrece. Sin embargo, la voluntad política impulsaría el proceso y la decisión de los países líderes presionaría a los estados de menor influencia.

(Con información de AP)