Cepa de covid-19 detectada inicialmente en Colombia se convirtió en “variante de interés” para la Unión Europea

El linaje identificado en enero de este año ingresó a inicio de mayo en la segunda lista en nivel de peligrosidad de mutaciones del virus para dicho territorio.

Compartir
Compartir articulo
Manifestaciones en Colombia, en medio del tercer pico de covid-19. Foto: Colprensa-Sergio Acero.
Manifestaciones en Colombia, en medio del tercer pico de covid-19. Foto: Colprensa-Sergio Acero.

A un año y dos meses del arribo del covid-19 a Colombia ya no es un secreto para nadie que el virus tiene la capacidad de mutar y transformarse dependiendo de la población y condiciones climáticas, entre otros factores, del lugar al que llegue. Tampoco es secreto que, desde inicios de este año, el Instituto Nacional de Salud logró identificar una nueva variante aparentemente detectada por primera vez en territorio nacional y que por estos días está volviendo a dar de qué hablar.

Rebautizada con el nombre de COVID B.1.621, la cepa identificada en enero se ubicó, a partir del 6 de mayo de este año, como la más reciente adición a la lista de variantes de interés para el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades, o ECDC por sus siglas en inglés.

Valga señalar en este punto que, contrario a lo que llegó a interpretarse en un inicio, no se trata de una mutación del virus que encuentre su origen en el país, o por lo menos no se puede asegurar ello todavía. Según explicó la directora del INS, Marta Ospina, “Colombia lo detectó desde enero, lo caracterizó y lo reportó. No se trata entonces de un linaje colombiano, si no de una investigación colombiana”.

Ahora bien, que dicha variante haya entrado en esa lista no significa que inmediatamente se convierta en una forma más peligrosa de la enfermedad; para ello, esa entidad tiene otra lista en la que ubica a las variantes que son motivo de preocupación, como la brasileña, la surafricana o la británica, consideradas más contagiosas, pero no por ello más fatales.

Eso sí, la detectada inicialmente en el país si está en las lista de segundo nivel, donde de acuerdo con ECDC se ubican las formas del covid-19 sobre las que hay “evidencia disponible en cuestiones de propiedades genómicas, así como evidencia epidemiológica o in-vitro que pudiera implicar un impacto significativo en la transmisibilidad, severidad y/o inmunidad , teniendo un impacto realista en la situación epidemiológica de la Unión Europea y el Espacio Económico Europeo”.

No obstante, agrega la descripción de ese listado, se trata de evidencia que todavía es muy preliminar o que está asociada con grandes componentes de incertidumbre. No obstante, todas las variantes conocidas de los integrantes del mismo se mantienen bajo monitoreo, tanto para esclarecer posibles dudas, como para detectar cambios que puedan implicar un mayor nivel de peligrosidad.

En ese sentido, las autoridades europeas advierten que la cepa en cuestión habría cambiado en los últimos cuatro meses, razón por la cual entró en la lista, y ahora cuenta con cuatro mutaciones que la convierten en objeto de interés en el viejo continente. Con esto, señalan también que existen evidencias para pensar que la misma tiene un impacto en la transmisibilidad del virus pero puede ser neutralizada por las vacunas contra el covid-19, por lo que no tiene un impacto en el renglón de inmunidad.

Valga señalar en este punto que de acuerdo con el INS, hasta el último estudio genómico, la variante colombiana había sido detectada en 16 de los 32 departamentos del país. No obstante, también se cuenta con evidencia de que se le ha encontrado en Estados Unidos, México, Curazao, Paises Bajos, Dinamarca, Alemania y España, por lo que se puede inferir que su detección esas últimas cuatro naciones también tiene que ver con su aparición en la lista europea, donde además se le clasifica, a nivel de la Unión Europea, como una cepa de transmisibilidad esporádica, asociada con viajes.

En la misma lista aparecen otras ocho cepas del virus, provenientes de Nigeria, Estados Unidos, Filipinas, Francia, India (que aportó tres diferentes) y una geografía que todavía no ha podido ser determinada. De todas estas, sólo la descubierta por Colombia y la del país galo demuestran cuatro mutaciones de interés. De igual forma, solo la filipina se une a la suramericana en términos del impacto sobre la transmisibilidad del virus.

Tampoco sobra apuntar que existe una tercera lista en la que se ubican cepas de menor peligrosidad, consideradas en estado de monitoreo, como la peruana, la egipcia y la rusa.

SEGUIR LEYENDO: