Personería del Catatumbo entregará ayudas a desplazados que huyeron de sus hogares desde hace nueve días por la violencia

80 familias del municipio de Tibú abandonaron su territorio desde el 28 de diciembre debido a enfrentamientos entre el ELN y paramilitares.

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Imagen de referencia. Defensoría del Pueblo atiende a personas desplazadas en el Catatumbo. Foto: Defensoría del Pueblo Regional Ocaña.
Imagen de referencia. Defensoría del Pueblo atiende a personas desplazadas en el Catatumbo. Foto: Defensoría del Pueblo Regional Ocaña.

El pasado 28 de diciembre 80 familias que habitaban en Santander, específicamente en La Silla, corregimiento de Tibú, y Cerro Mono, zona rural de Cúcuta, huyeron de sus casas por temor a ser víctimas del fuego cruzado entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y un grupo de paramilitares que se disputan el territorio. Este 7 de enero se cumplen nueve días desde que fueron desplazados y la Personería de Catatumbo anunció que este fin de semana esperan poder acceder a la zona para llevar a ayudas a la población.

“El próximo sábado estaremos en La Silla para poder entregar ayudas de emergencia a más de 210 personas de la región, que están pasando estas dificultades. Más de cien menores de edad también enfrentan esta situación”, aseguró el personero del municipio de Tibú, Jhon Ascanio, en entrevista con RCN Radio.

La entidad está haciendo seguimiento a la situación y esperan realizar un comité de justicia transicional en la región para evaluar cómo ingresarán a la zona, ya que aún no tienen un plan definido. Este proceso lo adelanta la Personería junto al Comité Internacional de la Cruz Roja, el Consejo Noruego para Refugiados y otros organismos internacionales y defensores de derechos humanos que también han ayudado a hacer una caracterización de la zona y la población.

Hasta el momento, ni la Personería, ni organizaciones de derechos humanos, ni la Fuerza Pública habían podido acceder al territorio para verificar el estado en el que se encuentran los desplazados, ya que esto desataría un conflicto mayor. De hecho, en este momento las víctimas se encuentran confinadas en una iglesia de La Silla.

El Ejército Nacional está tratando de ingresar a la zona desde que se notificó el confinamiento, pero la misma comunidad ha detenido estos esfuerzos, ya que han recibido amenazas de los subversivos. “Me he comunicado con el Ejército Nacional que está tratando de ingresar a la zona, pero hay al parecer temor de la comunidad, pues les han advertido que al avanzar la fuerza pública se generaría un enfrentamiento que los podría afectar”, declaró Ascanio el pasado 30 de diciembre.

En los últimos días la situación ha cambiado un poco y por eso los militares creen que sí se podrá hacer la entrega de ayudas. Incluso se ha notificado que algunas familias están saliendo de la iglesia para retornar a sus casas, pero lo hacen con miedo ya que los combates son constantes y no parece que vayan a terminar pronto.

“Desde ayer hemos visto que varios núcleos familiares han retornado a sus casas, pero la zozobra y el miedo persiste entre la comunidad por los combates que se presentan entre grupos armados en la región”, contó el personero de Tibú a RCN Radio.

Las autoridades también informaron que de las 80 familias, al menos 30 de ellas son venezolanas. Estas personas huyeron de su país por la crisis social y política que se vive en Venezuela y ahora, en territorio colombiano, son revictimizados a causa del conflicto armado interno.

Este enfrentamiento fue alertado por la Asociación Campesina del Catatumbo (Ascamcat) el pasado 28 de diciembre a través de un comunicado. La agremiación confirmó que la confrontación sería entre el ELN, y el Clan del Golfo, también conocido como las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (ACG).

“Desde tempranas horas del día de hoy 28 de diciembre grupos paramilitares han incursionado violentamente, desencadenado fuertes enfrentamientos con el ELN en el lugar conocido como cerro Mono, entre los municipios del Zulia y Tibú en el Catatumbo nortesantandereano, zona de frontera con Venezuela. Situación crítica que tendría en alto riesgo de inminente desplazamiento forzado, a por lo menos 80 familias campesinas de la zona”, alertó el Ascamcat.

De acuerdo con la organización campesina, el enfrentamiento armado se presentó debido a que el Clan del Golfo quiere recuperar una zona que antes estaba bajo su dominio, y que ahora está siendo operada por un grupo paramilitar conocido como ‘Los Rastrojos’.

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