¿Quién es la mujer que está detrás de la supuesta falsificación de firmas en los contratos de la Comisión de la Verdad?

La funcionaria involucrada logró ganarse la confianza de la cúpula de la entidad e incluso, llegó a tener acceso a información confidencial del conflicto armado colombiano.

Compartir
Compartir articulo
En la imagen, aa comisionada miembro de la Comisión de la Verdad, Ángela Salazar (i). EFE/Ricardo Maldonado Rozo/Archivo
En la imagen, aa comisionada miembro de la Comisión de la Verdad, Ángela Salazar (i). EFE/Ricardo Maldonado Rozo/Archivo

La Comisión de la Verdad informó la tarde del domingo 18 de octubre que habían separado del cargo a una de sus funcionarias por estar, presuntamente, involucrada en irregularidades en algunos contratos de esta entidad de Estado.

En el comunicado el padre Francisco De Roux, presidente de la Comisión, aseguró que “se evidenció una posible acción dolosa contra la institución realizada, presuntamente, por una servidora que inmediatamente se retiró de su cargo”.

¿Pero quién es la mujer que tiene en el ojo del huracán a la Comisión? El diario El Tiempo reveló que se trata de Mónica León, mano derecha del secretario general de la Comisión de la Verdad, Mauricio Katz, con quien se conoció dentro de la entidad cuando ella se dedicaba a toda la gestión administrativa para los miembros en pleno.

Por su buena labor, Katz aceptó que fuera su asistente principal y conexión con la cúpula de Comisión de la Verdad, incluido el padre Roux, quien conocía a Katz desde hace más de seis años.

Al parecer, León está implicada en la falsificación de firmas de Mauricio Katz en por lo menos dos contratos. Este escándalo revelado por el diario El Tiempo hizo que la entidad iniciara una auditoría a 604 contratos, que alcanzan los 20.000 millones de pesos.

La investigación reveló que León, de 30 años y quien tiene experiencia en temas de paz y administración, tenía acceso total a la agenda de su jefe, ficha clave dentro de la comisión.

Además, la asistente de Katz tuvo acceso a temas de presupuesto, contratación e información reservada dentro de la entidad, lista para el informe final sobre memoria del conflicto armado en Colombia. Esta información confidencial, según la investigación periodística, trataba temas como ‘falsos positivos’, reclutamiento de menores, el Proceso 8.000 y el magnicidio de Álvaro Gómez Hurtado -del que las Farc aseguran son sus autores materiales-.

Se supo que Katz tenía un viaje a San Francisco (California), en Estados Unidos, el 27 de septiembre de 2019 y que coincidía con la organización de 500 eventos y otras actividades importantes dentro de la Comisión.

Al parecer en ese momento Katz firmó un documento, sin saberlo, que le daba la autoridad a su asistente de suscribir unos contratos que, con el tiempo, llamaron la atención de la Contraloría General de la Nación.

El ente de control pudo advertir que se llegaron a pagar 546 millones de pesos en tiempo récord sin que se ejecutaran totalmente los contratos. La Fiscalía General de la Nación se encuentra indagando cómo, sin conocimiento de Katz, una empresa creada hace pocos meses obtuvo sendos contratos con firmas falsificadas.

La investigación periodística pudo establecer que uno de los contratos era para temas de pedagogía y se suscribió el 24 de septiembre de 2019. Lo que causó extrañeza es que se pagó en su totalidad dos días después y en pocas horas. Incluso, se usaron documentos reservados del pleno de la Comisión para soportar el reembolso.

Uno de estos detalles hace alusión a los trabajos que lleva a cabo la Comisión de la Verdad con las Fuerzas Militares y la Asociación Colombiana de oficiales en retiro (Acore).

La empresa que tenía como obligación ejecutar este contrato dice que cumplió parcialmente, que son terceros de buena fe y reembolsaron 40 millones de pesos, pero se supo que el pasado 11 de septiembre la mayoría de sus socios renunciaron.

Las investigación siguen en pie y se pudo establecer que la delegada para el Sector Justicia, en cabeza de Santiago Montoya, liderará la auditoría a la Comisión de la Verdad para llegar al fondo de este caso, que ensucia a una entidad clave para conocer lo que pasó en el conflicto armado colombiano.