Clavarse una astilla es molesto y muchas veces duele. Sin embargo, en la mayoría de los casos no ocasiona ningún inconveniente y el mismo cuerpo la elimina. Pero no hay que subestimarlas, ya que, al ser un cuerpo extraño en el organismo, puede traer aparejadas distintas consecuencias.
La decisión de retirar la astilla ubicada por debajo de la capa dérmica depende del tamaño, ubicación, composición, accesibilidad y efectos mecánicos e inflamatorios anticipados del objeto. Muchos cuerpos extraños pueden retirarse en la sala de urgencias. Por ejemplo, todos los materiales extraños en las cavidades de heridas recientes deben arraigarse, desbridar o extraerse con instrumentos. En ocasiones, debe enviarse a los pacientes con cuerpos extraños subcutáneos con médicos apropiados para el retiro de la astilla.
Por qué se inflama la zona por una astilla
La inflamación transitoria es parte integral de la cicatrización normal de todas las heridas. Y es que una pequeña cantidad de cuerpos extraños en una herida causa una respuesta inflamatoria en un esfuerzo por eliminar o contener a la sustancia invasora.
Cuando en el interior de la herida se encuentran grandes cantidades de tejido desvitalizado, cuerpos extraños, bacterias y otros irritantes, esta respuesta protectora se intensifica.
La inflamación excesiva o prolongada puede retrasar la cicatrización de la herida o destruir las partes blandas y huesos subyacentes, dando origen a reacciones periósticas, lesiones osteolíticas, sinovitis y artritis. Si un cuerpo extraño no se disuelve o se expulsa, se encapsulará y creará una cápsula fibrosa. Una vez que se encapsula un cuerpo extraño retenido, cede la inflamación.
Cómo actuar frente a esta situación
Según los especialistas, el estafilococo es una infección común relacionada con las astillas de madera. Por eso es crucial seguir una regla: cuando la persona puede ver la astilla lo mejor es removerla con una pinza limpia; luego de sacarla es importante limpiar la herida y poner una curita o venda para evitar una infección.
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