Tenía una condena por abuso sexual, estaba prófugo, fue a ver a Boca y lo detuvieron

Un hombre con orden de detención vigente por abuso sexual gravemente ultrajante agravado fue recapturado por la Policía de la Ciudad en el control de ingreso al estadio durante el partido entre Boca Juniors e Independiente Rivadavia.

El detenido, identificado como L.A.L., tenía una orden de captura activa desde hace un año por delitos de abuso sexual reiterados en al menos dos oportunidades. La detención fue ordenada por el Juzgado de Garantías en lo Penal N° 6 del Departamento Judicial de San Martín.

El procedimiento se realizó en el marco del programa “Tribuna Segura”, una iniciativa que busca reforzar los controles de acceso en eventos deportivos para evitar la presencia de personas con antecedentes penales.

Según informó la Policía de la Ciudad, en el último año 71 prófugos fueron detenidos en distintos estadios gracias a este sistema.

Por su parte, el secretario de Seguridad de la Ciudad, Waldo Wolff, destacó la recaptura y afirmó: “Es con las familias en las canchas, sin delincuentes. Es con orden”.

El 21 de enero, Braian Daniel “Pelaje” Maidana, de 26 años, fue detenido en el estadio Monumental mientras asistía a un partido de River Plate. Su captura se produjo gracias al mismo programa, que permitió identificarlo en un control de seguridad. Maidana tenía una orden de captura vigente desde 2020, emitida por el Juzgado Federal de Primera Instancia en lo Criminal y Correccional N.º 2 de Lomas de Zamora, por su presunta participación en un secuestro extorsivo cometido en la localidad de Villa Caraza, partido de Lanús.

Según la causa judicial, el 29 de noviembre de 2020, Maidana y un grupo de cómplices retuvieron contra su voluntad a dos adolescentes de 14 y 15 años, exigiendo un rescate de 80.000 pesos y un celular para su liberación. Durante el cautiverio, las víctimas fueron golpeadas y amenazadas con cuchillos. Una de ellas incluso fue advertida de que la iban a dejar desnuda si no entregaban lo exigido.

El hecho se originó la noche del 28 de noviembre, cuando las jóvenes asistieron a una fiesta en el barrio El Tala de Villa Caraza. Poco después, se dirigieron a la vivienda de Maidana y su primo, Ezequiel Navarro, quien también fue identificado como participante del secuestro y sobre quien pesa una orden de captura. Una de las adolescentes pasó la noche con Maidana, mientras que la otra lo hizo con Navarro.

Al día siguiente, Maidana acusó a las adolescentes de haberle robado un celular, lo que motivó una serie de agresiones físicas. Según el expediente judicial, las jóvenes fueron golpeadas con fierros, tiradas al suelo y amenazadas con prenderles fuego el cabello. La madre de Maidana, identificada como L.N., estaba presente durante los hechos.

Los secuestradores trasladaron a las adolescentes a un sótano, donde las obligaron a llamar a sus familias para exigir el dinero del rescate. Las víctimas también fueron forzadas a enviar audios y videollamadas bajo amenazas.

Las pruebas recabadas en la causa llevaron a la emisión de órdenes de captura para Maidana y Navarro, identificados como los principales responsables del secuestro y las agresiones.

Cuatro años después del secuestro, Maidana fue arrestado mientras asistía al estadio Monumental con la camiseta de River Plate. El ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Waldo Wolff, expresó sobre su captura: “La pasión que los condena”, en referencia a su detención mientras concurría a ver a su equipo.

Tras su detención, Maidana fue trasladado a la Comisaría Vecinal 13-A de la Policía de la Ciudad, donde permanece bajo custodia. La jueza Anabel Garmendia avaló su arresto y ordenó su permanencia en la sede policial. Su primo, Ezequiel Navarro, sigue prófugo.