¿Sirve aplicar la primera dosis de vacuna contra el COVID a más personas? Siete claves para tener en cuenta

Se trata de una estrategia de vacunación que Inglaterra implementó por la escasez de dosis y la subida de contagios. Otros países, incluyendo la Argentina, lo están evaluando como posibilidad para proteger cuanto antes a las personas mayores que están en riesgo de complicaciones y muerte

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El cambio en el esquema de vacunación se estudia como posibilidad a partir de los buenos resultados en Inglaterra y para proteger a las personas mayores ante la llegada del invierno REUTERS/Yves Herman
El cambio en el esquema de vacunación se estudia como posibilidad a partir de los buenos resultados en Inglaterra y para proteger a las personas mayores ante la llegada del invierno REUTERS/Yves Herman

La mayoría de las vacunas contra el COVID-19 se deben aplicar en dos dosis para conseguir la protección adecuada contra el coronavirus según los ensayos clínicos que las evaluaron. Pero la realidad de hoy es que el acceso a las vacunas hoy encuentra barreras porque existen dificultades en la producción masiva en los laboratorios y los países más ricos se han acaparado más dosis. Ante el problema de la escasez, ya Inglaterra cambió el esquema de vacunación y decidió aplicar la primera dosis en más personas y postergar la segunda como una estrategia para bajar los contagios cuanto antes. Italia y la Argentina son algunos de los países donde las autoridades sanitarias están evaluando la posibilidad de hacer el cambio.

Aquí van las 6 claves para comprender la medida en medio de una pandemia que ya se llevó más de 2.6 millones de vidas en el mundo. En la Argentina, el 88% de las personas mayores de 60 años, que son los que están en mayor riesgo aún no recibieron su vacuna, y expertos advierten que la segunda ola de la pandemia en el país llegará.

1- ¿Los ensayos clínicos demostraron que se necesitaban una ó dos dosis de vacunas para protegerse contra COVID-9?

Los ensayos clínicos demostraron eficacia y seguridad en varias vacunas que aún siguen en fase 3. La velocidad a la que se desarrollaron las primeras vacunas contra el COVID-19 fue inédita: se lograron en menos de un año. Por ejemplo, la vacuna contra el sarampión se logró recién 10 años desde el descubrimiento del patógeno. Los ensayos indicaron que se necesitan dos dosis para alcanzar una protección alta en los casos de las vacunas contra COVID-19 que fueron autorizadas para uso de emergencia en Argentina, como Sputnik V del Instituto Gamaleya de Rusia y las vacunas producidas por las empresas Pfizer/BioNTech (Estados Unidos-Alemania), AstraZeneca (Reino Unido), y Sinopharm de China.

Ante la escasez de dosis, en Argentina se baraja dar la primera dosis a más personas y postergar la segunda dosis para más adelante. En Francia, se estudia la posibilidad de dar solo la primera dosis a las personas ya contagiadas porque conseguirían protección suficiente para no reinfectarse / REUTERS/Kevin Lamarque/File Photo
Ante la escasez de dosis, en Argentina se baraja dar la primera dosis a más personas y postergar la segunda dosis para más adelante. En Francia, se estudia la posibilidad de dar solo la primera dosis a las personas ya contagiadas porque conseguirían protección suficiente para no reinfectarse / REUTERS/Kevin Lamarque/File Photo

Sin embargo, hoy hay escasez de dosis disponibles de esas vacunas, y existe el peligro de que vuelva a aumentar la propagación del virus, pero aún no está inmunizada la población de mayor riesgo de complicaciones y muertes -los mayores de 60 años. Entonces, para dar la protección más rápido a ese grupo de riesgo, se puede dar la primera dosis a más personas y postergar la segunda dosis para más adelante. Otra opción es dar solo la primera dosis. Si bien con una sola dosis no se alcanza la protección total a nivel individual, se consigue un impacto sanitario importante para reducir la transmisión del virus y bajar la mortalidad en personas con riesgo de sufrir cuadros graves, según evalúa el Ministerio de Salud de la Nación.

2- ¿Dar la primera dosis contra el COVID-19 a más personas sirvió en algún país?

Sí. De acuerdo con el ministro para el Despliegue de Vacunas contra la COVID-19, Nadhim Zahawi, en Inglaterra decidieron diferir la segunda dosis en septiembre pasado con el fin de vacunar a más personas con la primera dosis. Con esta estrategia, ya observaron resultados significativos en la disminución de las internaciones, los casos severos, el contagio y la mortalidad, incluso en mayores de 80 años. Según el funcionario, la primera dosis de vacunas redujo las hospitalizaciones y muertes en un 90 por ciento en ese país. Otra opción es dar solo la primera dosis. Ya han inoculado a 27 millones de personas con la primera dosis de las vacunas de Pfizer/BioNTech y AstraZeneca/Oxford. Sólo el 3 por ciento de la población total ha sido vacunada por completo.

3- ¿Todas las vacunas para COVID-19 pueden incluirse en el cambio de esquema de postergación de la segunda dosis?

La opción del cambio sería en algunas de las vacunas autorizadas hasta el momento. Dos epidemiólogos canadienses sugirieron en la revista New England Journal of Medicine la administración de una sola dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech hasta que todos los grupos de riesgo estén inmunizados. De acuerdo con su interpretación de los datos del ensayo clínico sobre esa vacuna, los investigadores sostienen que se alcanzaría hasta un 92% de inmunización a partir de los 12 días de administrar la primera dosis. Por tanto, habría datos que apoyarían esta posibilidad.

En Inglaterra, subieron los casos a partir del otoño pasado y se detectó la nueva variante. El gobierno decidió acelerar el plan de vacunación con la primera dosis a más personas y postergar la segunda dosis para más adelante. Según el funcionario, la primera dosis de vacunas redujo las hospitalizaciones y muertes en un 90 por ciento en ese país.
Chris J. Ratcliffe/Bloomberg
En Inglaterra, subieron los casos a partir del otoño pasado y se detectó la nueva variante. El gobierno decidió acelerar el plan de vacunación con la primera dosis a más personas y postergar la segunda dosis para más adelante. Según el funcionario, la primera dosis de vacunas redujo las hospitalizaciones y muertes en un 90 por ciento en ese país. Chris J. Ratcliffe/Bloomberg

En el caso de la vacuna de Sinopharm, la segunda dosis debe darse entre los 21 y los 28 días desde la primera dosis y hasta ahora solo está autorizada para las personas menores de 60 años. En el caso de Sputnik V, la segunda dosis debe darse a partir de los 21 días. En cambio la vacuna COVISHIELD, que es producida por el Instituto Serum de la India en colaboración con la Universidad de Oxford y AstraZeneca, admite la posibilidad de espaciar las dosis. Si bien la recomendación del laboratorio productor es de conservar un intervalo entre dosis de 4 a 12 semanas, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda implementar un intervalo de 8 a 12 semanas entre las dosis.

4- ¿Las diferentes vacunas disponibles son intercambiables?

No. Según los datos disponibles -informó el Ministerio de Salud de la Nación, las diferentes vacunas contra la COVID-19 no son intercambiables. Se debe completar el esquema con la misma vacuna con la que inició. La segunda dosis solo está contraindicada cuando se haya desarrollado alguna complicación grave luego de la aplicación de la primera dosis.

5- ¿Qué pasa si se da una sola dosis a más personas y no se da la segunda dosis?

La posibilidad de dar una sola dosis de la vacuna Covid-19 está en estudio solo para personas que ya han tenido el COVID-19. Las personas que tuvieron COVID-19 “desarrollaron una memoria inmunológica tras la infección” y “la dosis única de la vacuna desempeñará así un papel recordatorio”, según la Alta Autoridad de Salud de Francia (HAS), en una recomendación que aún debe recibir el aval del gobierno. Ese organismo recomendó que las personas esperen “más allá de tres meses” después de haber tenido COVID-19, “y preferiblemente seis meses”, antes de inyectarse la dosis única de la vacuna. En cambio, en la Argentina, la cartera de Salud ha informado que aún se desconoce el impacto clínico y sanitario de dar una sola dosis a los ya contagiados. Por lo cual, no se adoptaría ese cambio.

6- ¿Por qué se baraja la medida de postergar la segunda dosis?

Las opciones están en estudio por la escasez de dosis. El viceministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak informó que la provincia de Buenos Aires tiene una cantidad de vacunas disponibles por el coronavirus “hasta el lunes” de la semana que viene, a raíz del faltante de la llegada de cargamentos del insumo médico desde los laboratorios productores.

La subsecretaria de Gestión de la Información del Ministerio de Salud bonaerense, Leticia Ceriani, afirmó: “Es algo que sin dudas está en discusión. De hecho, hay vacunas que tienen una sola dosis. Se está analizando en distintas partes del mundo y a nosotros nos parece sumamente razonable. No hay ninguna duda de que nuestro principal objetivo es vacunar mucha gente con una dosis, más que vacunar poca gente con esquema completo”. Días atrás, también la Ministra de Salud Carla Vizzotti dijo: “Nunca se habló de dar solo una dosis, sino de diferir la segunda dosis. Es una diferencia. No es solo una dosis, sino vacunar más personas con la primera dosis para vacunar a más gente”.

7-¿Hay temores ante el cambio de esquema de vacunación?

En Italia, las autoridades sanitarias también evalúan la posibilidad del cambio al observar lo que pasó en Inglaterra. Aún no todo el mundo está convencido de que la estrategia de la segunda dosis pospuesta sea la opción más inteligente, especialmente porque hasta la fecha no hay datos fiables sobre cuánto dura la protección proporcionada por una sola administración, en comparación con las dos dosis que se habían previsto. Los expertos creen que en el caso de un aplazamiento de unos días o de unas semanas no debería haber riesgos particulares, pero las cosas podrían complicarse en el caso de aplazamientos prolongados. En el caso de un retraso de varios meses, se podría correr el riesgo de llegar tarde con la administración de la segunda dosis, cuando los efectos sobre el sistema inmunológico de la primera dosis ya han desaparecido o disminuido excesivamente. Otros temores están relacionados con la posibilidad de que millones de personas inmunizadas solo parcialmente, a través de la primera dosis, puedan aumentar el riesgo de que se desarrollen nuevas mutaciones de coronavirus que puedan conducir a la propagación de nuevas variantes.

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