Alejandro Vilca, el recolector de basura que asumirá como diputado: “No quiero que lo que vivió mi familia le pase a otros”

La sorpresa electoral de Jujuy obtuvo el 25% de los votos y logró un resultado histórico para la lista del Frente de Izquierda-Unidad. “La gente buscó una oposición real y nos lo reconoce”, aseguró

Compartir
Compartir articulo
"Nunca utilicé traje, mi vida es bastante austera", señala el diputado electo del Frente de Izquierda. El 7 de diciembre jurará en el Congreso
"Nunca utilicé traje, mi vida es bastante austera", señala el diputado electo del Frente de Izquierda. El 7 de diciembre jurará en el Congreso

El encuentro se hizo a las 14 del jueves en un bar del microcentro porteño, a pocas cuadras del Congreso de la Nación, su próximo destino. Alejandro Vilca vino desde Jujuy para terminar algunos trámites antes de jurar del próximo 7 de diciembre como diputado nacional. Ese día, completará una larga parábola que lo llevó desde los barrios más profundos del norte argentino a ocupar un lugar de poder político en el Estado.

La historia de Vilca tiene una narrativa potente que supo graficar Fernando Soriano en un perfil reciente de Infobae. Después de varias encarnaciones (mozo, albañil, heladero, obrero del rubro plástico, vendedor de seguros, estudiante de arquitectura, recolector de residuos y sindicalista), el militante trotkista, de 45 años, pudo quitarle una banca que casi segura al gobernador de la UCR, Gerardo Morales, y lograr la elección más contudente para la historia de la izquierda, consiguiendo el 25% de los votos.

“El domingo de la elección lo primero que hice fue desayunar con mi hijo y ver a mi mamá en el cementerio. Ella murió de COVID-19. La saludé y, obviamente, se me cayó un lagrimón. Con esa fuerza fui a votar. Todo estaba muy tenso, con ansias”, reconstruyó el diputado electo de voz pausada, casi sigilosa.

A Vilca le duele la cabeza. Tal vez por las diligencias administrativas a contrareloj, la falta de almuerzo durante el día (minutos después se comerá en un plato de ravioles en el bar) o el extenso calendario electoral de Jujuy que duró más de 6 meses, entre los comicios provinciales del 27 de junio y las elecciones legislativas del 14 de noviembre. El activista del Partido de los Trabajadores Sociales (PTS), de visita obligada por la Capital Federal, se pidió un vaso de agua y relató los últimos días de un largo proceso que calificó como “muy tortuosos”, con “campañas sucias con acusaciones contra la izquierda”, “diciendo que eramos anti patria y anti familia, al modo del Proceso de Reorganización Nacional” de 1976.

“El gobierno de Gerardo Morales se jugó mucho, como si fuera un plebiscito de su candidatura presidencial. A las ocho de la mañana se abrieron las urnas, y a las ocho y media ya nos robaban las boletas o nos las cambiaban por las viejas de las PASO. En Jujuy siempre se corta la luz o un burro que se cae con las urnas, nunca se sabe. Lo sufrimos hasta último momento”, recordó Vilca a Infobae. “No pudimos pegar un cartel en la calle, eran dos oficialismos; el del Frente de Todos y el de Gerardo Morales. Lo nuestro fue más de boca a boca, recorriendo la provincia. Se repartían impunemente bolsones, plata para comprar votos, era imposible competir con eso. Pero a la gente le pareció repulsivo y demostramos que pudimos hacer una campaña muy diferente a la de ellos”.

- El dirigente “obrero, coya y marrón”, como te definiste en tu última nota en Infobae, finalmente llegó al Congreso. ¿Y ahora qué?

- Y ahora el gran desafío es poder estar a la altura de los grandes debates nacionales. Lo que queremos es que llegue la voz del pueblo trabajador de Jujuy, que muchas veces es silenciada por los mismos representantes que tiene en el Congreso y responden a otros intereses. Nosotros planteamos otro Jujuy, otro país, donde los trabajadores planifiquen las políticas económicas en función de las necesidades sociales.

- ¿Cómo viviste el resultado electoral, con los tuyos?

- Lo vivimos con mucha alegría porque fue un trabajo en equipo muy grande. Los remiseros y choferes de colectivo nos tocaban bocina. Creo que se entendía que la banca no fue una conquista de la izquierda, ni de Vilca, sino de toda la clase trabajadora. Antes de los días de la elección fui a ver a mis compañeros de trabajo. Yo les había dicho que el 11 de diceimbre iba a volver a la recolección. Muchos me dijeron que me iban a estar esperando, pero decían: ‘No queremos que vuelvas, queremos que llegues al Congreso y seas nuestra voz’. Es algo que infla el pecho y te hace pelearla hasta el final.

"Tenemos que construir otro país sobre las ruinas de este sistema que nos oprime a la clase trabajadora", asegura Vilca
"Tenemos que construir otro país sobre las ruinas de este sistema que nos oprime a la clase trabajadora", asegura Vilca

Desde que entró en 2011 al Frente de Izquierda, la figura de Vilca tuvo un crecimiento sostenido, de escalón a escalón. Después de un ruidoso activismo sindical como delegado en el gremio de empleados municipales de San Salvador de Jujuy -del cual fue expulsado por su jefe político, el icónico Carlos “Perro” Santillán- el militante trotkista pasó del 1,93 % de los votos, desde su primera candidatura a gobernador hace diez años, a su actual apoyo de 25 puntos.

- ¿Cómo interpretás este ascenso electoral?

- Fue un trabajo muy de hormiga. No es algo electoral o casual, estuvimos con mucha perseverancia junto a los sectores más explotados de la clase trabajadora jujeña, con los obreros rurales, mineros, estatales y en las barriadas populares. La gente vio que siempre estamos luchando en cada lugar de trabajo, sobre todo ante la juventud, que ve una alternativa diferente ante un régimen que nos ofrece agachar la cabeza y resignarte a que tenes que ser pobre eternamente. Tenemos que construir otro país sobre las ruinas de este sistema que nos oprime a la clase trabajadora.

- ¿Es un fenomeno puramente electoral o hay una estructura política detrás?

- Tenemos una organización previa en el movimiento obrero y las mujeres. Los resultados son mucho más de lo que esperábamos, la izquierda no lo logra habitualmente en ningún distrito. Ha sido histórico para Jujuy, nos desbordó. Hay mucha decepción y bronca con el Gobierno nacional. La gente esperaba que le devuelvan lo que les robó Macri. En la provincia, el gobierno de Gerardo Morales tampoco ha sido una gran alternativa. En Jujuy, lo que se vive es un cogobierno entre el Frente de Todos y Cambiemos donde comparten negocios y familias comunes. Son todos de la misma clase, todos tipos muy feudales. La gente buscó una oposición real en el Frente de Izquierda y nos lo reconoce. Después de dos elecciones con fraude, apostó por nosotros. Dejó de ser un fenómeno casual, es una fuerza política viva.

- Tu militancia política tuvo un paso destacado por el activismo gremial. ¿Cómo es tu relación con los dirigentes sindicales del peronismo? ¿Te apoyan?

- No, todo lo contrario. Temen a la izquierda, la expulsan o la echan. Sus métodos burocráticos impiden que los militantes de izquierda podamos organizarnos o disputar los sindicatos. La gran mayoría de los sindicatos, que son del PJ, le dieron una tregua a Gerardo Morales para avanzar sobre muchas de las conquistas laborales.

Para Alejandro Vilca, la dirigencia sindical del peronismo "le teme a la izquierda"
Para Alejandro Vilca, la dirigencia sindical del peronismo "le teme a la izquierda"

- ¿No se opone el peronismo al gobierno de Gerardo Morales?

- No luchan, hay un silencio. Por eso la gente busca auto organizarse o hacer listas opositoras. Los dirigentes sindicales del peronismo odian a la izquierda. De nuestra parte sabemos que va a ser así, porque peleamos por otro sindicalismo que decida todo desde las bases y que tenga como prioridad recuperar las herramientas de lucha.

- En esta convivencia entre el PJ y Gerardo Morales, ¿dónde se ubica la situación de Milagro Sala?

- Milagro Sala fue tomada como un chivo expiatorio. El gobierno de Gerardo Morales copó toda la Justicia, colocando jueces que antes eran diputados radicales en el Tribunal Superior de Justicia. Utilizó un código contravencional muy duro contra la protesta social que lo redactó el PJ y lo terminaron aplicando ellos. Todos los dirigentes que hacen protestas sociales o sindicales terminan con causas, es una herramienta que se usó con los pueblos originarios que marcharon el 12 de octubre y contra las Madres del Dolor. Nadie puede decir que la Justicia es independiente en Jujuy.

- ¿Milagro Sala es una presa política?

- En este marco, sí. Te digo algo más: muchos de los que estaban con Milagro Sala siguen laburando para el PJ y otros se fueron para la UCR. El PJ tiene esa contradicción; están con un gobierno que supuestamente los persigue.

- Como recolector de residuos, conocés de cerca Alto Comedero, el mismo barrio donde Milagro Sala desarrolló viviendas sociales y su actividad política.

- La política de asistencia social fue muy grande durante el gobierno de Eduardo Fellner. Hacían cooperativas y viviendas que daba soluciones para gente que lo necesitaba. El problema es que usó un método clientelar muy duro y se organizaron como un aparato para-estatal que recibían fondos, por eso no compartimos espacio y tenemos grandes diferencias. En Alto Comedero nosotros hacíamos la recolección y era muy difícil, teníamos que pedir permiso, era una cosa rara (risas). Todo eso quedó hoy hecho un desastre, el Gobierno no hizo más obra pública ni tampoco viviendas. Nosotros los enfrentamos en las elecciones y Alto Comedero es uno de los lugares donde mejor le va a la izquierda. Es un lugar muy pobre y humilde.

El dirigente del PTS evaluó los resultados en Jujuy fueron "desbordó" las expectativas del FIT-U
El dirigente del PTS evaluó los resultados en Jujuy fueron "desbordó" las expectativas del FIT-U

- La repercusión pública, a veces, implica algunas tentaciones. ¿En algún momento te ofrecieron algo para cambiar de partido o de espacio político?

- Nunca se atrevieron a eso. En un partido burgués ya se habrían dado vuelta. En Jujuy es muy común que un día estás en un partido y al otro día en otro, con tal de mantener los privilegios. Nosotros no: somos trabajadores que hacemos política para nuestra clase con un fin que es cambiar la sociedad. También interpretamos que cada lugar son puestos de lucha; antes era mi lugar de trabajo o la calle, hoy es el Parlamento. Cuando uno llega a estos lugares se ve toda la ostentación. Es algo que contrasta mucho con el interior de la provincia, donde hay lugares que te dan ganas de llorar. La gente en el interior vive en casillas de plástico o madera, no tienen para morfar. Con ves contraste es cuando decís: ‘¿loco, cómo puede ser esto?’ Mi vieja me contaba que vivíamos en una casucha apilada con bloques. Un día llovió y se le voló las chapas, tuvieron que ir a buscarlas con mi hermanito. No podemos alejarnos de esa realidad, no quiero que lo que me pasó a mí, lo que vivió a mi familia, le pase a otros.

- ¿Cómo se evita el ‘aburguesamiento’?

- La convicción de lucha y de haber venido desde abajo se mantiene. En el Frente de Izquierda tenemos este sistema en el que cobramos lo mismo que en nuestro lugar de trabajo, lo que nos garantiza que no seamos como la casta política que vive de los privilegios del poder. Nunca utilicé traje, mi vida es bastante austera en Alto Comedero con mis amigos. Creo que eso nunca cambió, y eso que hemos hecho buenas elecciones.

Alejandro Vilca va formar parte de un pequeño bloque de cuatro diputados de izquierda, integrado por Myriam Bregman (PTS), Nicolás del Caño (PTS) y Romina del Plá (PO). El jujeño desembarcará en la Cámara baja con los proyectos e iniciativas que caracterizan a la bancada trotskista, como el salario equivalente al costo de la canasta familiar y el 82% móvil para jubilados. Llega, también, con un agenda propia y problemáticas propias del norte del país: propone el impulso de un proyecto de ley que regule los programas “Interzafra” o “Intercosecha” que le permita a los asalariados rurales “tener un ingreso, aportes jubilatorios y cobertura de salud después de las temporadas de trabajo” en el campo. “Los trabajadores golondrina de Jujuy, Salta y Tucumán tienen que dar vuelta por todo el país para conseguir un trabajo. Esto sería un gran alivio”, plantea el recolector de basura.

infobae

- El Gobierno va a necesitar del acompañamiento de otros bloques en el Congreso, como el del FIT-U, para aprobar sus proyectos. ¿Qué van a exigirle al oficialismo en esas negociaciones?

- Todo lo que sea en favor del pueblo trabajador vamos a apoyarlo, y vamos a rechazar todo lo que vaya en contra de las conquistas y derechos. Ya les digo: no cuenten con nosotros para lo que están discutiendo con el FMI. No vamos a aceptar que haiga (sic) más ajuste al pueblo. Todos los acuerdos con el Fondo solo han traído más desgracia y miseria. El método colonial que tiene hoy el imperialismo es a través de la deuda. Nosotros nos vamos a plantar en el acto del 11 de diciembre, con todo el Frente de Izquierda y organizaicones sindicales y sociales.

- Un sector de la población tiene malestar con la dirigencia política. Un planteo habitual tiene que ver con el reclamo de que haya acuerdos políticos básicos que eviten las crisis recurrentes y ‘volantazos’. ¿Cómo contestarías esta inquietud, teniendo en cuenta que la izquierda plantea un cambio de rumbo radical?

- Nosotros planteamos cambios profundos. La clase trabajadora es la única que puede dar el volantazo, de manera organizada. Seguimos insistiendo que el rol del diputado no solamente es presentar proyectos y propuestas, sino estar junto al pueblo en las calles. Ahí es dónde se definen las grandes cosas; en los momentos de crisis, las movilizaciones cambian gobiernos y planes económicos. La gente tiene que empezar a tomar el poder en sus manos, y no delegar el poder en el funcionario o en un parlamentario.

- ¿Reflexionaron sobre la experiencia del Frente de Izquierda en Salta? Al trotkismo también le fue muy bien en 2013, logrando un resultado histórico, y cayó abruptamente.

- No creo que mantengamos el 25% de Jujuy todo el tiempo. Venimos haciendo muy buenas elecciones, pero la clave está la construcción en el movimiento obrero y en los sectores populares. Eso le da solidez a fenómenos electorales que pueden ser pasajeros. Nosotros creemos que lo de Jujuy es más concreto que lo de Salta. Hay una construcción amplia en toda la provincia, con muchas figuras públicas y fuerza militante. Somos una organización muy inserta en la vida cotidiana.

- ¿Pensaste qué vas a jurar en la ceremonia de asunción?

- Todavía no lo pensé, pero seguramente lo haga sobre la heroica y combativa clase obrera jujeña, por nuestros 30 mil desaparecidos, por la lucha de los oprimidos del mundo y la resistencia de los más de 500 años de nuestros pueblos originarios.

- Dijiste que no vas a usar traje...

- No, nunca (risas). Voy a llevar una grafa (NdR: vestimenta de trabajo). Me lo pidieron mis compañeros... Es como un saludo, una reivindicación de dónde vengo.

Alejandro Vilca va formar ser uno de los cuatro diputados del Frente de Izquierda
Alejandro Vilca va formar ser uno de los cuatro diputados del Frente de Izquierda

Fotos: Franco Fafasuli

SEGUIR LEYENDO