Massa teje en secreto un acuerdo político con Lavagna y Monzó para diciembre

El futuro diputado nacional pretende ampliar sus bases políticas y busca un acuerdo programático con el exministro de Kirchner y el actual titular de la Cámara baja

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Sergio Massa y Roberto Lavagna tienen amistad, pero difieren la estrategia política para enfrentar al gobierno nacional.
Sergio Massa y Roberto Lavagna tienen amistad, pero difieren la estrategia política para enfrentar al gobierno nacional.

La excusa de la comida de la semana pasada en la casa de Sergio Massa fue un encuentro de amigos. Pero de amigos que son políticos y que hoy pertenecen a sectores opuestos. Comieron pescado. Emilio Monzó, presidente de la Cámara de Diputados por Cambiemos, fue uno de los asistentes. No hubo un acuerdo formal. Pero en la sobremesa empezaron a hablar de poder trabajar "juntos" después de diciembre, según informaron a Infobae testigos del encuentro.

Futuro a la vista

El 10 de diciembre próximo Monzó dejará su cargo institucional como presidente de la Cámara de Diputados. Ni la gobernadora María Eugenia Vidal ni el presidente Mauricio Macri le permitieron proteger su poder interno en las listas.

Monzó fue uno de los principales armadores políticos de Cambiemos en las elecciones de 2015. Después, desde la presidencia de la Cámara de Diputados fue el puente con el peronismo para la aprobación de las leyes que necesitaba el gobierno de Macri.

Massa tiene buena relación con Monzó y sabe bien de su malestar silencioso con sus jefes políticos. Jamás lo dirá en público porque Monzó, además, prioriza hoy su responsabilidad institucional como presidente de la Cámara de Diputados.

infobae

En la casa de Massa estuvo el equipo de Monzó, entre ellos los legisladores provinciales Marcelo Daletto y Guillermo Bardón. Según pudo saber Infobae, allí se habló de futuro y de un compromiso de trabajo político conjunto, "salgan como salgan" las elecciones de octubre.

El ex intendente de Tigre, de reciente regreso al kirchnerismo en la boleta del Frente con Todos, pretende mantener el Frente Renovador y que su partido sea el vehículo para el regreso al PJ de peronistas que trabajaban con Macri y que quedaron desencantados por las últimas decisiones electorales que tomó el Presidente.

"Somos la ambulancia de la macrisis. Los caídos de Macri van a venir con nosotros. Es hasta natural que estemos juntos", suele decir en privado Massa. Además de la convicción de trabajar juntos, se habló también de algunos errores del pasado, de la falta de estrategia y de que ahora es el momento porque cambia el escenario político.

Muy de a poco, y en reuniones reservadas, se empezó a analizar la estrategia para sumar más peronismo al espacio que pretende desalojar a Macri de la Casa Rosada en las urnas. Cristina Kirchner no participa en forma activa de esa jugada política. A su regreso de Cuba, donde la ex presidenta visita a su hija Florencia, volverá a su tarea en la campaña: reforzar el núcleo duro del kirchnerismo. Siempre la excusa será la presentación de su libro ¨Sinceramente¨.

Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, la fórmula presidencial del Frente de Todos
Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, la fórmula presidencial del Frente de Todos

Uno de los que planea atraer más dirigentes es Massa, que trabaja en sintonía con Alberto Fernández, candidato a presidente del Frente de Todos. El ex jefe de Gabinete también tiene una excelente relación con Monzó. De todos modos Fernández, según pudo saber Infobae, no quiere hablar ya de alianzas posibles. "Primero las PASO", repite en su oficinas de la calle México.

Sólo en privado hombres como Monzó o Nicolás Massot le habrían dado el visto bueno a Massa a pensar en poder armar un futuro político conjunto. Según afirmó en una reunión privada, Massot ha dicho a algunos dirigentes del PJ que, a partir del 10 de diciembre, el poder del pase lo tienen ellos y no Juntos por el Cambio, como se llama ahora la herramienta electoral de Cambiemos.

Massot, delfín de Monzó que tampoco renueva su banca, llegó de decirles a amigos sus suyos que podría irse a vivir al exterior, incluso si no sigue en política. Nada está cerrado todavía, aunque por el momento viaja a la prestigiosa universidad de Yale para participar de un seminario político que concluye a mediados de diciembre.

Nicolás Massot
Nicolás Massot

Disenso Federal

Tanto Cristina Kirchner como Alberto Fernández están convencidos de que después de las PASO Macri volverá a acercarse al gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, para ofrecerle un cargo en un eventual segundo mandato. Casi que lo dan por descontado.

No piensa lo mismo Roberto Lavagna, candidato a presidente de Consenso Federal que, a su vez, es el otro objetivo.

Una de las razones por las que cerca de la fórmula Fernández-Fernández de Kirchner creen que Lavagna no se terminará de acercar a Macri, es, además de algunas políticas, que el ex ministro de Economía de Néstor Kirchner también sabe de la versión que circula entre los candidatos que indica que el Presidente le habría  enviado un mensaje a los empresarios más poderosos con los que habla: que ayuden a los que quieran, menos a Lavagna y José Luis Espert, también candidato presidencial.

Espert acusó en público al Gobierno de querer boicotear su postulación como candidato a presidente por el frente Despertar, que al final quedó firme.

Massa tiene ya establecido un puente con Lavagna: es el propio hijo del economista, el diputado Marco Lavagna, que formó parte de sus equipos técnicos del Frente Renovador. "¿Con quién piensan que va a ir Marco Lavagna el 11 de diciembre?. Con nosotros, el Frente Renovador va a ser el vehículo de muchos dirigentes", fue una de las frases de Massa en las últimas horas.

También tiene en mente recomponer la relación con la diputada Graciela Camaño, la primer candidata a diputada por la provincia de Buenos Aires de la fórmula Lavagna-Urtubey.

Graciela Camaño (Franco Fafasuli)
Graciela Camaño (Franco Fafasuli)

La relación personal entre Massa y Camaño quedó dañada cuando el ex intendente de Tigre se reunió con Cristina Kirchner para cerrar su regreso al espacio del kirchnerismo. Ellos por ahora no volvieron a hablar, aunque existen contactos entre Camaño y allegados a Massa.

La idea es recomponer la relación con "La Negra" -como le dicen a Camaño- después de 10 de diciembre. Mientras tanto, el camino lo allanarán otros dirigentes. Gane quien gane las elecciones, ese es el camino a seguir mientras sigue la campaña, explican en las cercanías del primer candidato a diputados del Frente de Todos.

La estrategia de sumar a los peronistas heridos de Cambiemos y a varios dirigentes de Consenso Federal es a largo plazo. Sin embargo, el trabajo empezó ahora y en reserva. Nadie admitirá en público estos encuentros, solamente porque esa admisión haría caer inmediatamente la negociación.

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