En el distrito limeño de Miraflores, la Policía Nacional (PNP) intervino a un total de ocho mujeres a quienes ahora se les imputa una investigación por presunta trata de personas en agravio de sus menores hijos.
Según informó el general PNP Carlos Malaver, titular de la Dirección Contra la Trata de Personas, las mujeres se dedicaban a la mendicidad, usando a sus bebés con quienes pasaban largas horas a la espera de la buena voluntad de algunos transeúntes.
“Había algunos recién nacidos y en otros entre dos y tres años de edad. De todos ellos ya se ha hecho a cargo el Ministerio de la Mujer a través del Inabif (Programa Integral Nacional para el Bienestar Familiar) y la Unidad de Protección Especial”, indicó.

La autoridad policial señaló también que las mujeres pretendían generar compasión, especialmente entre los turistas, quienes, conmovidos por la situación, les otorgaban dinero o compraban leche en fórmula para los bebés.
“Se detuvo en flagrancia a estas mujeres que se encontraban operando en la avenida Larco. Verificando la documentación, son padres de los menores y eso es lo que también este de alguna manera nos pone en todo un contexto”, agregó.
Otras intervenciones
En julio de este año, la Policía también intervino a otro grupo de mujeres y hombres, quienes pasaban largas horas en distintos puntos de Miraflores, a la espera de la voluntad económica de quienes pasaban cerca de ellos.
En aquella ocasión, se trataba de migrantes, la mayoría era de nacionalidad venezolana. El general PNP Ulises Guillén Chávez dijo en aquel entonces, que algunas de estas personas prestaban y/o alquilaban a sus niños para pedir dinero.
“Hay que caminar, y mucho, estirar la mano, acercarse a los carros, lavar parabrisas, dar pena y aun así existe el riesgo de que no te den nada. Pero si tienes un niño a tu lado, todo cambia... Si la gente te ve con un niño te ayuda más, esa es la verdad”, confesó uno de los extranjeros.
“Con el dinero que nos hacemos en el día, desayunamos, mi mujer, yo y el niño; ella siempre está pendiente para que no le pase nada”, indicó otro hombre.
La Policía también indicó que se ha identificado casos en los que la familia abandona a un niño en el lugar y se trasladan a otra ubicación para solicitar dinero. De esta forma, tener dos ingresos de dinero.
El jefe policial añadió que estos hechos se catalogan como delito de trata de personas con el propósito de mendicidad. No obstante, demostrarlo resulta complicado debido a que los migrantes argumentan que están simplemente de paso por la ciudad.
Cabe precisar que el Ministerio de la Mujer cuenta con 53 Centro de Acogida Residencial (CAR) para niñas, niños y adolescentes que se encuentran en desprotección familiar. Asimismo, recordar que la trata de persona se puede denunciar ante las autoridades.
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