
Bajo el lema “Nuestras tierras. Nuestro futuro”, en junio se celebra el Mes Mundial del Medioambiente, una fecha impulsada por Naciones Unidas con el fin de concientizar y sensibilizar sobre la importancia de encarar acciones que contribuyan al cuidado del planeta y sus comunidades. Por eso, nos esforzamos por crear un ecosistema donde todos los actores de la cadena de valor de los plásticos trabajen juntos hacia un futuro más sostenible. En la industria plástica se está trabajando fuertemente a través del reciclaje. Según datos del último índice de reciclado, en 2022 el reciclado de plásticos en Argentina evitó que se liberarán más de 434 mil toneladas de dióxido de carbono al año, el equivalente a lo que absorben 21 millones de árboles.
En Ecoplas lideramos el impulso de una economía circular para los plásticos, promoviendo prácticas sostenibles que protejan el medio ambiente y mejoren la calidad de vida de la sociedad. Creemos firmemente en el poder de la innovación y la colaboración para transformar la manera en que producimos, utilizamos y reciclamos los plásticos.
Sin dudas, es clave que desde la cadena de valor de los plásticos, sean protagonistas del cambio en beneficio del medioambiente. Las estadísticas son promisorias: según el Índice de Reciclado elaborado por Ecoplas en colaboración con la Cámara Argentina de la Industria de Reciclados Plásticos (Cairplas), la recuperación de plásticos se incrementó un más de un 400% desde el 2003.
Los plásticos no sólo han cumplido un papel estratégico en la evolución hacia una mayor calidad de vida, sino que también son clave para la eficiencia, y sostenibilidad de la economía gracias a que son esencialmente reciclables.
El cuidado del ambiente necesita el establecimiento de acciones comunes entre asociaciones, empresas y gobiernos, así como implementar políticas públicas que contemplen y promuevan las buenas prácticas del consumo responsable y la economía circular.
La industria del plástico, consciente de su rol, no sólo colabora en educar y capacitar. Como parte de su compromiso, avanza en la incorporación de nuevas tecnologías como el reciclado avanzado, una alternativa estratégica para la revalorización del plástico ya que complementa el método mecánico tradicional responsable de recuperar el material posconsumo, tanto doméstico como industrial, comercial y agrícola.
Se trata de una tecnología superadora que permite obtener insumos reciclados con la misma calidad que el material virgen y contribuye a reducir la cantidad de residuos que se disponen en los rellenos sanitarios, por lo que contribuye a la mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero, con impacto directo en la crisis de cambio climático que afecta al planeta.
Estamos convencidos de que la innovación que aportamos como industria debe seguir siendo el motor de búsqueda hacia un futuro aún más circular de los plásticos. Un futuro donde los plásticos no solo sean parte de nuestra vida diaria, sino que también contribuyan a la protección del medio ambiente y a la mejora de la calidad de vida de las personas.
Últimas Noticias
Sindicato y empleador: Causas de los conflictos laborales
El documento detalla que los tipos de desacuerdo laboral se generan por malentendidos o problemas en la comunicación, sobre los roles y las responsabilidades, cuestionamientos sobre liderazgo y gestión, entre otros

Tuberculosis: la crisis silenciosa que seguimos ignorando
La resistencia no surge de la nada ya que es consecuencia de tratamientos incompletos, malas prácticas clínicas, desabastecimientos, y sistemas de seguimiento debilitados

Cinco idiomas, un mismo puente: así comunica León XIV
El viaje por Oriente Medio reveló el perfil del nuevo Papa: un comunicador sereno, gestual y profundamente atento a la gente

En nombre del “costo político”
En el Reporte de Competitividad Global del Foro Económico Mundial (WEF), el Perú llegó a ubicarse en el puesto 134 de 141 economías en prácticas de contratación y despido

AI First vs. Human First: la batalla invisible por el alma del futuro
Priorizar la IA puede parecer “eficiente”, “rentable”, “innovador”, también implica riesgos: que el ser humano quede en un segundo plano, que los valores se midan por productividad, que las decisiones clave queden en manos de sistemas que no entienden contexto, ética o significado



