Un informe de la Cámara de Importadores de la República Argentina (CIRA) revela que operar un contenedor en las terminales de Buenos Aires y Dock Sud puede resultar entre un 50% y un 500% más caro que en puertos de países vecinos como Brasil, Uruguay, Chile y Perú.
Las tarifas portuarias de Argentina se destacan como las más elevadas de la región, generando una presión significativa sobre la competitividad del comercio exterior del país. Este diferencial afecta tanto a importadores como exportadores, que enfrentan costos operativos mucho más altos para mover sus mercancías, lo cual repercute negativamente en la cadena de valor logística.
El estudio de la CIRA subraya que uno de los principales factores de estos elevados costos es la clasificación tarifaria que se aplica a los contenedores de 40 pies de alto cubicaje (High Cube), los cuales representan una porción importante del comercio internacional. Según la CIRA, estos contenedores han sido considerados por la Administración General de Puertos (AGP) como “fuera de norma”, lo que conlleva cargos adicionales no contemplados en otros puertos de la región. Esta situación resulta en un encarecimiento desmedido que erosiona la competitividad de los productos argentinos en el mercado internacional.
Problemas estructurales y falta de transparencia
El informe de la CIRA también destaca la falta de actualizaciones en los pliegos de concesión, que datan de 1993, y la ausencia de auditorías transparentes sobre la productividad y eficiencia de las terminales. Este atraso estructural ha generado un contexto de opacidad en la gestión de las tarifas portuarias, donde los costos se multiplican sin que los importadores y exportadores puedan constatar las justificaciones detrás de estos sobrecargos. Según la cámara, resulta necesario modernizar la infraestructura normativa y tarifaria para adaptar los servicios portuarios a las demandas del comercio exterior actual.
Además, la CIRA señala problemas en los sistemas aduaneros e informáticos, como el Sistema Informático Malvina (SIM), que generan demoras y sobrecostos adicionales. El informe indica que la falta de coordinación en la presentación de los manifiestos de importación y los elevados índices de inspección física de los contenedores obstaculizan el retiro de la mercadería en los plazos establecidos, lo cual incrementa significativamente los costos de almacenamiento para los operadores de comercio exterior.
Comparativa de costos regionales
El estudio de la CIRA realiza una comparación detallada de las tarifas portuarias en Argentina respecto a las principales terminales de la región. Los resultados muestran que Argentina presenta los costos más altos en la operación de contenedores, particularmente en el manejo de los de 40 pies High Cube. Esta situación se agrava por la estructura fragmentada de costos que aplican las terminales locales, en contraste con los sistemas tarifarios más simples y transparentes de los puertos comparados.
En ese marco, la CIRA concluye su informe enfatizando la necesidad de encarar un proyecto de largo plazo para actualizar la estructura tarifaria y mejorar la eficiencia operativa de las terminales portuarias. El objetivo, señala la cámara, debe ser armonizar el sistema portuario con las necesidades de importadores y exportadores, quienes hoy cargan con todo el peso de los costos en la cadena de valor logística.
El informe sugiere revisar los procedimientos aduaneros y el sistema informático utilizado para agilizar los trámites de importación y exportación, y reducir los índices de inspección física de contenedores, que representan un obstáculo significativo para cumplir con los plazos de almacenamiento gratuito (“forzoso”).
De esta manera, la CIRA advierte sobre la estructura fragmentada de costos y sugiere auditorías externas para asegurar una gestión equitativa y eficiente. Además, la entidad insta a adoptar tecnologías digitales para optimizar los procesos, mejorar la competitividad y alinear los puertos argentinos con las mejores prácticas internacionales.
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