No debería sorprendernos ver a nuestras mascotas dormir más tiempo del que los humanos descansan. En el reino animal, existen varios casos de especies que dedican gran parte del día a sus horas de sueño. Excluyendo el período de hibernación, hay un animal que duerme 22 horas diarias y en el resto de su jornada sólo come y se asea. Es el koala, el animal más dormilón del mundo.
No es, ni mucho menos, el único animal de la naturaleza que duerme tanto. Le siguen muy de cerca estos otros: el perezoso (que duerme unas 20 horas al día), el armadillo (19 horas al día), la zarigüeya (19 horas al día), el lémur (16 horas al día), el hámster (14 horas al día), la ardilla (que iguala las 14 horas al día), el gato (13 horas al día) o el cerdo (13 horas al día).
No nos olvidamos de los perros. Sus períodos de sueño diario están entre las 12 ó 13 horas diarias; sin embargo, su sueño no es continuo sino que está dividido entre el período nocturno y las siestas diurnas.