El América logró una importante victoria de 2-1 sobre los Rayados de Monterrey en el partido de ida de la final de la Liga MX, pero André Jardine, director técnico de las Águilas, se mantiene cauteloso. El estratega brasileño destacó que la definición del campeonato será un reto mayúsculo en el partido de vuelta en Monterrey.
“Es la primera vez que vamos a decidir fuera, es distinto. Cuando piensas en tu propia casa, es importante sacar una ventaja. En cualquier circunstancia, la serie está abierta; diría lo mismo si hubiéramos hecho un gol más o perdido. Realmente puedes cambiar las formas. Hicimos un segundo tiempo distante al primero; la definición está abierta”, comentó Jardine.
El técnico enfatizó la necesidad de mantener la solidez colectiva y apeló a la inteligencia y fortaleza mental como factores clave para el triunfo. “Hay que concentrarse. El segundo partido debe ser consistente; posiblemente, hasta el final se va a decidir en el último tiempo. Quien sea más inteligente y tenga fuerza mental estará cerca de triunfar”, afirmó.
Sobre las controversias arbitrales, Jardine descartó que su equipo haya sido beneficiado por el gol de Kevin Álvarez, donde Henry Martín podría haber obstruido la visión del portero de Monterrey, Luis Cárdenas. “No me pareció un mal arbitraje y fue una final justa. Monterrey hizo un muy buen primer tiempo, pero dimos la vuelta, lo cual era muy importante”, explicó el estratega.
Jardine reconoció que el rendimiento de las Águilas fue irregular, especialmente en el primer tiempo. “Finales son finales, partidos duros y parejos. Monterrey hizo un buen primer tiempo, desaceleró el juego y no encontramos una forma de presionarles, lo cual nos costó un poco. Para mí, era merecido el 1-1; la más clara fue la de Kevin que fallamos”, dijo.
Sin embargo, el técnico brasileño celebró el dominio mostrado por su equipo en el segundo tiempo. “Fuimos soberanos, tal vez no en posesión, pero en chances fueron seis o siete, en contra ni una. Encontrar la fuerza mental para superar un mal momento nos deja cerca de ganar por 3-1 o 4-1. Así son las finales”, reflexionó.
Finalmente, Jardine mostró respeto por el rival. “Monterrey es un gran club, tiene jugadores muy técnicos que pueden desequilibrar un partido. No están ocasionalmente en la final; es justa, pero nosotros también tenemos un buen equipo para hacer un grandísimo partido”, sentenció.
El América buscará coronarse tricampeón en un estadio siempre complicado como el de Rayados, donde la inteligencia táctica y la fortaleza emocional serán determinantes. El desenlace de la final promete ser vibrante y lleno de intensidad.