En el marco de una iniciativa para crear conciencia sobre el accidente cerebrovascular (ACV), #Recuperados es un ciclo de testimonios reales que pone en el centro las historias de quienes enfrentaron esta condición y lograron salir adelante.
Una de las personas que participó de este espacio es Viviana Pulido, una mujer que encontró en la adversidad una nueva perspectiva de vida y que hoy comparte su experiencia para promover la prevención y la acción temprana ante esta emergencia médica.
Un cambio de vida en cuestión de minutos
Todo comenzó con la aparición de unos síntomas que podrían haberse interpretado como inofensivos. Sin embargo, decidió compartirlos con una amiga médica, quien le sugirió tomarse la presión arterial tras analizar la medicación que estaba consumiendo. Cuando el tensiómetro marcó 180/100, recibió una advertencia contundente: “Volá ya a la clínica porque tenés la presión muy alta, podés hacer un ACV”, le dijo esta profesional.
Siguiendo este consejo, Viviana Pulido se realizó una tomografía que reveló un coágulo en la base del tronco cerebral. Estando ya bajo supervisión médica, desarrolló un ACV. Afortunadamente, al encontrarse en el lugar adecuado, los profesionales intervinieron a tiempo para controlar la situación.
“Por suerte, los médicos pudieron actuar rápido y se pudo llegar a solucionar”, señaló la paciente al destacar la importancia de contar con instalaciones adecuadas y profesionales capacitados.
Los desafíos de la recuperación
Su experiencia no terminó con el tratamiento inicial. Días después, enfrentó una ardua batalla en terapia intensiva. Había perdido la movilidad de cuello para abajo y experimentaba una confusión extrema que la desconectaba de la realidad. “Me preguntaban cómo me sentía, y yo les decía ‘me siento bien’, pero tenía la boca torcida, no podía hablar bien”, recuerda.
Con esfuerzo, paciencia y el apoyo de especialistas, logró superar estas secuelas. Hoy, convertida en maratonista, representa a la asociación civil Por una vida libre de ACV en cada carrera, como un mensaje de esperanza y concientización sobre la importancia de actuar rápido.
Qué es un ACV y cómo reconocerlo
El accidente cerebrovascular ocurre cuando se interrumpe el flujo de sangre al cerebro, ya sea por la obstrucción de un coágulo o la ruptura de un vaso sanguíneo, lo que priva a las células cerebrales del oxígeno necesario para funcionar correctamente. Este evento puede causar daños irreversibles en cuestión de minutos, por lo que la velocidad para tratarlo es crucial.
Existen señales de alarma que pueden indicar la presencia de un ACV y que ameritan buscar atención médica inmediata. Reconocer estos signos y actuar rápidamente puede hacer la diferencia entre salvar una vida o minimizar las secuelas a largo plazo.
Entre los síntomas se encuentran la debilidad repentina en el rostro, brazo o pierna, especialmente de un lado del cuerpo; dificultad para hablar o comprender el lenguaje; alteraciones en la visión de uno o ambos ojos; pérdida súbita del equilibrio o la coordinación; y la aparición de un dolor de cabeza intenso y repentino sin causa aparente.
La vida después de un ACV
“Yo era una persona que no me gustaba que me sacaran fotos; si me hubiera muerto, mis hijos casi no tendrían fotos mías ni conmigo”, reflexionó Viviana al describir cómo este evento cambió su perspectiva sobre la vida: la impulsó a valorar cada momento y a priorizar el bienestar personal.
Para quienes han atravesado un ACV, la prevención de nuevos episodios es esencial. Los especialistas recomiendan mantener hábitos saludables, como una dieta balanceada, ejercicio regular, no fumar ni beber alcohol en exceso, así como realizar controles médicos periódicos. Estas medidas, junto con la gestión de factores de riesgo como la presión arterial o el colesterol, son clave para reducir la probabilidad de un segundo evento.
Una campaña para salvar vidas
El relato de Viviana Pulido forma parte de la campaña “Actúa con velocidad” de Boehringer Ingelheim y cuenta con la adhesión de la asociación civil Por una vida libre de ACV, que busca educar a la población sobre la identificación temprana de los signos de este padecimiento y la importancia de un tratamiento inmediato.
Cada testimonio en esta campaña invita a comprender que la prevención es la clave y que actuar rápido puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Para conocer más información, hacer clic acá.