Con champán, Paris Hilton y rap, la moda de Philipp Plein vuelve a Nueva York

Esta vez, Philipp Plein prescindió de grandes espacios abiertos y se decantó por un restaurante en el corazón de Manhattan, The Grill.

Desde sus inicios, hace poco más de diez años, el diseñador quiere, cada temporada, fascinar sin escatimar en los medios. Así, sus más de 200 invitados disfrutaron de champán y ostras, una cena y el tiempo para ver los dos desfiles de la noche.

El primero para su marca Billionaire, creada por el expropietario de Fórmula 1 Flavio Briatore, y luego, después de un miniconcierto de soul, para la firma Philipp Plein, versión otoño/invierno.

Para la segunda, el diseñador alemán ha mantenido su línea directriz, la de una moda llamativa, que no pasa desapercibida con sus piedras bordadas, sus cinturones anchos, chaquetas de plumas fluorescentes, minishorts de cuero y trajes con estampados militares.

Aunque es un fijo de los grandes espectáculos, Philipp Plein sigue siendo totalmente ignorado por los grandes nombres de la Semana de la Moda y en Nueva York evoluciona en una dimensión aparte.

Él asume plenamente esa diferencia e incluso la reivindica, presentándose como una suerte de polvo picapica del mundo de la moda.

El lunes, sus modelos desfilaron al ritmo de la música electrónica y el rock, incluida la canción "Cocaine" de Eric Clapton, bajo la mirada, entre otros, de la mediática Paris Hilton y el actor Mickey Rourke, mientras un dron volaba sobre la sala.

Según el New York Post, uno de los amigos de Kanye West supuestamente logró sacarle 900.000 dólares a Philipp Plein haciéndole creer que el rapero asistiría a su desfile. Este amigo ha negado rotundamente estas acusaciones.

La noche cerró con un breve concierto del rapero Lil Pump, quien también participó en el desfile.

La Semana de la Moda de Nueva York continúa hasta el miércoles.

Con información de AFP.

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